Tony Allen acoge a Courtney Lee bajo sus alas
Ambos se entienden a la perfección
Jeff Green partió del Boston Garden el pasado enero en busca de un protagonismo mucho más contundente. Desde Massachusetts hasta Tennessee viajó el alero para cambiar de aires y finalmente recalar en los Memphis Grizzlies de “Marc Gasol & company”. Es cierto que David Joerger contaba (y sigue contando) con el más que efectivo núcleo Marc-Randolph-Conley-Allen, pero también es cierto que si el equipo pretendía dar un salto de calidad, tendría que adquirir nuevas piezas sí o sí. Sobre todo, para reforzar uno de los puntos más débiles de la plantilla: la posición de 3. Y entonces, llegó Jeff.
Por todos es conocida la amplísima dimensión atlética que aporta un jugador como Green a cualquier plantilla, de vital importancia precisamente para un equipo de las características de Memphis. A priori, todo parecía indicar que Courtney Lee tenía las horas contadas en el quinteto titular para esta temporada. Sin embargo, el ex de Sonics, Thunder y Celtics, podría ver cómo su “favoritismo” de cara a la titularidad se tuerce a favor de Lee debido a la buena química que existe entre el escolta de Indiana y el veterano Tony Allen.
Allen, alma defensiva del equipo, confirmó dicho entendimiento entre él y el mencionado Lee, del cual agradece los desafíos que en cada entrenamiento le intenta poner por delante para mejorar:
“Reto a Courtney desde el principio de cada entrenamiento. Durante un partido, para él es pan comido. Pero cuando juega contra el posible quinteto titular en el entrenamiento, lo acoso y él responde para dar lo mejor de sí. Gracias a esto, usted verá que esta temporada va a explotar”, explicó Tony Allen al medio Commercial Appeal.
Dave Joerger reconoció no saber aún el nombre del elegido para el quinteto titular. La mentalidad defensiva y el ambiente de unidad que impregnan el vestuario de Memphis deberían de dejar las puertas abiertas a ambos jugadores, pero la exigencia en la NBA es máxima. Aunque está claro que detalles como los 18 puntos y el gran ritmo de juego mostrado por Lee durante el último partido frente a Warriors, son los que declinan la balanza para un lado u otro. La competición está servida.