El alero y estrella de los Dallas Mavericks se ha mostrado preocupado por el estado físico de su gran amigo Steve Nash. Recordemos que el base, que ahora viste el púrpura y oro, no jugará durante esta temporada debido a una grave lesión de espalda. Fue en Dallas, cuando en 1998, ambos jugadores comenzaron a forjar su amistad. Allí, Dirk comenzó a destacar como un gran jugador, mientras que Nash se erigió como un más que notable base. No fue hasta el año 2004 cuando este dúo tuvo que separarse por motivos únicamente económicos El resto de la historia ya la sabemos todos, sendos MVP para Nasty Nash fuera de Dallas. Así lo relata el capitán de los Mavericks:
Le envié un mensaje en el que le dije que estaba orgulloso de él y de haber sido su compañero de equipo. Nuestra carrera juntos fue increíble. También le comenté que si me hubiera dicho que un tío blanco de metro noventa iba a ganar dos MVP, le contestaría: ¡estás realmente loco!
Además de esos dos MVP, el jugador nacionalizado canadiense, participó ocho veces en el All-Star. También fue el máximo asistente de la liga durante cinco veces y pertenece al exclusivo club de los ’50-40-90′, consiguiendo durante cuatro años estos porcentajes de: tiro, tiros de tres y tiros libres respectivamente. Nash es un gran base, uno de los mejores de la historia. Dirk se mostró agradecido de haber podido compartir vestuario con él:
Tuve la suerte de jugar con dos de los mejores bases de la NBA, ellos son Jason Kidd y Steve. Debemos tener en cuenta de donde venía (en referencia a Steve Nash). Si comparamos a Nash con Magic o Kidd, ellos eran grandes y tenían una gran capacidad atlética. Steve lo hizo todo con la inteligencia que lo convirtió en un fabuloso tirador. Aunque era divertido, él nunca tiró demasiado y nosotros siempre le animábamos a que lanzara más a canasta durante los partidos.
El capitán de los Mavs también dijo estar muy sorprendido por la lesión de Nash. Según sus propias palabras, el base de los Lakers había estado trabajando muy duro durante este verano, aunque tal y como se puede ver reflejado en sus declaraciones, quizás demasiado para un hombre de 40 años.
Cuando me enteré estaba realmente sorprendido. Sé lo duro que trabajó durante este verano. Lo vi en junio en un partido de fútbol y él incluso estaba en el gimnasio. Sé que Nash estuvo entrenando con Irving. También trabajó en Los Ángeles con Kevin Durant. Estaba en un gran estado físico y por eso me decepcionó tanto enterarme que iba a perder toda la temporada.
Sin duda alguna, estas palabras son las de un amigo, un compañero en la distancia que sufre por ver lesionado a ese enorme jugador que fue y es Steve Nash. Esperemos que el ya histórico base se recupere y al menos pueda despedirse de la NBA tal y como se merece un jugador de su nivel.