El jugador de Minnesota Timberwolves, J.J. Barea, podría estar pasando sus últimas horas como púpilo de Flip Saunders. En estos renovados Wolves, tras la marcha Kevin Love, las nuevas incorporaciones de Mo Williams, como agente libre, y Zach LaVine, adquirido en el pick 13 del último Draft, apenas disfrutaría de minutos, y su rendimiento no ha sido el esperado.
La franquicia de Minneapolis podría cortar al puertorriqueño si no consiguen el trade. Barea llegó en 2011 tras ser campeón de la NBA con los Dallas Mavericks, pero en Minnesota no ha cumplido las expectativas, promediando 8.4 puntos por partido en 18 minutos. A diferencia de las Finales que jugó frente a Miami, en las que promedió 10.2 puntos por partido, siendo suplente de Jason Kidd.
Con su llegada firmó un contrato de 4 años y 19 millones de dólares, quedándole por cumplir un año para ser agente libre sin restricciones, por lo que la entidad estaría buscando su traspaso, de hecho, pudo haber estado involucrado en el traspaso de Thaddeus Young, pero finalmente optaron por traspasar a Alekséi Shved.
También hemos de destacar que el backcourt de los Wolves estaría formado por Ricky Rubio, quien acaba de rechazar una oferta de renovación, Kevin Martin, Zach LaVine y Mo Williams, por lo que la franquicia no precisaría mas jugadores para cubrir esas posiciones.