Años antes de draftearlo, los Boston Celtics ya seguían a Marcus Smart

La NBA tiene historias bonitas, de lucha y superación, de ascenso y caída, curiosidades, y anécdotas, que hacen que sea uno de las mejores ligas del mundo. Hoy os traemos una relacionada con el jugador de los Boston Celtics, Marcus Smart, y cómo Danny Ainge y su equipo estuvieron siguiendo durante años antes al «NBA Draft 2014» donde finalmente pudieron escogerlo.

Este relato lo saca a la luz en un brillante artículo para el Boston Globe, Adam Himmelsbach, y nosotros intentaremos contar la historia en castellano para que todos podáis disfrutarla:

Tras el Draft de 2014, Smart celebraba con su familia haber sido seleccionado en una de las posiciones más altas, y parecía que la elección de los Celtics era la más lógica y la obvia. Pero lo que no sabía Smart, es que los Celtics llevaban siguiéndole años, y que su elección tenía detrás mucho más trabajo de lo que pensaba.

Es conocida en Ainge su preferencia por conocer y ver a los jugadores en persona, mejor que en la televisión o en un vídeo. El General Manager, tiene un pequeño grupo de ojeadores, su hijo Austin, Dave Lewin, Remy Cofield y Jake Eastman.

Cuando Smart estaba jugando para el instituto en Flower Mound, Texas, Lewin era ojeador para los Cavaliers y había escuchado informes brillantes sobre Smart, sobre todo de Dave Telep, que era entonces analista nacional y ahora es el coordinador de ojeadores de los Spurs.

En abril de 2012, Lewin viajó ha Louisville, donde Smart estaba jugando el Derby Festival Classic, un torneo all-star de segundo nivel para jugadores que terminan el instituto. En ese partido también estaba Sam Dekker o Steven Adams entre otros. Pero Smart destacaba.

«Él era el jugador que más me emocionaba ver» dijo Lewis. «Solo ver lo duro que jugaba, lo rápido que iba a por los balones sueltos, lo físico que era».

Incluso llegó a ganar el concurso de mates de ese evento, realizando un mate de espaldas tras un mortal hacia delante.

Más tarde ese mes, Smart llamó la atención de Austin Ainge en el McDonald’s All-American Game.

«Aún teniendo solo 17-18 años, él ya era un hombre», dijo Ainge. «Y su esfuerzo y competitividad eran algo fuera de lo común».

Los ejecutivos de los Celtics no le quitaron ojo cuando jugó para la selección de USA-18 ese verano. No podían saber en qué se iba a convertir, o si Boston tendría alguna vez la oportunidad de escogerlo. Pero Smart había despertado el interés de la franquicia, y este aumento cuando empezó a jugar para OKC State.

«Tenía cosas en juego que me parecían algo simplemente espectacular, desde un punto de vista competitivo», decía Danny Ainge. «Era un producto sin pulir, pero me gustaba su espíritu, y como se acercaba al juego. Me gustó ese fuego».

Smart fue nombrado  Big 12 Player of the Year en su primer año, y Ainge hubiera ido a por él si se hubiera presentado ese año, pero decidió quedarse en OKC un año más.

Lewin, que se unió a los Celtics en agosto de 2012, fue a Orlando en la temporada 2013-2014, para ver jugar a Smart tres partidos en el Old Spice Classic. El año anterior, ese evento le ayudó a identificar a otra futura selección de los verdes, Kelly Olynyk.

Smart anotó 30 puntos en el primer partido ante Purdue, y Lewis estaba extasiado.

«Hablé con Danny sobre Marcus probablemente cada día que pase allí, lo que estaba haciendo, lo que estaba viendo», decía Lewin. «Sabía que Marcus era un chico que ejemplificaba las características que Danny valora, por lo que durante ese tiempo estuvimos hablando de lo que aportaba y como encajaba en el equipo que estábamos intentando construir».

Lewis comenzó a reunir información de fuentes de OKC State, visitando entrenadores, asistentes y gerentes. Algunos entrenadores no cuentan la realidad para intentar vender a sus jugadores, pero estas falsas alabanzas con el tiempo salen a la luz, otros cuentan la verdad, aunque esta duela. Lewis tenía una relación de confianza con el personal de los Cowboys de OKC State, por lo que su admiración por Smart era significativa.

Cofield fue a las Vegas, días antes de Navidad, para ver a OKC State contra Colorado, y cuando presentó su informe, señaló la intensidad y versatilidad defensiva de Smart, dos rasgos que Brad Stevens valora altamente.

El 8 de febrero, hubo un retroceso. En los minutos finales del partido que perdían contra Texas Tech, Smart se caía entre el público tras una falta, tras levantarse, un hombre en la grada dijo algo a Smart que provocó que este empujará al aficionado. Smart fue sancionado tres partidos, y se plantearon dudas sobre su temperamento.

Tras unas preocupaciones iniciales, los Celtics, determinaron tras investigar, que era un accidente aislado.

«Cada entrenador, cada compañero  que Marcus, jamás lo habría pensado, solo pensaban que él era un guerrero», dijo Austin Ainge.

Según avanzaba la temporada, el equipo no sabía si tendrían la oportunidad de escoger a Smart, pensaban que tendrían un selección alrededor del número 10, y situaban a Smart como un top3, por lo que no se querían cerrar puertas.

Pero tras la decepcionante temporada, terminada con un récord de 25-57, los Celtics intensificaron su carrera por Smart.

«A veces llegamos tan lejos como para hablar con los profesores de instituto y universidad del jugador» dijo Danny Ainge. «Basta decir que hablamos con decenas de personas cercanas a Marcus».

Las preguntas no eran sobre las cualidades físicas del base. Ellos sabían que podía atacar el aro, ellos sabían que podía asfixiar a un rival. Ellos sabían todo eso.

«Preguntábamos sobre cosas más difíciles de ver, como qué tipo de compañero es, si es fácil entrenarlo, que hábitos de trabajo tiene», dijo Lewis. «¿Es un jugador comprometido a mejorar sus debilidades?».

La respuesta, rotunda, fue sí.

Smart firmó con Wasserman Media Group poco antes de entrar al draft. Como favor a sus amigos de la agencia deportiva, Darren Erman, que había sido despedido como asistente de los Warriors, acordó unos entrenamientos con Smart en Los Ángeles.

Las sesiones no eran para que Smart mostrase sus fortalezas, no había nadie al que vencer. Erman recordó la primera vez que trabajó con el rookie de los Warriors, Klay Thompson en 2011. Le dijo que fuera alrededor de la línea de tres puntos y metiera tantos triples seguidos sin fallar como pudiera. Erman dijo que Thompson encestó, 13 seguidos desde la esquina izquierda, 8 desde el ángulo izquierdo, 10 desde el centro, 11 desde el ángulo derecho y 8 desde la esquina derecha.

Este entrenamiento no fue como el de 2011.

«Marcus era buena cuando hacíamos ejercicios defensivos, pero no podía decir nada sobre su juego ofensivo», dijo Erman. «No podía, él acaba de dejar la universidad y no era un tirador aún. Y yo acababa de estar trabajando con Thompson y Curry».

Dos semanas después, Erman fue contratado por los Celtics, y le habló a Ainge sobre sus entrenamientos con Smart, explicando que le gustaban sus intangibles, pero que estaba preocupado por sus habilidades ofensivas.

SU MEJORA EN OKC STATE:

2012-2013: 15,4 puntos/40%TC/29%T3/77%TL/4,2 asistencias

2013-2014: 18 puntos/42%TC/29%T3/72%TL/4,8 asistencias

«Pero Danny no estaba preocupado», dijo Erman. «Le encantaba su esfuerzo. Se enamoró de él desde el primer día. Y por eso Danny es genial en lo que hace».

Tras la lotería, los Celtics tenían el pick 6 y solamente dos candidatos, Marcus Smart y Aaron Gordon. El staff, decidió que las habilidades que tenía Smart le hacían estar preparado para NBA, y que sus debilidades como el tiro o el pick and roll, se podrían mejorar con entrenamiento.

«Como dos semanas antes del draft», decía Lewin, «estaba claro que de las posibilidades que podían llegar al 6, Danny estaba más  cómodo y excitado con la elección de Marcus».

Marcus visitó Waltham el día 23 de junio, junto con un grupo de jugadores que incluían a: Elfrid Payton, Nik Stauskas, Gary Harris, Zach LaVine y Jordan Clarkson.

Smart era el cabeza de cartel. Los jugadores en esta situación no quieren competir, porque tienen mucho que perder y poco que ganar, el ala-pívot Julius Randle hice el entrenamiento él solo. Pero ese no es el estilo de Marcus.

«Pongas a quien pongas delante de mí, no voy a dar marcha atrás», dijo ese día. «Nunca retrocedí ante un desafío».

Al comenzar la sesión, Smart saltó a taponar un tiro y se torció un tobillo, no dijo nada sobre su dolor, porque no quería mostrar debilidad, pero ahora reconoce que la lesión le mermó, haciéndole fallar tiros.

La opinión de Danny Ainge no cambió, pero gente del personal tenía dudas:

«Estábamos como, ooh eso estuvo mal» dijo Ainge.

Por lo que los Celtics hicieron algo inusual, le llamaron para hacer otro workout.

«Voy a hacerlo mejor que la última vez», dijo Smart. «Y si me llaman para que vaya una tercera, volveré aún mejor».

En el segundo entrenamiento se notaba que tenía algo que demostrar.

«Iba hacía el aro, metía tiros, defendía», dijo Smart. «Hice mi dominio conocido».

«Nuestro personal no estaba en la misma página tras el primero», dijo Ainge. «Pero tras el segundo, todos estábamos en la misma página de forma unánime».

Una semana antes del Draft, Ainge preguntó  a su staff por su ranking de jugadores. La información es un punto de referencia, pero esto no es una democracia, Ainge tenía decidido que quería a Smart, ahora había que ver si podía conseguirlo.

El agente de Smart le dijo que los Magic tenían interés, pero eligieron a Gordon, luego Exum para los Jazz. Danny Ainge estaba tranquilo, faltaban dos minutos para poder seleccionar, cuando los Celtics llamaron mientras estaba sentado en su mesa con su familia.

«Era como, Oh Dios mío» dijo Smart.» Esto está sucediendo realmente».

Su familia estaba emocionada, pero les pidió que se calmaran, porque no quería creerlo antes de que Adam Silver dijera su nombre. Entonces Smart miró a su madre, vio la alegría en su rostro y entonces comprendió la realidad.

Para Ainge y su personal, un proceso que había durado tres años, acababa en el final deseado. El equipo se sintió aliviado, Lewin durmió doce horas ese noche.

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