Clyde Drexler (22), Moses Malone (24), Calvin Murphy (23), Hakeem Olajuwon (34) y Rudy Tomjanovich (45). Un puñado de nombres que han escrito la historia de una franquicia que este año cumple 50 años, y a los que ahora se une Yao Ming. El chino recibió en el descanso del Bulls – Rockets un homenaje a toda su carrera. Parecía mentira pero después de tanto tiempo, de jugar en ese estadio y de ver esas camisetas colgadas del techo cada noche que pasaba en esa cancha, ahora la suya estaba ahí con ellas. Por supuesto, Yao habló ante las cámaras:
«Recuerdo la primera vez que vi un partido de la NBA. Casualmente, vi un plano en el que las cámaras apuntaron a esas camisetas retiradas. Después escuché historias y descubrí que es el mayor honor que puede conseguir un jugador por sí mismo y es un logro para el equipo. Hoy, creo que siempre voy a preguntarme cuál es la historia detrás de ellas.»
«Espero que la gente vea mi camiseta y recuerde la historia, no solo la mía, sino también la de mis compañeros y mis oponentes. Creamos la historia juntos, al igual que las otras camisetas crearon una historia para nosotros.»
La ceremonia del descanso comenzó con un vídeo que repasaba la andadura de Yao por tierras americanas. Además, durante el homenaje, estuvo acompañado por su familia, su amigo Andy Yao y personalidades de la talla de Olajuwon, Dawson, Steve Francis, Dikembe Mutombo, Shane Battier, Adam Silver y el dueño de los Rockets, Leslie Alexander entre otros.
«Esta noche va sobre darte las gracias. Gracias por tu humildad. Gracias por tu ética de trabajo. Gracias por tu humor. Gracias por tu dominio. Eres un Hall of Famer en todos los sentidos de esa palabra. Gracias por dejarnos ser parte de tu viaje.» – Battier.
Alexander, por su parte, hizo una donación de 100.000$ a la Yao Ming Foundation y también se deshizo en elogios hacia el ex jugador:
«Homenajear a un hombre de tal magnitud es un gran momento en la historia de los Rockets. Obviamente, solo retiramos los números de los jugadores realmente grandes. Yao fue un jugador realmente grande. Quería que se le viese como algo más que eso, como un embajador para el mundo y, especialmente, para China, y como la gran persona que es.»
Ming, además, quiso dedicarle unas palabras a la ciudad de Houston.
«La primera vez que vine a la ciudad, Houston no me pareció distinta de otra ciudad de EEUU. Pero el tiempo a pasado y todas las caras me vienen a la memoria. Recodad esto, Houston para mi no es solo una palabra. Cada vez vez que alguien la menciona vuestras caras me vienen a la memoria.»
El jugador chino fue seleccionado en el primer lugar del Draft de 2002 y jugó 8 temporadas con el equipo tejano desde entonces, hasta que tuvo que retirarse al no poder superar las lesiones que arrastraba desde 2005 y que solo le permitieron jugar 5 partidos en la última temporada antes de retirarse. En su mejor temporada, el pívot promedió 25 puntos, 9,4 rebotes, 2 asistencias y 1,9 tapones, números que solo han alcanzado 10 jugadores en toda la historia, y ninguno desde entonces.
«Echando la vista atrás, no esperaba esta donde estoy hoy. Simplemente quería jugar al baloncesto. Solo quiero daros las gracias por esto. Si pudiera repetirlo otra vez, escogería Houston si el Draft de la NBA me lo permitiera.«