Karl-Anthony Towns tumba a los Blazers

El Moda Garden se preparaba para recibir el duelo que enfrentaba a los Portland Trail Blazers de Lillard contra los Minnesota Timberwolves de Towns. El partido se presentaba muy favorable para los locales, quiénes a pesar de haberse clasificado ya para playoffs aún buscan la quinta posición y tras la derrota de Memphis Grizzlies por un punto ante Golden State Warriors les brindaba una buena oportunidad de conseguir más ventaja en la lucha por ella. Pero los Wolves ya habían dado la campanada ganando en el Oracle Arena, por lo que los chicos de Terry Stotts no se podían confiar.

A pesar de que al inicio de partido ambos equipos estaban muy fallones, los Portland Trail Blazers empezaron a anotar y Mason Plumlee se hacía dueño de la pintura cogiendo varios rebotes en ataque, lo que provocaba que los locales se empezaran a distanciar en el marcador. Pasaban los minutos y defensivamente los de Minnesota no parecían encontrar manera de parar las embestidas de los de Portland, que cada vez se alejaban más en el marcador, de tal manera que a falta de cuatro minutos del final del primer cuarto ya ganaban por diez. Al final del cuarto se pudo ver como los visitantes presentaban una mejor defensa y se iban siete puntos abajo, dejando el marcador en un 21-28.

En el segundo cuarto los Minnesota Timberwolves siguieron con la tónica de los últimos minutos del primer cuarto y, en parte gracias a un Karl-Anthony Towns que empezaba a marcar su sitio en la pintura, recortaban puntos en el marcador, de tal manera que a mitad del cuarto se llegaron a poner dos puntos arriba. Pero Terry Stotts pidió un tiempo muerto que provocó la reacción de su equipo y volvieron a ponerse arriba en el marcador, aunque los Timberwolves no se despegan de él. A pesar del pequeño tirón que habían logrado los locales los visitantes supieron volver a darle de nuevo la vuelta al marcador y se fueron al descanso cuatro arriba ganado 53-49.

En el tercer cuarto los locales salieron con ganas y el marcador se encontraba de manera muy ajustada variando entre uno o dos puntos de diferencia. El tiempo pasaba y ningún equipo parecía capaz de marcar la diferencia para distanciarse en el marcador, de tal manera que al final del tercer cuarto la igualdad seguía siendo máxima y los locales afrontaban el último cuarto tres puntos abajo en el marcador que reflejaba un 75-72.

En el último cuarto los Portland Trail Blazers salieron enchufados y anotando dos canastas rápidas se pusieron por delante en el marcador, aunque enseguida los Minesota Timberwolves igualarían el marcador. Entonces, los de Minnesota, liderados por Karl-Anthony Towns, se moverían con una ventaja que iría rondando los cuatro puntos de diferencia a su favor que lentamente seguirían aumentando para afrontar la recta final del cuarto siete puntos arriba. A falta de dos minutos para el final del partido, los Trail Blazers empezaban a reducir ventajas en el marcador y en un minuto se acercaron a dos puntos. De tal manera que a falta de un minuto para el final del encuentro, el marcador se encontraba en un apretado 101-99 a favor de los visitantes. A falta de 22 segundos para el final, el electrónico tan solo se había movido un punto para los Timberwolves y la bola estaba en posesión de Portland. Entonces, Damian Lillard anotó una canasta de dos puntos que colocaba a su equipo a un punto a falta de 13 segundos del final. Primero, McCollum intentó robar la pelota a Zach Lavine, pero no pudo y Lillard le hizo falta para que Lavine anotará los dos tiros libres y los Blazers tuvieran la posesión a falta de 7 segundos para el final del partido. Entonces, Damian Lillard logró lo prácticamente imposible y anotó un 3+1 para poner a su equipo por delante a falta de 3 segundos. Pero entonces, tras un saque de banda Karl-Anthony Towns volvió a mostrar su gran juego interior y le dio la victoria a los Wolves por 106-105.

Por parte del equipo ganador, el mejor fue sin duda Karl-Anthony Towns quién anotó 27 puntos y capturó 9 rebotes, aunque estuvo bien acompañado de Andrew Wiggins y sus 23 puntos. Por parte del equipo perdedor, el mejor fue sin duda Damian Lillard con 31 puntos y 7 asistencias, también acompañado por C.J. McCollum y sus 21 puntos y 7 asistencias.