Un partido que enfrente a LeBron James con Miami Heat siempre es especial, y todavía más si se trata de dos aspirantes a altas cotas en el Este como en esta temporada. Así pues, los Cavaliers recibían a los de Florida tras unos primeros partidos fuera de casa en los que habían sembrado dudas (1-1 de balance), por lo que no había mejor escenario para resarcirse que el de su pabellón y ante un rival de entidad.
Las emociones fueron las protagonistas en los primeros minutos, con un ritmo frenético, ataques fugaces y el partido roto, los porcentajes eran muy altos y, en consecuencia, el marcador también. Eso sí, la igualdad era patente y apenas había un par de canastas de un equipo antes de que los rivales contestarán y volvieran a igualar el encuentro. LeBron pronto se tiró al equipo a la espalda y ayudó a que se pusieran por delante con 10 rápidos puntos. Kevin Love tomó el relevo cuando James se marchó al banquillo con 9p-6r en los 12 primeros minutos, dejando el marcador en un 23-29 favorable a sus intereses.
En el segundo LeBron volvió y seguía tanto o más On Fire que en el primer período, con lo que la diferencia en el marcador se fue hasta la decena en apenas 3 minutos. Con un ritmo de partido ya más lento y estable, los porcentajes, sobre todo de Miami Heat, bajaron; y de ahí que los de David Blatt se marcharan ligeramente en el luminoso. Wade, sin embargo, se marcó unos dos últimos minutos de mucha calidad ofensiva para recortar la diferencia, que a la media parte era de solamente 5 puntos para los locales, 42-47.
La segunda mitad trajo más de lo mismo consigo, D-Wade y Kevin Love tirando del carro de sus respectivos equipos en el apartado ofensivo, y manteniéndose las diferencias en el marcador durante todo el cuarto. Sin apenas parciales destacables en uno ni otro equipo, los minutos se consumieron y el período terminó con un 67-76 en el marcador.
Con las segundas unidades en cancha para estos primeros minutos del último cuarto, los Cavaliers fueron muy superiores con Tristan Thompson y Dellavedova a la cabeza, y lograron desengancharse en el marcador, consiguiendo amplias ventajas que a la postre serían definitivas. Para cuando los titulares fueron volviendo a pista la diferencia ya era de 17 puntos, haciendo muy difícil la remontada para los visitantes. Faltando unos 5 minutos, los Heat empezaron a bajar los brazos y dar el partido por perdido, por lo que solo quedaba por descubrir cuál sería el resultado final con el que los Cavs sumarían su segunda victoria de la temporada; y este fue de 92-102.
Los mejores en los locales fueron la pareja de estrellas, con LeBron James sumando 29 puntos y Kevin Love añadiendo otros 24 tantos y 14 rebotes. Tristan Thompson desde el banco también cuajó una buena actuación y se quedó cerca del doble-doble, con 13 puntos y 9 capturas de balón.
En los Heat el mejor fue Dwyane Wade con 25 puntos (aunque 7 pérdidas de balón). Le acompañaron Bosh con 16 tantos, Dragic con otros 11 y 6 asistencias, Luol Deng con 10 puntos y 6 rebotes y Hassan Whiteside, que anotó 11 puntos, capturó 9 rebotes y taponó 6 tiros.