La NBA Development League es la “segunda división” de la NBA. Cuenta con 18 franquicias repartidas por todo EEUU. Esta liga, concebida en 2001, es donde se reúnen jugadores de todas partes del mundo (mayoritariamente Estados Unidos) con capacidades para ganarse un puesto en la mejor liga del mundo. Suelen recalar en esta liga jugadores novatos, recién salidos de la NCAA, que no han conseguido un puesto NBA en la Summer League ni un contrato garantizado.
El sistema es sencillo, las franquicias NBA tienen sus equipos vinculados en la D-League y son las que deciden a quien subir (“Call-Up”) o a quien bajar (“Assignment”) en función del rendimiento del propio jugador, o de las necesidades de la franquicia en caso de traspasos o lesiones. Este sistema de afiliaciones fue aprobado en 2005 por el anterior comisionado David Stern. Los vigentes campeones son los Fort Wayne Mad Ants, los cuales ganaron a los Santa Cruz Warriors en una serie al mejor de tres partidos (2-0).
Como dato significativo, han sido 25 jugadores con experiencia en la D-League los que han ganado un anillo NBA. Muchos de ellos con papeles meramente testimoniales, pero en el caso de JJ Barea (2009-10 con Dallas), Chris Andersen (2012-13 con Miami) y Danny Green (2013-14 con San Antonio), estos jugadores tuvieron una faceta muy importante para decantar el campeonato a favor de sus equipos. Significativo también es el caso de San Antonio Spurs, que cuando fueron campeones en la temporada 2013-14, contaban con 6 jugadores con pasado en la Liga de Desarrollo (el mencionado Green, Aron Baynes, Austin Daye, Damion James, Patty Mills y Cory Joseph). Como curiosidad acerca de esta liga, el jugador más alto en formar parte de un partido de la liga es el tanzano Hasheem Thabeet, con sus 2,21 metros de altura.
El primer jugador en ser drafteado por la NBA procedente de la D-League fue Mike Taylor, drafteado por los Portland Trail Blazers en la 55ª posición del Draft de 2008. El siguiente (en 2010) es un gran conocido de la afición bilbaína, el ala-pívot Latavious Williams, drafteado por Miami Heat y después traspasado a Oklahoma con la 48ª posición. El primer call-up en la historia de la D-League lo protagonizó Chris Andersen, el cual recaló en Denver Nuggets vía Fayetteville el 21 de noviembre de 2001. Desde entonces, se han producido 397 call-ups, teniendo lugar el último hace escasos minutos al final de este artículo cuando Chris Johnson, alero de los Río Grande Valley Vipers ha firmado un contrato de diez días con Milwaukee Bucks.
En cuanto a los assignments, a partir de la temporada 2011-12, jugadores con contrastada experiencia NBA, veteranos, podían ser asignados a la D-League con su propio consentimiento. El primer jugador en realizarlo fue Yi Jianlian, asignado a los Texas Legends dos partidos antes de volver a los Dallas Mavericks.
El año inicial, 2001, tuvo 8 jugadores llamados por la NBA (8 call-ups). El récord lo tiene la temporada 2011-12 donde fueron reclamados 43 jugadores (60 call-ups). Hay que matizar que el contrato estándar suele tener una duración de 10 días. Si la franquicia queda contenta al finalizar dicho contrato se le realiza otro, y si no, se le envía de vuelta a la D-League. Por ello hay jugadores que realizan el tránsito NBA/D-League varias veces a lo largo de la temporada.
Esta temporada podrían superarse los registros de la 2010-11, ya que al cierre de edición, se han producido un total de 43 call-ups (31 jugadores). La mayor diferencia entre esta temporada y la 2011-12 es el impacto inmediato de los jugadores. Aquel año salieron muy buenos jugadores como Danny Green, del cual hablamos antes, Gerald Green, alero de los Phoenix Suns (entonces en New Jersey Nets), Alan Anderson (alero de Brooklyn Nets) o el escolta de los Pacers Donald Sloan. Estos jugadores no tuvieron en ese momento la notoriedad que ahora tienen call-ups como el pívot de los Miami Heat Hassan Whiteside, el ala-pívot de los Philadelphia Sixers Robert Covington o el base de los New York Knicks Langston Galloway.
Estos tres jugadores superan los 11 puntos de media (13.2 anota Covington, líder entre los call-ups) y Hassan Whiteside alcanza los 10.1 rebotes de media, promediando un impresionante doble-doble por partido. Para el recuerdo queda el partido donde el pívot procedente de la universidad de Marshall colocó 12 tapones, consiguiendo un triple-doble (14 puntos, 13 rebotes) el 25 de enero ante Chicago Bulls. Su último partido, el día 4 de marzo contra LA Lakers, fue una actuación estratosférica, con 18 puntos, 25 rebotes (19 defensivos) y 5 tapones. Este jugador está pasando de ser un relegado en la D-League, incluso llegando a jugar en Líbano en 2013, a ser una referencia en la NBA y un jugador muy a tener en cuenta para futuras temporadas.
Robert Covington, el ala-pívot/alero de los Sixers, está siendo una de las notas más positivas del equipo, pasando de los 10 puntos en 13 de sus últimos 14 partidos. A pesar de provenir de la Liga de Desarrollo, tomó parte en el Rising Stars Challenge de este año, con 2 puntos, 3 rebotes y 4 robos en poco más de 16 minutos y medio. Sin duda Covington ya había dado que hablar el año pasado en el ámbito de la D-League tras haber sido nombrado MVP del All-Star, Rookie del año, y formar parte del First Team tanto de novatos como del total de la liga.
En cuanto a Galloway (el único rookie de los tres), es uno de los pocos jugadores de los Knicks que mantiene el tipo y se aprovecha de la dinámica perdedora del equipo aprovechando sus minutos como el que más. Rebotea mucho para ser exterior (4.7 rebotes por partido) pero su mayor lacra quizás sea la de sus porcentajes de tiro, que son muy deficientes. Si consigue una mejora por esa vía, Galloway tendrá minutos asegurados en la esfera NBA. Aún así, está gozando de una cantidad de minutos privilegiada que seguro le hará mejorar en todas sus facetas. Por suerte cuenta también con nuestro compatriota Jose Manuel Calderón como guía en su estancia en New York.
Otras actuaciones que merecen ser mencionadas son los 26 puntos (10-13 en tiros) y 4 robos de Tyler Johnson hace escasamente cuatro días en el Miami Heat-Phoenix Suns. Ese mismo día Jordan Hamilton, call-up de los Clippers, anotaría 10 puntos en 26 minutos en la victoria de su equipo ante Minnesota Timberwolves. También Jordan Clarkson, base de los Lakers que ha pasado por el filial (Los Angeles D-Fenders) está teniendo un papel importante en la rotación angelina, promediando 15.8 puntos en sus 5 últimos partidos.
Sin duda este año ha contado con protagonistas de excepción provenientes de la D-League. Jugadores con excelentes referencias a nivel universitario deseosos de disputar cada minuto de sus carreras profesionales en la mejor liga del mundo.