Deron Williams lo tenía claro tras el partido:
«Sabíamos que era un partido importante, vosotros (periodistas) sabíais que era un partido importante», dijo el base en declaraciones recogidas por NBA.com. «No era un partido como cualquier otro, en que si pierdes cedes una victoria en la clasificación. Éste contaba doble. Ahora ellos tienen la ventaja si hay empate.«
Y es que con esta contundente victoria a domicilio, Boston no solo recupera la 8ª plaza del Este, sino que además se lleva la serie ante Brooklyn, al que ha vencido 3-1 este año. En el lado opuesto, Brooklyn ve como ha dejado escapar una oportunidad de oro, contra un rival directo y ante su público.
Evan Turner fue el gran protagonista para los visitantes. El alero realizó completó un gran partido, registrando el segundo triple doble de su carrera con 19 puntos, 12 asistencias y 10 rebotes.
El ex de Indiana y Sixers estuvo muy bien acompañado por Avery Bradley, 20 puntos y 7 rebotes, y Zeller, 18 puntos y 7 rebotes.
Mención especial para la aportación desde el banquillo de Kevin Olynyk, que además de anotar 18 puntos en poco más de 16 minutos de juego, supuso un auténtico quebradero de cabeza para la defensa local, incapaz de frenar los movimientos de Pick & Roll del jugador de segundo año.
Los Celtics cortan así una racha negativa con 3 derrotas consecutivas.
«Me gustó mucho como hemos respondido tras perder duramente el partido de anoche y tras no jugar un gran baloncesto en los primeros 6 minutos», dijo Brad Stevens a NBA.com.
El entrenador de Boston también alabó el gran juego combinativo y equilibrado de su equipo, que anotó un destacable 51.1% en tiros de campo. Con esta victoria, los Celtics acumulan un registro espectacular en el segundo partido de los back-to-back. Los de Stevens han ganado con éste, 8 de los 9 partidos que han jugado así, incluyendo los últimos 5.
El que no estaba tan contento con el rendimiento de su equipo era Lionel Hollins.
«A la poste, ni los pudimos defender, ni pudimos anotar«, dijo el consternado entrenador de los Nets al NYPost.
«Ya lo había dicho antes, nos cuesta adaptarnos al juego de los Celtics», dijo Hollins a Examiner.com. «Nos pasó en pretemporada, y en la temporada regular, sólo les hemos vencido en una ocasión, pero tuvimos que remontarles 13 puntos.»
Los Nets vieron como varios de sus jugadores claves se veían incapaces de anotar una canasta, y el equipo acabó con un más que decepcionante 36% en tiros de campo, incluyendo un alarmante 1/17 en triples. Sólo su buen rendimiento desde el tiro libre, 26/30 para un 86%, evitó que la hecatombe fuera aún mayor.
Brook Lopez fue, un día más, el mejor jugador de Brooklyn. El pívot sumó 31 puntos, con 12/19 en tiro, para convertirse en el máximo anotador del encuentro. Además, con esta anotación, Lopez se convierte en el 5º máximo anotador de los Nets en la NBA, superando a Kerry Kittles.
En contraposición, Lopez sólo capturó 4 rechaces y se vio claramente superado en defensa por Zeller y Olynyk.
«Su pívot (Olynyk) se abría y el base penetraba en los Pick & Roll«, dijo Lopez en declaraciones recogidas por TheBrooklynGame.com. «Esto no es algo a lo que mucha gente esté acostumbrada a defender.«
Deron Williams rozó el triple doble, el que hubiera sido el primero en su carrera, al totalizar 10 puntos, 10 asistencias y 9 rebotes. No obstante, el base se quedó en un 2/6 en el tiro. Tampoco tuvieron su noche en este aspecto Joe Johnson, Bojan Bogdanovic, Jarrett Jack y Alan Anderson, que acumularon en su conjunto un paupérrimo 9/43 en el lanzamiento. Sólo Young, con 12 puntos (8 de ellos en el primer cuarto) y 9 rebotes aportó algo de consistencia al juego local.
La derrota deja muy tocada la moral de los Nets, que vieron como su público les abucheaba en ciertas fases del partido.
«Definitivamente apesta que no podamos dar a nuestros fans algo por lo que animar, algún motivo por lo que estar emocionados por asistir a los partidos, y eso empeora mucho las cosas», dijo Deron Williams a NBA.com.
Lo cierto es que Brooklyn comenzó bien el partido, dominando el primer cuarto por 23-28 merced a los 16 puntos de su dupla interior, Young y Lopez. Sin embargo, un parcial de 7-0 para Boston en el inicio del segundo periodo igualó las cosas entre ambos conjuntos, pero con los Celtics tomando la iniciativa gracias a la gran labor de Evan Turner.
Los hombres de Brad Stevens se fueron al descanso con una ventaja de 54-49, tras un triple buzzer-beater de Olynyk. En la reanudación, Turner siguió apretando el acelerador, con Zeller como compañero de fechorías. Sólo Lopez, que anotó los 13 primeros puntos de Brooklyn en el tercer cuarto, ofrecía resistencia, aunque infructuosa. Un parcial de 9-0 para los visitantes ponía a Boston en +14, 71-57, a mediados de cuarto. Los Nets apretaron y lograron ponerse a sólo 5 puntos, pero la remontada no logró cuajar y entre Olynyk y Crowder devolvieron la ventaja de 9 puntos al final del tercero, 83-74.
La ventaja se mantuvo en los inicios de los últimos 12 minutos, hasta que una nueva aparición de Olynyk, con 7 puntos consecutivos, disparó la ventaja de visitantes hasta los 16 puntos, 96-80, a falta de 8 minutos. El mazazo fue definitivo para los hombres de Lionel Hollins, que veían como sus principales nombres no respondían al reto, dejando escapar una victoria que hubiera supuesto un paso adelante incalculable en la lucha por los Play Offs.
De todos modos, el lamentable nivel del Este, hace que los Nets tengan el próximo Miércoles una nueva oportunidad de seguir luchando por su objetivo, cuando visiten la pista de otro rival directo, los Charlotte Hornets.
Otra final similar vivirán los Celtics, que ese mismo día recibirán a Miami Heat, actual 7º clasificado del Este.