Durante el verano, los Detroit Pistons, tras una temporada decepcionante por el resultado conseguido de acuerdo a los recursos de los que disponían dentro de una floja Conferencia Este, realizaron una serie de fichajes en la agencia libre con el objetivo de mejorar su rendimiento deportivo, y uno de ellos fue el hasta entonces Laker Jodie Meeks.
No obstante, y antes incluso de que la temporada comience, el jugador natal de Tennessee se une a la plaga de lesiones que está asolando la pretemporada NBA: se ha anunciado en el día de hoy que ha sufrido una lesión por estrés en su espalda que le tendrá de baja unos dos meses. Un golpe duro para las aspiraciones del jugador, quien parecía que disfrutaría de muchos minutos en este comienzo de temporada.
Como desencadenante de esta lesión, es probable que Josh Smith dispute más tiempo de nuevo en la posición de alero del que Stan Van Gundy quería alinearle en un principio, al menos de forma temporal. Además, es probable que el mismo ponga en pista alineaciones de más estatura, al pasar a ocupar por momentos la posición de escolta jugadores como Caron Butler. Por último, también cabe destacar que esta lesión podría significar un mayor número de oportunidades para Spencer Dinwiddie, rookie de la franquicia.
La lesión de Meeks es muy similar a la sufrida por Andre Drummond en su año de novato, y que fue diagnosticada inicialmente como espasmos en la espalda, hace que éste se una a Kentavious Caldwell-Pope en la enfermería de Detroit. Por el bien de sus aspiraciones y por el espectáculo, esperamos que tengan una pronta y fructífera recuperación.