Stephon Marbury: «Estaba deprimido, quería morirme»

Jugador de los Timberwolves, Suns, Nets, Knicks y Celtics, All Star en dos ocasiones y habiendo ganado alrededor de 150$ millones, Stephon Marbury confiesa en un episodio de Real Sports, de la HBO, que se emitirá completo el 20 de enero, que tuvo pensamientos suicidas. Sus problemas en la cancha, la muerte de su padre, el fracaso de su compañía Starbury y las críticas a su capacidad atlética fueron demasiadas situaciones para el jugador que no supo afrontarlas y que estuvieron a punto de acabar con su vida.

En 2009, Stephon Marbury publicaba un vídeo de sí mismo comiendo vaselina y llorando, mientras decía «pensáis que me drogo porque tengo mucho amor que dar». Muchos espectadores estaban confusos, unos se rieron de su extraño comportamiento, otros publicaron vídeos haciendo una satírica parodia para burlarse de Marbury. Pero muchos de aquellos espectadores que vieron el vídeo sintieron una preocupación real por el jugador y se preguntaban si este vídeo fue un clamor público sin precedentes en busca de ayuda.

Con los años, Marbury ha afirmado que su vídeo estrafalario podría explicarse porque quería iniciar su propia red de televisión  y, más tarde, que se comió la vaselina porque perseguía un remedio casero para un «dolor de garganta «. Seguramente, los escépticos podrían estar de acuerdo, no tenía que ser más que eso.

Pero en un segmento de HBO Real Sports, Marbury confiesa que su vida cada vez estaba más fuera de control conforme su carrera en la NBA llegaba más alto. Su esposa Latasha recuerda a Marbury quedarse en la cama todo el día comiendo Fruity Pebbles, aislándose en sí mismo después de su  lucha con los Knicks, donde siempre estuvo cuestionado debido a sus problemas con Larry Brown, la muerte de su padre en 2007, y la desintegración de su «Starbury» empresa de zapatillas de descuento.

“Cuando pasó todo lo de los Knicks, y, ya sabes, mi padre falleció (2007), Starbury se desintegró… básicamente estaba perdiendo la vida lentamente. Lo estaba viendo. Creo que eso me dolía aún más que ver mi carrera en el baloncesto ir por donde estaba yendo… estaba atrapado en mis pensamientos- Estaba atrapado con las decisiones que había hecho”.

Marbury admite ahora que estaba «definitivamente» clínicamente deprimido y «suicida» en ese momento de su vida.

«Me quería morir», recuerda. «Quería suicidarme algunos días…  No se trataba de baloncesto. Comenzó a ser parte de mí. Porque yo estaba deprimido y estaba enfermo».

El jugador de Coney Island ahora observa ese momento de su vida como un fondo que ya pasó. En los más de cinco años que Marbury lleva jugando en China ha rehecho su vida. Es un icono del baloncesto, se ha ganado jugar el All Star de la liga china con honores y llevó a los Beijing Ducks al título en dos cosas. Incluso le han erigido una estatua como reconocimiento.

«No paraban de decirme que era un perdedor, que no podía hacer nada… Entonces llegas a China, otro país, con su barrera idiomática y cultural y eres capaz de lograr cosas. Dejé un sitio donde básicamente me sentía maltratado y odiado y ahora estoy en un sitio donde me quieren y adoran. ¿Por qué iba a querer volver aun sitio donde me odian?»

Stephon Marbury ha renacido como jugador y  como persona y encontrando lejos de su país natal el camino para ser feliz. El programa de Real Sports se emitirá el próximo 20 de enero en la HBO.