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— Brooklyn Nets (@BrooklynNets) octubre 29, 2015
Primer partido de la temporada para Brooklyn Nets, que se estrenaba ante su publico enfrentándose a los Bulls. Chicago venía de ganar la noche anterior a Cleveland Cavaliers, merced a un gran tapón de Pau Gasol a LeBron James en los instantes finales del encuentro, y se mostró aún más dominantes en su visita al Barclays Center.
Victoria de los hombres de Fred Hoiberg, 115-100, a pesar de los esfuerzos de Brooklyn por mantenerse en el partido tras muy malos inicios de primer y tercer cuarto.
Chicago se mostró como un rodillo desde la larga distancia, enchufando 14 de 28 intentos triple, y anotando una canasta tras otra en los momentos claves del partido, cuando Brooklyn se llegó a poner a tan sólo 6 puntos a falta de 3 minutos para finalizar el choque.
Jimmy Butler fue el líder de estos Bulls, anotando 24 puntos en un derroche de habilidades técnicas y físicas. El alero estuvo prácticamente impecable en el tiro, anotando 9 de 11 intentos, incluyendo 3 de 3 desde larga distancia. Además, completó su estadística con 6 asistencias y 4 rebotes. Pero no estuvo sólo, ni mucho menos.
Le acompañaron a las mil maravillas Nikola Mirotic y Pau Gasol, autores de 18 y 16 puntos respectivamente, y Derrick Rose, autor de 15 puntos, que parece que ha recuperado esa explosividad que le había sido esquiva la temporada anterior. Desde el banquillo brilló Aaron Brooks, con 12 puntos.
Los locales se presentaban sin Jarrett Jack (lesionado), pero con el regreso de Andrea Bargnani y Markel Brown, que habían sido baja durante toda la pretemporada. Al contrario que Chicago, los Nets tuvieron una noche aciaga en el tiro exterior, quedándose en blanco en la columna de triples, con una estadística de 0 de 9 intentos.
El máximo exponente de los locales, como era de esperar, fue Brook Lopez, con 26 puntos y 7 rebotes, acompañado por Andrea Bargnani, que se fue hasta los 17 puntos y 7 rebotes desde el banquillo, dejando muy buenas sensaciones en su debut con la camiseta de Brooklyn. La otra nota positiva de Brooklyn fue el prometedor inicio de Rondae Hollis-Jefferson, que imprimió carácter al equipo en el segundo cuarto, propiciando un parcial de 36-28 en ese parcial.
Por contra, Joe Johnson estuvo negado de cara al aro, con una serie de 4 de 15 en tiros de campo para un total de 10 puntos y un diferencial de -29 en los minutos que estuvo en pista.
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El partido comenzó con un Derrick Rose incisivo, aprovechándose de su clara ventaja física ante Shane Larkin. Entre él y Nikola Mirotic, que este año tiene luz verde para tirar a discreción, los Bulls se situaron rápidamente 7-0 ante unos Nets que se mostraban muy nerviosos. Hollins paró el partido, pero no sirvió de nada y los Bulls continuaron ampliando distancia de la mano de Gasol y Butler primero, y Brooks y McDermott después. La entrada de Bogdanovic y Bargnani en las filas locales en los últimos minutos de cuarto despertaron algo al equipo, que concluyó el primer invite con una desventaja de 11 puntos, 30-19.
En el segundo cuarto todo cambió. Hollis-Jefferson y Thomas Robinson imprimieron carácter en defensa y resolución en ataque, algo que modificó la inercia del choque. Tonto Brook Lopez como Thad Young se contagiaron de esta nueva inercia en su retorno a pista, y entre ambos llevaron a su equipo a un sólo punto de distancia, 56-55, poco antes de la media parte. Unos tiros libres de Jimmy Butler dejaron el definitivo 58-55 al descanso. El parcial en estos 12 minutos fue de 28-36, siendo el mejor cuarto anotador de Brooklyn en toda la historia de sus openers.
Let’s see that again 👀 @Trobinson0 with the steal, @RondaeHJ24 with the score. #NetsOpeningNight pic.twitter.com/mNNlNRMzZf
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En la reanudación, de nuevo salió Brooklyn con ese aire aletargado de los primeros minutos, y no desaprovecharon la ocasión los Bulls, que impulsados de nuevo por Derrick Rose, Mirotic y el «microondas» Aaron Brooks, pusieron la máxima ventaja de la noche en el luminoso, 84-65, +19, en el minuto 33. Hollins volvió a meter en pista a Bargnani y Hollis-Jefferson, que consiguieron parar la sangría y estabilizar un poco el partido, 71-86 al final del tercero.
En el último periodo, Bargnani siguió tirando del carro ofensivo de Brooklyn, y al igual que pasó en el segundo cuarto, cuando el italiano se sentó, Lopez cogió la batuta, y con algunos tiros realmente complicados, y la ayuda de un motivado Markel Brown, puso a los suyos de nuevo en el partido, 93-100 a falta de 3 minutos para la conclusión. Pero entonces volvieron a entrar en acción los titulares de Chicago, con Butler, Mirotic y Gasol a la cabeza, para acabar de tumbar las esperanzas locales con grandes acciones individuales y situar el marcador en el 115-100 final.
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Chicago se pone con un balance de 2-0. Su próximo partido será mañana por la noche en la pista de los Pistons. Los Nets también jugarán el mismo día, en este caso visitando el campo de uno de los cocos del Oeste: San Antonio Spurs.