Los play offs de la NBA están llegando a su fin, y muchos equipos están en la etapa de relajación previo a la agencia libre. Cuando llegue ese día, el 1 de Julio, los Raptors estarán afrontando una realidad: la despedida de Amir Johnson como jugador de la franquicia.
¿Cuáles son los motivos de esta afirmación? En primer lugar, el jugador de 28 años ha sufrido un importante deterioro en sus tobillos, que están hace 10 años en la liga, y le hicieron perderse 7 partidos en esta campaña, que no es el impacto más llamativo. El problema más grave es la caída de sus porcentajes de rebote, y que se ha visto agudizado por la floja tarea en el rubro de todo el equipo.
La franquicia terminó en el puesto 22º de rebotes totales sobre 30 equipos y 24º en el promedio de rebotes defensivos. Los números del jugador han caído de 7,5 rebotes en la campaña 2012/2013 a 6,6 en la 2013/2014 y este año el promedio fue de 6,1 recobres por juego. No cabe duda que la fragilidad de su cuerpo ha afectado también su capacidad defensiva, dejando de ser el jugador activo que reparaba errores cometidos por otros compañeros.
Después de cobrar 7 millones de dólares en la pasada temporada, es probable que tanto el jugador como su agente busquen un aumento de salario o un valor de paga similar al actual, para finalizar la carrera del jugador con un gran contrato. Pero con su estado físico y sin haber cumplido aún 30 años, es permitir que el jugador busque nuevos rumbos, ya que no vale la pena realizar ese gasto.
La no renovación hará aparecer la necesidad de un reemplazo, y para eso, hay una potencial lista de jugadores capaces de llenar el hueco.
Si se busca un jugador por un precio razonable, una buena opción es Kyle O’Quinn, un jugador seleccionado en la segunda ronda del draft 2009 y con el potencial de convertirse en un valioso jugador de rol dentro de la liga. Se perdió los primeros juegos de la temporada por una lesión de tobillo, pero cuando volvió firmó números de 6,8 puntos y 4,5 rebotes en 18 minutos de juego. Cuando Jack Vaughn fue despedido, sus minutos cayeron junto con sus promedios, que pasaron a 3,3 puntos y 3,2 tableros.
Si lo comparamos con Johnson, tiene un mejor toque alrededor del aro, junto con dos vías de gol, protege mejor el aro, y tiene solo 25 años. Antes de los altibajos de la pasada temporada, promedio 13 puntos y 11 rebotes en sus primeras dos temporadas, superando la mejor temporada de carrera de Johnson, en 2012/2013 de 12,6 puntos y 9,5 rebotes. El ala pívot es agente libre restringido, y hay que ver si Orlando decide firmar la oferta calificada, y así tendrías prioridad para renovar al jugador.
Otro jugador que se puede firmar por el precio adecuado es Thomas Robinson, que fue seleccionado en el puesto 5 del draft 2012 y ya ha vestido la camiseta de cuatro equipos en tres temporadas en la liga. Terminó la campaña jugando para los Sixers donde en 22 presentaciones registró 8,8 puntos y 7,7 recobres en 18 minutos. Hay que pulir su juego en ofensiva, pero tiene solo 24 años y los Raptors están necesitando un jugador con el hambre de rebote que él posee.
Otra posibilidad es usar el pick Nº 20 del draft que posee el equipo y seleccionar a Montrezl Harrel, de Louisville. Un jugador sumamente atlético y con intensidad en los tableros, además de un importante carácter competitivo es una opción interesante. Su altura ronda los 2,05 metros, que lo hace parecer pequeño para la posición, pero su envergadura es de 2,25 metros.
Sus promedios de temporada fueron 15,7 puntos y 9,2 rebotes, y aunque es probable que no pueda trasladar sus número ofensivos a la NBA, podrá convertirse en un excelente reemplazo de Johnson poniendo cortinas, rolando hacia el aro y volcando balones.
El sueño de la directiva, por su parte, es Tristan Thompson. El nacido en Brampton podría ser el jugador canadiense que Masai Ujiri tanto ha prometido a los fanáticos durante su gestión.
Sería el reemplazo perfecto ya que ha demostrado ser un reboteador feroz en los dos costados de la cancha, que no requiere un sistema ofensivo construido para él y ha sido un sólido defensor. El problema es su condición de agente libre restringido, y si los Raptors extienden una hoja de oferta al jugador, deberá ser por un elevado monto de dinero para que Cleveland decida no igualarla.
El interrogante en esta jugada es si vale la pena ofrecer un cuantioso contrato al joven que no ha mostrado tener mucho margen de mejora y que puede terminar siendo un muy buen jugador de rol. Probablemente él presione a los Cavaliers para recibir un importante aumento este verano, y tiene la ventaja de compartir representante con LeBron James.
Las posibilidades concretas son estos jugadores. A pesar de la ilusión y los rumores que colocaban a Paul Millsap como posible objetivo en la agencia libre, hay que descartar el rumor por dos motivos concretos. El primero, es que el jugador fue un pilar importante para que su equipo, los Hawks, logrando 60 victorias este año. Y segundo, el sistema de juego de los Raptors no está construido para sus jugadores interiores, por lo cual no se vería favorecido en la ofensiva. Habrá que ver la decisión que toma Masai Ujiri y su equipo de trabajo, pero solo esperamos una cosa, que no decida traer a Andrea Bargnani como agente libre para la próxima temporada cuando esté disponible este verano.
grande Martín, en especial esa última frase. Esperemos que Barganani no vuelva al ACC ni como aficionado!