Emmanuel Mudiay, de refugiado de guerra a estrella NBA

30 puntos y 10 asistencias en el Rising Stars
Fuente: ESPN

Podríamos quedarnos simplemente con las luces de la imagen que muestran a un Emmanuel Mudiay en el Rising Star anotando 30 puntos y dando 10 asistencias, sería sencillo, en cambio eso haremos una primera detención necesaria para comprender el valor que tiene el viaje de un chico del Congo hasta el escenario donde hoy luce junto a los mejores jugadores del mundo.

Su llegada a la NBA:

Esto no es descubrimiento nuevo, las historias de los jugadores que vienen de África siempre vienen cargadas de una potencia inusual que finalmente se transmite en su estilo de juego, y el caso de Mudiay no es la excepción. La historia del base de los Denver Nuggets comienza en la República del Congo en medio de una guerra salvaje que asedió a su familia hasta el punto de verse en la obligación de buscar asilo en los Estados Unidos. En este nuevo país Mudiay comenzó una nueva vida como norteamericano que le llevó a conocer el deporte de la pelota naranja y con ello sus boletos a un cambio de vida impensado para un chico acostumbrado a escapar de la muerte.

Al terminar su paso por el instituto donde se hizo popular como una promesa con futuro para universidades de renombre deportivo, sorprendió a todos al descartar la opción de estudiar en una modesta universidad donde el equipo de baloncesto era dirigido por el prestigioso Larry Brown. Su decisión, sólo comparada con la que tuviera Brandon Jennings hará 6 años decidiendo ir a Italia, fue tomar un avión en dirección a China para emerger como profesional vistiendo los colores del Guandong Southern Tigers.  Esta radical decisión de vida lo llevaría a ser una estrella en el equipo chino y despertar las ilusiones de más de un equipo NBA en busca de un joven maduro que pudiera conducir el futuro de una franquicia, la oportunidad era la que buscaba y el chico de 19 años no se hizo de rogar.

Si algo traía Mudiay en aquellas maletas eran expectativas, según los especialistas catalogado como lo que sería la sorpresa de su clase fue electo en la 7ª posición colocándose una gorra de los Nuggets y la chapa de futuro jugador franquicia. Las únicas incógnitas eran si tenía sentido comparar su rendimiento en la liga china con el camino clásico de una universidad importante de los Estados Unidos ejemplificado en la persona de otro base de su misma clase: D’Angello Russell (Pick 2).

Primeros meses en la NBA:

Las primeras semanas de Mudiay fueron un balde de agua fría para los aficionados de los Nuggets, perdidas de balón sin sentido (7,5 por partido en sus primeros encuentros) y bajos porcentajes de lanzamiento debido a una mezcla de malas selecciones y extraña mecánica de tiro, nos hicieron pensar en algunos momentos que su adaptación iba a ser más lenta de lo esperada. Todo era difícil para un chico que venía de vivir momentos dulces en China, acá todo era distinto, en la NBA todo los espacios se le cerraban en la cancha y sus opciones de demostrar algo distinto también luego de que el 11 de diciembre se torciera un tobillo teniendo que estar ausente unos largos 14 partidos.

Pero lo hemos hablado en esta redacción, por extraño que parezca a los Denver Nuggets le hacen bien las lesiones, y si existe un lugar donde convenga lesionarse, es en el equipo de Colorado. No sabemos con claridad que es, quizás otra de esas teorías que se comprobarán en 100 años más, pero el punto es que cuando se les da el tiempo para despejar su cabeza, conversar con los técnicos y luego mirar desde otra perspectiva los jugadores vuelven con aires frescos y parecen dar sus mejores minutos en cancha: es el caso de Danilo Gallinari y de Emmanuel Mudiay, y en la misma senda esperamos que sean los casos de Joffrey Lauvergne, Jusuf Nurkic y en un futuro nuestro querido Wilson Chandler.

Los números desde que regresó de su lesión han florecido en todo sentido: en los últimos 6 encuentros Mudiay sólo ha tenido 2 perdidas por partido, muy por debajo de las 3,5 que habituaba. Sus porcentajes de tiro han subido de 31% a 37,6%, su puntuación también ha subido en 2 puntos por partido y con ello ha ganado un par de minutos más en pista. A Emmanuel Mudiay se le ve jugar sin preocupaciones y cuando comete un error no se abruma como antes. Cuando se le pregunta si sus perdidas serán cosas del pasado respondió:

«Un poco, pero voy a jugar mi tipo de basketball. Esto se trata de estar en modo ataque y tomar riesgos. Algunas veces esos riesgos provocan perdidas, pero algunas veces no, es sólo una cuestión de aprender como jugar».

En relación a las críticas y las odiosas comparaciones el base de los Nuggets ha preferido enfocarse sólo en su juego:

«Sólo estoy jugando basketball. Quisiera preocuparme menos acerca de lo que la gente opina sobre mi tiro o no. Ahora estoy trabajando en mi juego y enfocado en lo que necesito para centrarme en eso, el resto vendrá con esto. En algunos juegos necesitas tomar algunos tiros, en otros descubrir la solución, de esto se trata».

Su primer All-Star Weekend:

Su buen juego en las últimas semanas y una pizca de fortuna le han permitido lucir en este fin de semana. Elegido por los entrenadores asistentes para jugar el Rising Stars, anoche brilló con luz propia repartiendo 10 asistencias y marcando 30 puntos en un partido en donde se destacó como el base más espectacular de la jornada. Simplemente hizo de todo, metió triples, volcadas en penetración, pases lujosos, robos de balón: simplemente de todo.

Y para no dejarnos con gusto a poco hoy tendrá su segunda noche soñada en el Concurso de Habilidades Taco Bell, luego de ser nombrado como el reemplazante del vigente campeón Patrick Beverley, esto le da la posibilidad de callar las críticas sobre su faceta ofensiva y mostrar que habilidad con el balón le sobra. El desafío no es sencillo y enfrente tendrá como primer rival a Isaiah Thomas.

Desde la redacción de Diggin’ In Denver estamos seguros que para un chico del Congo sobreviviente de una guerra, que conoció el basketball tarde y dejo todo botado para irse a madurar absolutamente sólo en la lejana China, no existe obstáculo ni en un concurso ni en la vida que pueda detener su ascenso hacia la gloria de ser considerado uno de los mejores bases de la liga.

#GoNuggets!

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