OKC pagará impuesto de lujo por Waiters

En 2012 Oklahoma City Thunder traspasó a su sexto hombre, James Harden, a Houston Rockets para evitar tener que pagar impuesto de lujo. Desde entonces, los Thunder han intentado -y conseguido- controlar que su masa salarial fuera inferior al límite a partir del cual se paga impuesto, todo para ahorrar dinero. Sin embargo, esta política ahorradora parece que ha llegado a su fin: con el traspaso de Dion Waiters, OKC pagará impuesto de lujo tras años sin hacerlo.

La maquinaria de traspasos de la NBA es compleja porque, en aras de la competitividad, la liga exige que los salarios de los jugadores envueltos en los movimientos cuadren -es decir, lo comido por lo servido-. Dado que el único jugador que deja Oklahoma City a cambio de Waiters es Lance Thomas -que cobra el mínimo salarial-, la franquicia ha tenido que utilizar la trade exception de $4.1 millones que se obtuvo en el Sign&Trade de Thabo Sefolosha por los Hawks. Solo de esta manera se ha podido llevar a cabo el traspaso a tres bandas entre Knicks, Cavaliers y Thunder que ha acabado con Dion Waiters en Oklahoma City.

Con el salario de Waiters, que supera ligeramente los $4 millones -concretamente $4.062.000-, la masa salarial de los Thunder ($80.134.264) se coloca $2.3 millones por encima del Luxury Tax. Esto comporta que OKC tendrá que pagar $1.2 millones en impuesto de lujo. Sin embargo, la historia no acaba ahí. Hay múltiples jugadores, como Jeremy Lamb, que podrían ser traspasados antes del trade deadline del 19 de febrero, lo que haría que la franquicia no tuviera que pagar ese impuesto de lujo.

Este cambio confirma lo que el General Manager, Sam Presti, y el propietario de los Thunder, Clay Bennett, han dicho durante estos últimos años. No tenían miedo de pagar impuesto de lujo, solo que lo han hecho cuando ha sido necesario. Tras un inicio de temporada complicado por las lesiones y con la lucha por los PlayOffs del Oeste más cara que nunca, Oklahoma City ha puesto todas las cartas sobre la mesa.