Los Suns no mostraron ningún tipo de respeto a Marcus Morris

El jugador dice que no pasó un buen tiempo en la franquicia de Arizona

Fuente de la foto: lukexmartin (CC)
Fuente de la foto: lukexmartin (CC)

«Cada vez que un equipo te traspasa de esta manera, es como si te dieran una bofetada. Me siento despreciado, y ahora quiero despreciarlos yo a ellos«.

Los Phoenix Suns y Marcus Morris no guardan una buena relación, ya que desde el momento en el que el alero salió de la franquicia por la puerta de atrás, no ha dejado nunca de mostrar su descontento con la situación que sufrió. Marcus Morris jugaba con su gemelo Markieff, y ambos se apoyaban en los malos momentos, como por ejemplo cuando han tenido que afrontar la denuncia por asalto. El hecho de estar juntos era de gran valor, pero la franquicia no tuvo miramientos en enviar a Marcus a Detroit sin ni siquiera comunicárselo al jugador primero, ya que este reveló que se enteró por mensajes y redes sociales mientras estaba en unas vacaciones familiares.

Ambos gemelos se lo tomaron muy mal. Marcus llegó a la Motown muy quemado con la situación, y Markieff dijo a los cuatro vientos que quería salir de  la franquicia, aunque últimamente la situación se haya calmado. Pese a que los días pasan y en Detroit las cosas van bien para el menor de los gemelos Morris, el nuevo jugador de los Pistons nunca evita contestar una pregunta sobre su pasado en los Suns:

«La franquicia de los Suns me estuvo faltando al respeto durante el tiempo que estuve ahí. Estaba jugando bien, pero sentía que no me dejaban crecer como jugador, no me daban oportunidades».

Recientemente en una entrevista para los medios de Detroit, Morris declaró que nunca había tenido a un entrenador a su lado que realmente le dejara jugar a su manera. Marcus tiene un estilo de juego que ahora no se lleva en la liga, el tiro de media distancia, y los entrenadores le limitaban los tiros y le forzaban a jugar en otras zonas de la pista. Ahora en Detroit, Morris es libre de desarrollar su propio juego, cosa que hace sentir al jugador como si hubiera encontrado su lugar.