Los Wizards firman un contrato no garantizado a Jaleel Roberts
Estará a prueba durante el Training Camp
En plena revolución del small-ball en la NBA, la altura empieza a ser un factor poco significativo para muchos equipos en comparación con el tiro, el manejo del balón, la agilidad o IQ. Sin embargo, para Jaleel Roberts su físico le ha abierto las puertas de la NBA a pesar de haber promediado 7.1 puntos, 5.2 rebotes y 2.5 tapones para la UNC Asheville y no haber sido drafteado.
Sus 2,13m y 100 kilos de peso le hacen un jugador bastante potente para la pintura, pero sus estadísticas son muy pobres para haber estado en un equipo menor de la NCAA. Por tanto, si en Washington saben que Roberts tan sólo es un jugador grande con pocas posibilidades de jugar en la NBA, ¿para qué traerlo? La respuesta es sencilla. El objetivo primero de su llegada al Training Camp es tener a alguien más en los entrenamientos para que juegue con los veteranos – Nene, Marcin Gortat y Drew Gooden – y prepararles físicamente para esta temporada.
Por su parte, los Wizards tampoco correrán el riesgo de ficharle de cualquier manera sabiendo que es bastante probable que no logre hacerse un hueco en un equipo que ya cuenta con 15 contratos garantizados. La opción habitual en la NBA es hacerse con los derechos del jugador para luego enviarlo a la D-League si el fichaje no sale bien y poder recuperarlo cuando sea propicio. No obstante, los Wizards no tienen ningún equipo afiliado, por lo que esta vía queda descartada. Por tanto, le tendrán en plantilla durante el Training Camp con un contrato no garantizado para, si no cuaja, poder deshacerse de él. Si al final lograra demostrar que es carne de NBA, primero transferirían a alguien, posiblemente Garrett Temple, para hacerle un hueco.