Dirk lleva a los Mavs a la prórroga y Parsons ejecuta

Portland Trail Blazers 101-111 Dallas Mavericks

Fuente; Wikipedia [CC]
Fuente; Wikipedia [CC]
Esta pasada madrugada se han enfrentado dos equipos que vienen en racha ganadora y que compiten por mantenerse en la zona noble del Wild West. El equipo de Carlisle busca encontrar su juego eléctrico sin Rajon Rondo, que está lesionado y los de Rip City esperan mantenerse arriba gracias a sus dos estrellas en estado de gracia. Es un gran partido que enfrenta a dos buenos equipos de la Conferencia Oeste, un enfrentamiento que no va a defraudar a seguidores de ningún conjunto.

El primer cuarto comenzó muy igualado en cuanto a ritmo anotador. Los locales comenzaron demostrando que tienen jugadores que saben aprovechar las oportunidades que se les dan en el poste bajo a base de garra y esfuerzo. Mientras tanto, los de Portland no se quedaron atrás ya que anotaron la gran parte de sus puntos desde la pintura con buenas penetraciones de Damian Lillard. Además, sus hombres interiores hicieron el trabajo laborioso de enfrentarse a Tyson Chandler y compañía. Podemos decir que este cuarto fue un calco de ambos equipos, muchísimos puntos desde la zona y otros tantos fallos desde el perímetro. El marcador aunque sufrió movimientos, al término del primer período acabó con un igualado 24-25 a favor de los visitantes.

En el segundo cuarto, podemos decir que las segundas unidades de ambos conjuntos se centraron en revertir lo visto en el inicio del encuentro. El domino anotador en la zona desapareció debido a que ambos conjuntos cerraron filas, además de una peor selección de los tiros interiores. La gran parte de los puntos iniciales por parte de los Mavericks llegaron desde la línea de tres puntos. En los minutos iniciales, Charlie Villanueva y Devin Harris anotaron con gran facilidad. A pesar de ello, Wesley Matthews con la ayuda de Damian Lillard equilibraron la balanza en este sentido. Con esto, el partido seguía la tónica marcada desde el inicio. La igualdad estuvo presente en el marcador hasta que a falta de dos minutos para el final del cuarto, los Trail Blazers lograron una ligera ventaja dejando el resultado en un 55-50 a favor de los mismos.

Tras el descanso, los equipos volvieron con energías renovadas y de nuevo vimos otro estilo de juego completamente distinto. Esto ocurrió en gran parte gracias a dos grandes jugadores, LaMarcus Aldridge por parte de la franquicia de Portland y Monta Ellis por parte de los locales. Aldridge dio una buena muestra de lo mejor que sabe hacer, desde casi cualquier posición del campo se levantaba, armaba su brazo y encestaba con una facilidad pasmosa para un jugador de su altura y condiciones. El juego liderado por su estrella fue devastador para el rival. Por otro lado, Ellis no quiso dar por perdido el partido, ya que si no fuera por él y sus buenas canastas, la ventaja concedida a los visitantes sería definitiva. Debido a un fatal cuarto en el tiro de los Mavericks, pronto se vieron con una desventaja de nueve puntos en el ecuador del cuarto, que poco a poco fue creciendo hasta acabar con un 83-70 en su contra con un cuarto por jugar.

Al inicio del últico cuarto pronto pudimos ver la reacción de unos Mavericks heridos en su orgullo. No podían dejar escapar un partido así de fácil contra un rival directo y menos en su propia casa. Gracias a un gran esfuerzo defensivo y sobre todo, gracias un descomunal Dirk Nowitzki, los locales lograron darle la vuelta al partido. Poco a poco fueron reduciendo la ventaja a medida que los de Portland no lograban anotar con tanta facilidad como lo habían hecho durante el resto del partido. A pesar de ello, la equidad en el marcador se resistía para la franquicia de Dallas. No fue hasta que, cuando a falta de 20 segundos para finalizar el encuentro, Dirk Nowitzki logró un triple providencial que ponía un 96-96 en el marcador. El resultado no variaría tras fallar Lillard un triple sobre la bocina. Aún le quedaba una prórroga a este buen encuentro.

La prórroga no tuvo color. Los Mavericks venían impulsados por la energía que da remontar un partido con el esfuerzo y trabajo en equipo que habían demostrado en el cuarto anterior. Los Trail Blazers se sentían impotentes ante Dallas. Tal fue así que tan sólo encestaron uno de los cinco tiros de campo intentados (más tres tiros libres). Por su lado, los Mavs, liderados en esta ocasión por un eficiente Chandler Parson, dieron la puntilla al encuentro con dos minutos y medio jugados de la prórroga. Así, el partido caía en manos de los locales con un resultado final de 101-111.

Jugadores destacados de Portland:

LaMarcus Aldridge: 25 puntos y 14 rebotes.
Damian Lillard: 26 puntos, 7 rebotes y 7 asistencias.

Jugadores destacados de Dallas:

Dirk Nowitzki: 25 puntos y 3 rebotes.
Chandler Parsons: 20 puntos y 9 rebotes.
Monta Ellis: 20 puntos y 6 asistencias.