Previa del Utah Jazz – New York Knicks
La defensa más en racha ante el ataque más anémico
Los Jazz vuelven a casa tras una exitosa gira por Memphis y el Atlántico Norte, donde cosecharon tres victorias frente a Grizzlies, Nets y Sixers y solamente cayeron derrotados en Boston con una canasta en los instantes finales. Enfrente (2 de la mañana en España) estarán los Knicks de Andrea Bargnani y Alexey Shved, involuntarios protagonistas del segundo peor ataque de la NBA con apenas 92,3 puntos por partido de promedio. Utah, mejor defensa en el mes de febrero y ya con Rudy Gobert patrullando indiscutiblemente la pintura, tiene ante sí una magnífica oportunidad para extender su racha de 14 partidos seguidos dejando a los rivales por debajo de los 100 puntos.
Tras vencer a Brooklyn el domingo, el equipo de Quin Snyder tratará de conseguir su 27ª victoria del año y 10ª en 13 partidos frente a un rival a priori asequible, aunque los Raptors pueden dar buena cuenta de que confiarse puede derivar en catástrofe. Solamente los Indiana Pacers (9-2), los Golden State Warriors (10-3) y los Oklahoma City Thunder (10-3) acumulan mejor récord que los de Salt Lake City desde el 7 de febrero. Además, los Jazz han ganado 7 de los 10 partidos en los que el quinteto ha estado formado por los australianos Exum e Ingles, el francés Gobert y los estadounidenses Hayward y Favors.
Utah ha encontrado una identidad propia tras deshacerse de Kanter, y así lo reconoce el propio entrenador Snyder:
«Creo que estamos empezando a tener una identidad propia. No significa que seamos un buen equipo todavía. Estamos mejorando. Estamos comenzando a averiguar quiénes somos y cómo necesitamos jugar para ser un buen equipo.»
Desde la marcha del turco los del estado mormón lideran la NBA en eficiencia defensiva, apenas permitiendo 89,7 puntos por 100 posesiones a los ataques contrarios. La combinación de robustez atrás y un ritmo de juego lento ha convertido a los Jazz en uno de los conjuntos más en forma de la liga. Aunque sobretodo destaca la presencia de Rudy Gobert, otro de los factores a tener en cuenta y que explican este hecho es la irrupción de otros nombres que han traído una admirable mentalidad de defensa y esfuerzo al vestuario, como Elijah Millsap, Rodney Hood o Joe Ingles. Y es que como decía ayer Matt Harpring, el tempo en ataque de Utah no es la causa principal de estos números. Lo que está claro es que han dejado atrás el desastroso arranque de campaña en el que ganaron solamente 1 de sus 13 primeros choques, y el proceso de desarrollo con 7 novatos en la plantilla se empieza a ver. Por supuesto, en el otro lado de la cancha todavía dependen demasiado de Hayward, pero, tal y como analizábamos el domingo en otro artículo, ya han empezado a identificar el rol apropiado para otros jugadores.
Los New York Knicks (12-50) por su parte buscan terminar con su racha de 4 derrotas consecutivas, en la que además sus promedios ofensivos han sido aún peores, con una media de 83 puntos por partido y un 38,3% de acierto en tiros de campo con culpables a medias por el poco talento disponible en plantilla y por la inamovible presencia del famoso triángulo. Con las bajas de Calderón y Tim Hardaway Jr. además de la ya consabida de Carmelo Anthony, los de la Gran Manzana han recurrido al antiguo número 1 del Draft, Bargnani, para liderar al equipo.
A pesar de las dudas que a cualquier aficionado respetable le pueda producir esto, parece que Phil Jackson está contento con lo visto últimamente del ex de Toronto, y según el New York Post el Maestro Zen piensa ofrecerle un nuevo contrato el año que viene. Una de sus mejores armas además del tiro exterior es su envergadura, aunque con la mezcla de envergadura y despliegue físico de Favors y Gobert el reto va a ser importante. El otro jugador que últimamente se ha mostrado consistente para los de Derek Fisher es el ruso Shved, que llegó como parte del traspaso de Prigioni a Houston y que ha terminado por disputar minutos importantes, promediando 14,4 puntos en sus últimos 5 encuentros, aunque con porcentajes poco eficientes (37,5% en tiros de campo y 34,6% en tiros de tres). Por supuesto que estas ebulliciones son sospechosas, pues ya hemos visto a otros nombres como los de Jason Smith, Cleanthony Early, Lance Thomas o Langston Galloway brillar en algunas ocasiones para desvanecerse poco después. Otro dato más, los neoyorkinos han sido los primeros en alcanzar las 50 derrotas en esta 2014-15. Sin embargo, en la NBA nadie puede confiarse pues un día inspirado de un par de jugadores rivales puede llevar a una derrota inesperada que complique las cosas en cuánto a moral y rendimiento, así que no hay que dormirse en los laureles.