Los Milwaukee Bucks jugaban de nuevo a domicilio, en unas fechas en las que, con Middleton ya en pleno estado de forma, se volvían a encontrar como equipo. Mientras que su rival, los Indiana Pacers ya asentados en playoffs, no trasmiten lo mismo que en aquellos años dorados, con Hibbert y Stephenson. Lo de ayer, fue claramente un duelo de dos equipos que se podrían clasificar para la fase final de este campeonato, debido a que si los de Jason Kidd ganaban, ya entraban definitivamente en puestos de playoffs. A parte de que veríamos el duelo de dos de los mejores aleros en el Este como Paul George y Giannis Antetokounmpo, que viven a la eterna sombra del rey.
Los de Indianapolis llegaban tras tener tres duelos directos con equipos de su nivel según la clasificación, ganando dos y perdiendo uno. Mientras que los Milwaukee Bucks estaban volviendo a ser los mismos, y sobre todo volviendo a tener algo que hacía mucho tiempo que no tenían, confianza defensiva.
Los del BMO Harris Bradley Center contaban con las bajas por lesión de Malcolm Brogdon y Mirza Teletovic, algo que no era de gravedad, y con Terrence Jones sin debutar todavía ni intenciones de hacerlo. Mientras que por decisión del entrenador, en el equipo visitante no jugarían Aaron Brooks y Kevin Seraphin. Dejando a los Bucks con Dellavedova, Tony Snell, Khris Middleton, Giannis Antetokounmpo, y Thon Maker, contrarrestado por Jeff Teague, C.J. Miles, Paul George, Thad Young y Miles Turner.
https://twitter.com/Pacers/status/840397687329550338
En los primeros compases del primero de los cuatro cuartos, los Indiana Pacers pisaron el acelerador, y se impusieron al quinteto inicial de los Milwaukee Bucks sin problema. Sorprendía la mala salida de los Bucks comparada con la de los últimos partidos, pero como era tónica a principio de temporada, los de Wisconsin se aferrarían a la segunda unidad para darle la vuelta al marcador con hombres como Greg Monroe, que facilitó con un gran primer cuarto, que la distancia final fuera menos de 5 puntos. 27-23, en este primer choque.
Por otra parte el segundo cuarto sería más diferente, un tira y afloja entre los dos equipos, en el que todo acababa igual. Giannis y compañía salieron con todas, quedándose muy cerca de los Pacers y demostrando que les iban a dar guerra, pero un bajón inesperado les volvió a dar dos dígitos de desventaja. Sin embargo, como he dicho antes, los Milwaukee Bucks acabarían bien el cuarto, comparado a como iban las cosas. 50-45 resultado en la primera parte.
Segunda parte dominada por los Milwaukee Bucks
En consiguiente veríamos una de las mejores segundas partes de los locales esta temporada, en la que con paciencia encontraron el momento para meter baza. El equipo empezó funcionando a la perfección adelantándose por primera vez en el marcador, y sin ataques precipitados. Lo que les ayudó a mantener la ventaja en el partido, aumentarla incluso, aprovechando errores del rival, dando una estabilidad no vista antes en este equipo. 68-74 antes del cuarto final.
Y tal como acabó el tercero, empezó y acabó el cuarto, en el que los Milwaukee Bucks jugaron a lo que quisieron y defendieron con cabeza. Lo que les fue suficiente para dormir el partido, llevarlo a donde ellos querían, como siempre de la mano del griego Giannis Antetokounmpo, y sentenciar su cuarta victoria consecutiva que les asegura el puesto de playoffs. 85-99 el merecido resultado final.