El infravalorado Deron Williams

El base está firmando una gran temporada personal
Deron Williams, uno de los jugadores más regulares de los Mavericks – Nil Alemany (SB)

Pocas. Muy pocas lecturas positivas tiene la temporada de los Dallas Mavericks. Llena de lesiones, sin que los jóvenes lleguen a desarrollar su juego como prometían y sobre todo con el peor récord de la Conferencia Oeste. Esto, para un equipo acostumbrado en los últimos años a estar entre los puestos de Playoffs, es un auténtico desastre. Si además añadimos que podemos estar ante el último año de Dirk Nowitzki como jugador en activo, la situación es todavía más dramática.

Sin embargo, quien no se consuela es porque no quiere. Ante todo este torrencial de malas noticias se ha erigido Harrison Barnes como un firme jugador franquicia en potencia capaz de sustituir a Nowitzki como futuro líder del equipo. En todo lo que va de año, el alero no ha bajado de los 10 puntos en ningún partido y sus 20,8 tantos de media le sitúan como un arma consistente y precisa en ataque. Pero no es esta la única nota favorable de los Mavs en esta temporada. Después de unos cuantos años dando tumbos, parece que por fin los texanos cuentan con un base fiable capaz de dirigir bien el ataque y de defender correctamente a cualquier rival.

Un nivel deportivo muy notable

No se trata de ninguna nueva incorporación ni de un rookie recién drafteado. Se trata del otrora All Stars Deron Williams. El experimentado base esta rayando un nivel muy alto. Ya en su temporada pasada pudimos verle con la camiseta de los Mavericks destellos intermitentes de aquel jugador que marcaba diferencias en la liga. Pero en la actual campaña está logrando mantener su mejor versión de manera mucho más regular. Su última actuación frente a los Wolves (13 puntos + 10 asistencias) es una muestra más de ello.

El comienzo no fue el deseado, ya que Deron también se vio afectado por la plaga de lesiones que ha diezmado a los Mavs. Le costó un par de partidos volver a coger el ritmo adecuado para competir al cien por cien , pero en cuanto lo alcanzó, el equipo y él mismo lo notaron. Su mes de diciembre fue sobresaliente. Promedió 15,1 puntos (42,6% en tiros de campo) y 7,9 asistencias en los 17 partidos que jugó. Los Mavericks supieron aprovecharse de esos dígitos para sumar más victorias sólo en esos 31 días que en el resto del curso.

En el cómputo general, D-Will es el tercer máximo anotador (14 puntos de media) y el mejor asistente (6,8) del equipo. Sus números, por tanto, hablan muy bien de él; pero también lo hacen otros aspectos intangibles. Está sabiendo guiar y conducir muy bien el ataque (ha subido el número de asistencias por cada pérdida). Escoge muy bien cuándo lanzar, cuándo penetrar o cuándo asistir. Interpreta a la perfección los bloqueos y las pantallas para encontrar siempre al compañero mejor situado para que reciba y lance. En este sentido, su conexión con Nowitzki en el pick and pop es muy eficaz. 

Compromiso

Después de sus controvertidas salidas de Utah y de Brooklyn, muchos dudaban del compromiso que podría adquirir Deron con los Mavericks. Es cierto que su trayectoria con los Jazz terminó muy mal y que con los Nets nunca llegó a estar a gusto y apenas se acercó a su mejor versión. Pero desde que aterrizó en Dallas, Williams ha encajado a la perfección. Su relación con los pesos pesados del equipo es realmente buena. En numerosas ocasiones se le puede ver junto a Barea, Nowitzki o Harris riéndose en el banquillo durante los partidos o en las sesiones de calentamiento. Él mismo, ejerciendo ya de líder, se ha encargado de hacer piña entre sus compañeros, ya que son habituales sus fiestas de disfraces, cenas o comidas solidarias para unir más al grupo.

Con Rick Carlisle tampoco se le ha visto ningún mal gesto en todo este tiempo. Lo cual podría considerarse también como una grata sorpresa si tenemos en cuenta el papel tan protagonista que ejerce en ocasiones el propio Carlisle; ya que en muchos ataques suplanta la labor del base e incluso se mete a la pista para marcar la jugada. Esto puede suponer una afrenta para bases con pedigrí como lo es Deron (de hecho a Rondo le sentaba fatal que hiciera eso), pero no ha sido el caso. Todo lo contrario. D-Will asume el mando de su entrenador y éste le sabe compensar dándole libertad para asumir tiros abiertos o mandar bloqueos a su antojo de los hombres altos.

Su situación en Dallas, por lo tanto, es muy buena. Al base se le ve muy cómodo tanto en el equipo como en la ciudad. Tal es así que, pese a la oferta de renovación a la baja que recibió el pasado verano por parte de los Mavericks, Deron decidió quedarse una temporada más en la ciudad texana una vez terminado su antiguo contrato.

Futuro

Su destino ahora es bastante incierto. Hace unas semanas, algunos rumores le colocaban fuera del equipo en el periodo actual de traspasos. Sin embargo, en estos momentos parece haberse descartado esa posibilidad y todo indica que acabará la temporada vistiendo la camiseta de los Mavs. Lo que pase después es toda una incógnita. Dependerá en gran medida de cuál sea la posición en la que finalicen los Mavericks: si en un puesto claro para obtener un buen pick del Draft o no.

Si la franquicia texana obtiene uno de los tres primeros picks, parece que la elección será un base con un físico diferencial que sea capaz de asumir el papel de titular del equipo. Esto, evidentemente, sería un escollo para Deron, que se vería relegado al banquillo. En este caso, tanto la dirección general de Dallas como el propio jugador deberían tomar la decisión de separar sus caminos o de seguir unidos. En mi opinión, lo ideal para ambas partes sería la segunda opción.

Para el conjunto, contar con un hombre con capacidad de anotar y asistir desde el banquillo y con la experiencia suficiente para ejercer de maestro del base titular sería idóneo. Para Williams sería una situación nueva y chocante. Quizás su ego le impidiera verse como suplente, pero lo cierto es que así podría enfrentarse a las segundas unidades de los rivales y sacar mayor beneficio. Además su contrato podría (y debería) verse incrementado si sigue a este nivel, ya que habrá más dinero para invertir en salarios. en definitiva, me encantaría poder seguir disfrutando de este Deron Williams una temporada más. Su juego y su compromiso se merecen apostar por él.

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Comentarios (3)
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  • Pelayosp1

    Gran trabajo!! Pero me mantiene muchas dudas lo del futuro… No veo a D-Will aceptando el rol de suplente con 32 años y tras esta muy buena temporada en un equipo que puede estar en reconstrucción. Y si se draftea a uno de esos famosísimos bases de los que se habla esa puede ser la situación más lógica… Además, ¿qué hacemos con J.J. Barea?

    • Borja Rodriguez

      Barea podría desempeñar la función de escolta en ataque y en defensa intercambiar su papel con Deron. Pero sí, la opción de ver a D-Will como suplente se antoja difícil.

  • padd

    Señalar que Deron Williams, aunque nació en Virginia Occidental, es de Dallas, crecido allí. Eso influye en su sintonía con la ciudad, claro y fue importante a la hora de fichar por ellos.