Nik Vucevic no pierde su confianza a pesar de jugar menos minutos

Situación rara la que hubo el pasado miércoles ante los Timberwolves en el Amway Center, y es que el pivote referente del último tiempo de la franquicia, inclusive con números dignos de All Star, Nik Vucevic vio desde el banquillo todo el segundo tiempo y la prórroga del triunfo del Magic. Decimos que la situación es rara porque en ninguno de sus anteriores 216 partidos con el equipo le ha sucedido eso.

«No afecta mi confianza en absoluto. Obviamente que me hubiera gustado estar allí con mis compañeros, pero el entrenador decidió no jugar conmigo. Hice lo que pude para apoyar al equipo y ayudé en todo lo que podía. Sentí como que podía ayudar desde el banquillo apoyándoles, hablar con ellos en los time out y otras cosas. Eso es lo que quiero hacer. No importa quien juegue. Lo importante es que ganamos.»

Esto expresó ante los medios el pivote montenegrino en el día de ayer cuando fue consultado sobre sus sensaciones de estar tantos minutos sentado en el banco. Inclusive, el día del partido, y posterior al juego, estuvo alrededor de una hora en el gimnasio del estadio entrenando. Las palabras vertidas y la actitud demostrada el día del partido, son otra muestra más del cambio impuesto por Scott Skiles, en el cual el equipo está por encima de los nombres y también que las rotaciones a diferencia del anterior coach, Jacque Vaughn, son más variadas y nadie es inamovible. Prueba de ello es que además de Vucevic, luego de una mala primera mitad ante Minesotta, en el segundo tiempo arrancó en el banquillo Victor Oladipo, quizás el que más perfil de líder tiene en el equipo.

Vucevic es un pilar fundamental del equipo y es referente dentro el núcleo de jugadores jóvenes que componen la plantilla. Sus números la ultima temporada hablan por si solos , siendo uno de los que más doble-doble hace en toda la Liga, no obstante, y a pesar de que con Vaughn era intocable, tiene en claro la idea del actual entrenador, Scott Skiles  y solo se enfoca en lo mejor para el equipo.

«Es diferente con cada entrenador, y está en nosotros ver como nos ajustamos a eso. Él nos dijo que él no tenía una rotación específica en su mente, y todavía está en busca de los chicos que él va a jugar, y no va a ser lo mismo todas las noches.»

Orlando recibirá mañana sábado a los Sacramento Kings en busca de una victoria y tener por primera vez después de mucho tiempo, un récord positivo de victorias. Por ahora son 6 triunfos y 6 derrotas.