Los últimos partidos de los Hornets fueron un espejismo. Tras sendas victorias ante los Knicks de Nueva York y los Boston Celtics, además de una sufrida derrota en la segunda prórroga frente el, probablemente, segundo mejor equipo de toda la NBA, los Memphis Grizzlies, parecía que los de Carolina del Norte habían llegado a un punto de inflexión en la temporada, pero tras el partido de anoche, hemos podido comprobar que no ha sido así.
En el primer cuarto comenzaron los Nets muy enchufados, sobre todo en la figura de Joe Johnson, quien anotó los primeros 7 puntos de su equipo en tan solo un minuto y medio. Los Hornets se apoyaban en los de siempre, Al Jefferson y Kemba Walker, para tratar de alcanzar en el marcador a unos Nets que iban como un tiro. El resultado al término de los primeros doce minutos fue de 32-17, y ya se antojaba lo que iba a ocurrir en el Time Warner Cable Arena.
Tras un fugaz descanso y la arenga del coach Steve Clifford, el equipo local salió a la cancha mucho más concentrado y ajustando su defensa hasta el punto de dejar en 20 puntos a los de Hollins. Por parte de los Nets destacó la pareja de bases, Jarret Jack y Deron Williams, que, si bien no sobresalieron en la parte estadística del juego, dirigieron a su equipo con firmeza y eficiencia. Por los Hornets destacaron de nuevo, Big Al y Mr Step Back y un sorprendente Gary Neal, que trató de ‘responder’ a Joe Johnson con 6 puntos en un minuto y medio también. Los equipos se marcharon al túnel de vestuarios con un apretado marcador de 52-52.
El tercer cuarto del partido fue idéntico al primero, unos Nets indefendibles que anotaban desde cualquier punto de la cancha y unos Hornets con serios problemas tanto para defender los tiros de sus rivales como para atacar, con un juego en estático muy trabado y serias dificultades para conseguir tiros abiertos sencillos. El resultado después de estos minutos de juego fue prácticamente el mismo que en el primer cuarto, 33-17, lo que dejaba un marcador de 85-69.
Con el partido ya finiquitado, locales y visitantes decidieron dar minutos a los jugadores del banquillo para dar descanso a sus titulares, dejando un cuarto sin mucha historia que solo serviría para dejar el marcador final en 114-87.
Los mejores del encuentro fueron, por supuesto, Joe Johnson por parte de los Nets, y Michael Kidd-Gilchrist por los Hornets. El primero firmó 22 puntos (con 4-6 en triples), 3 asistencias y 7 rebotes, mientras que el alero consiguió 15 puntos saliendo del banquillo, sumado a 5 rebotes y 1 asistencia.
El próximo partido de los de Brooklyn será en casa y ante los vigentes subcampeones de la liga, Miami Heat el próximo martes (en España la madrugada del martes al miércoles). Los Hornets, por su parte, viajarán a Cleveland para enfrentarse a los Cavaliers de LeBron y compañía el próximo día 16, en un partido que puede ser la debacle para el conjunto de MJ.
Para finalizar, os dejamos un vídeo con lo mejor del encuentro.