Andre Iguodala, el antídoto perfecto

Defendió a las mil maravillas a LeBron James

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Primer partido de la gran final de la NBA y ya tenemos el primer candidato para hacerse con el trofeo a «antídoto antiLeBron«, el hombre que aventaja al resto en la votación no es otro que Andre Iguodala.

Si ven las estadísticas de ayer y observan los 44 puntos de King James podrán pensar que el rey de Akron tuvo una noche plácida, y que si los Cavs no fueron capaces de ganar el partido fue, en parte, debido a la poca profundidad de banquillo con la que cuenta Blatt, y no irán del todo mal encaminados. Pero lo cierto es que ayer hubo un hombre que fue capaz de secar a LeBron.

Muy felices se las prometía LeBron ante Harrison Barnes, Klay Thompson o Dryamond Green, anotaba con facilidad, atacando al poste y sacando la superioridad que se le presupone. Se fue hasta los 27 puntos, con un formidable 54.5% de acierto (12-22 TC) y tan solo fueron capaces de forzar una pérdida en LeBron.

Steve Kerr se machacaba la cabeza, los Cavs controlaban el partido, con un tanteo bajo y LeBron anotando a sus anchas. Entonces dio con la tecla, en su banquillo tenía a un auténtico perro de presa, Andre Iguodala.

Iggy salió con ganas al partido, no dejaba a LeBron anotar a 6 metros del aro, con unos brazos larguísimos que llegaban a puntear sus lanzamientos. Y cuando James le posteaba, Iguodala sacaba toda su garra para mantener firme su posición y complicar la vida del 23 de los Cavs.

Y por fuera igual, la velocidad de piernas y manos del de Springfield abrumó a LeBron y le llevó a cometer hasta 3 pérdidas de balón, traducidas en canastas fáciles de los Warriors.

Apenas 11 puntos y un nefasto 28.6% de acierto para LeBron con Iguodala encima. Los fantasmas del pasado en forma de Kawhi Leonard se le reaparecen al de Akron, que tendrá que estudiar la forma de atacar a un Iguodala que ayer se llevó su primer punto.

Al final del partido, el propio Iguodala se refería a la defensa sobre LeBron.

«La adrenalina estaba fluyendo en mi de una manera positiva. No fue demasiado alta y la mantuve durante todo el partido. Fuimos demasiados hombre los que cubrimos a LeBron esta noche. Le incomodamos en algunos lanzamientos difíciles y eso es lo que vamos a hacer por el resto de la serie, el que tenga tiros complicados«

LeBron tuvo la opción de ganar el partido justo antes de la prórroga, pero no sabía que Iguodala le tenía tremendamente estudiado y sabía exactamente que haría.

«El año pasado nos ganó con un lanzamiento parecido en casa«, comentó Iguodala. «Se suele tener una sensación de lo que los rivales quieren hacer y quieres que tengan lanzamientos complicados pero que no entren en buen ritmo. Sabía qué tipo de jugada quería fabricar. Ir a la izquierda, dar un paso atrás y aunque yo estuviera junto a él, fue capaz de lanzar«.