El nuevo jugador de los Indiana Pacers ha vuelto a entrenar este pasado fin de semana por primera vez desde el fin de la temporada pasada. El motivo de su inactividad: su desgarro del tendón rotuliano, la lesión que atormentó a Jeff Teague durante toda la pasada temporada. Sin embargo parece que ya está de vuelta descansado y listo para iniciar la pretemporada.
El jugador procedente de Atlanta tiene que empezar a entablar relación con el resto de sus compañeros y en particular con la estrella del equipo, Paul George, tanto fuera de la cancha como, por supuesto, dentro de la misma para poder liderar al equipo hacia unos mejores resultados. Su versatilidad y juego ofensivo fueron los que hicieron que Larry Bird decidiera apostar por Jeff Teague enviando a George Hill, un veterano en el equipo, a Salt Lake City. Y aunque su relación con Paul George, al menos de momento, no sea la que tenían Hill y George, se espera que dentro del campo demuestren tener una buena química y desmonten las defensas contrarias con mayor eficacia.
Para empezar a conseguir esa química, los dos jugadores se citaron el pasado miércoles para jugar un partido amistoso, coincidiendo con la vuelta a la rutina por parte de Paul George tras sus vacaciones, y la consecución del oro olímpico. La sesión fue bien en lo que es la luz al final del túnel para el base. Recordemos que Jeff Teague sufrió la lesión durante toda la pasada campaña y que en las redes sociales hizo diversas alusiones sobre la falta de actuación y pasividad de los Hawks. Esperemos que realmente la rodilla del jugador esté recuperada, ya que buena parte de los resultados y la mejora del equipo depende de su buena actuación.