Los fanáticos de los Sacramento Kings han tenido, como en casi la última década, pocas razones para celebrar esta temporada. El cuadro púrpura aún sigue en proceso de construcción, sin embargo, victorias como la de anoche frente a los Charlotte Hornets (101-91) devuelven la sonrisa por un par de horas a los asistentes del Sleep Train Arena.
El quinteto dirigido por George Karl sabía que enfrentarían un partido complejo ante los Hornets, que venían con la sangre en el ojo desde el último cruce entre los dos elencos, donde los Kings (el 11 de marzo) vencieron en el este por 113 a 106. Estas dos derrotas ante los Kings, considerados como uno de los equipos débiles de la temporada, le ha costado caro a Charlotte pues sin esas victorias se ha alejado del octavo lugar en el este, que pelea con Boston e Indiana. Al final del encuentro Karl recalcó lo importante de esta victoria:
«Hablamos esta mañana de cómo esto iba a ser un partido intenso… Les ganamos hace un par de semanas, (pero) todavía están en la pelea por los playoffs, y están en el camino tratando de encontrar una victoria. Jugamos duro y ganamos el juego por nuestra defensa».
El liderazgo del partido se marcó en la primera parte, donde Sacramento logró 8 triples (su mejor marca en la temporada), aunque después solo anotaría uno, muestra de por qué esa opción no es la más buscada por los Kings. Antes del descanso los locales lideraban 57 a 46. En los Kings, brillaron Rudy Gay con 33 puntos y 9 rebotes, Derrick Williams con 13 puntos (y dos volcadas impactantes) y Reggie Evans con apenas 4 puntos en 20 minutos, pero con 16 rebotes que marcaron diferencia. Gay habló de su gran partido y de lo bien que se sintió al final:
«Ha sido una temporada larga y tenemos que poner más alegría a jugar al baloncesto… Una victoria es buena y cuando ganamos como lo hicimos mediante la ejecución de jugadas excitantes, metiendo triples, y jugando de la manera que el entrenador quiere, hace que sea más fácil».
De hecho, el tema de los tableros le pesó mucho al cuadro (cuyo propietario es Michael Jordan), apenas bajaron 36 rebotes frente a los 48 de los Kings y no tuvieron la oportunidad de tener muchas segundas oportunidades. Los mejores anotadores de los visitantes fueron: Gerald Henderson con 20 puntos, Kemba Walker con 18, Al Jefferson marcó 17 y Michael Kidd-Gilchrist tuvo 13, con 7 rebotes (el mejor de su equipo). Ningún intento de Charlotte logró acortar sustancialmente la ventaja y siempre vieron a los Kings por debajo del hombro. El coach Steve Clifford, Henderson y Walker hablaron de esta dolorosa derrota:
Clifford: «Si vamos a tener la oportunidad de ganar partidos, no nos podemos dejar destrizar en el cristal como lo hicimos esta noche… Nos superaron un poco. Jugamos con un nivel de frustración real que afectó nuestro juego»
Henderson: «Hemos perdido nuestro camino un poco últimamente… Nuestra defensa no es tan consistente como solía, y la manera en que empezamos los partidos no es cómo tenemos que jugarlos. No hemos salido y jugado bien al inicio de los partidos»
Walker: «No podemos bajar nuestras cabezas. Tenemos que salir y simplemente tratar de ganar la próxima»
La próxima para Charlotte será el domingo en Minnesota, mientras los Kings (aún con la duda de cuándo tendrán de vuelta a Cousins, lesionado en su pantorilla derecha) recibirán a Washington el mismo día en su patio.