Restaban 02:49 para el final del primer cuarto y el Gran Canaria Arena se puso en pie para brindar una gloriosa ovación a Kyle Kuric. El escolta de Pensilvania regresaba a una cancha de baloncesto 166 días después y tras haber superado un tumor cerebral que cerca estuvo de costarle la vida.
Como no podía ser de otra manera, Kuric salió de los bloqueos, recibió para el triple y la metió para dentro. Todo había terminado, Kyle estaba de vuelta.
«Solo estaba contento por salir a jugar. Si el primer tiro entraba o no, no importaba realmente. En el momento en que entró, en el primer partido, estuve muy contento».
Por desgracia el Herbalife Gran Canaria no pudo brindarle una victoria en el día de su regreso, Valencia Basket estuvo muy sólido, y se llevó la victoria por un claro 68-84. Pese a ello, Kyle Kuric se mostraba feliz al finalizar el encuentro, «quería tener las sensaciones, tocar el balón de nuevo. Había pasado bastante tiempo y esto es por lo que juego«.
Kyle Kuric cerró su vuelta con 9 puntos (3/4 t3) y 1 rebote para 9 de valoración en 11:54 minutos.
«Estaba emocionado, no podría estar más contento más allá del resultado. Estoy contento de estar de vuelta con el equipo«