Han pasado casi dos meses desde que Michael Carter-Williams cambió la elástica de Philadelphia por la de los Bucks. Aunque ya hizo su debut ante su anterior equipo, nunca había pisado aún la cancha del Wells Fargo Center de Philadelphia vestido con la camiseta del equipo visitante.
Su nivel en los Bucks hasta ayer no era destacable; hacía las cosas bien, cumplía, pero poco más. Le debió motivar en exceso el vídeo que la franquícia pensilvana le dedicó al inicio del choque recordando su paso por la ciudad, porqué no paró de anotar ya desde el salto inicial. El actual rookie del año, que pronto tendrá sucesor, se marchó con 30 puntos, 5 rebotes y 5 asistencias del pabellón, y también con algun silbato… No sabemos si iba dirigido a él o a Sam Hinkie, principal causante del traspaso.
Cómo han cambiado las cosas para Michael en tan poco tiempo… El sophomore ha pasado de ser la pieza clave del ataque de unos pobres Sixers a ser una pieza más de los jóvenes Bucks de Jason Kidd. En Milwaukee juega mucho más cerca del aro y ejerce más de base penetrador que organizador, y no lo hace nada mal. Ayer ante un rival de menor estatura como Ish Smith, le vimos llevando al defensor al poste para jugar de espaldas al aro. Podrá volver a probarlo el siguiente domingo en los Playoffs, donde jugará por primera vez en su carrera.
Un dato curioso, la de anoche fue la máxima anotación de Michael Carter-Williams en el Wells Fargo Center tras jugar dos años con los de Philadelphia. La anterior marca era de 27 puntos en el Knicks-Sixers del pasado 25 de enero. Escogió una buena fecha por hacerlo…
Pero dejando de lado la magnífica actuación de Michael Carter-Williams, el partido de ayer no lo ganó él, sinó que lo perdieron los Sixers. Otra vez se repite el mismo guión de siempre. Tras una buena primera parte donde incluso llegaron a dominar el partido al descanso por una cómoda ventaja (59-52), la segunda parte fue un desastre. Los Sixers no han sabido rematar los partidos durante toda la temporada y, de haberlo hecho tendrían almenos unas 5-7 victorias más en su casillero, actualmente en 18-62.
Esta vez los 30 balones perdidos (season-high) durante todo el encuentro, 21 en la segunda parte; fueron una losa demasiado pesada para los de Pennsylvania, que de no hacerlo, se hubieran llevado la primera victoria de la temporada ante los Bucks (anteriormente 3 de 3 derrotas).
Un desastroso 6-28 desde la línea exterior tampoco jugó mucho a favor de los de Brett Brown, que llegaron a jugar ataques de hasta cuatro triples intentados. Hollis Thompson fue el que lo intentó con más insistencia y terminó con un pasable 3-10. Hasta Henry Sims se atrevió tres veces.
Podríamos decir que Robert Covington acabó con un doble-doble negativo. Se fue con 25 puntos y 10 pérdidas. El jugador «franquícia» de los Sixers sin Noel, se mostró muy concentrado desde la personal (12-13 TL) pero muy propenso a perder el balón en ataque, llegando a acumular una tercera parte de las pérdidas de su equipo. Pero se le perdona, quién no se arriesga no cruza el río. A Ish Smith le tiramos un poco de las orejas por perder otros cinco, aunque se mostró solidario de nuevo con 9 asistencias.
Cosas a destacar, el buen porcentaje desde la personal de los Sixers (27-34) cerca del 80% de acierto. También podríamos remarcar, esta vez sí, el buen inicio de partido de los de Philadelphia.
Nerlens Noel, Jason Richardson, Luc Mbah a Moute y Isaiah Canaan no jugaron por lesión.
Por parte de Milwaukee, aparte del partidazo de Michael Carter-Williams, poca cosa más a destacar. Solo Antetokounmpo, Mayo e Ilyasova pasaron de dobles dígitos anotadores y Henson taponó seis veces a los jugadores locales.
La defensa de los Bucks en la segunda parte estuvo a años luz de la exhibida en la primera. En el tercer cuarto, obligaron a los Sixers a promediar 23% de acierto en tiros de campo. Se aprovecharon de los 30 regalos de los locales anotando 47 puntos tras pérdida.
Milwaukee no se jugará nada en el último partido de la temporada en su pabellón ante Celtics. Solo el orgullo de acabar la temporada con un récord positivo (actualmente 41-40). Su rival en primera ronda de Playoffs serán los Chicago Bulls o Toronto Raptors (en 4a posición del Este ahora mismo).