Andre Drummond trabaja en sus tiros libres

Desde enero su porcentaje ha mejorado

Fuente: Erik Drost (CC)
Fuente: Erik Drost (CC)

El estelar pívot de los Detroit Pistons, Andre Drummond, es considerado a día de hoy como uno de los mejores en su puesto, debido a su gran habilidad para rebotear y postear, o su conocida y rocosa forma de defender, que sin duda alguna intimida a los rivales a la hora de intentar entrar a canasta. Por esta serie de razones, es más que justo decir que lleva a los Detroit Pistons a sus espaldas sin ningún tipo de miedo.

Sin embargo, todos los héroes tienen su talón de Aquiles, y el de nuestro amigo son los tiros libres. Desde que entró en la universidad de Uconn, Andre ha demostrado tener un miedo irracional a la línea de tiros libres. Y uso el término miedo, debido a que el propio Dre’ revela que se pasa las horas practicando los tiros libres, a pesar de lo que en un principio pueda aparentar de cara al público.

«Desde mi punto de vista, nadie sabe lo que hago en el día a día. Diariamente, llego al gimnasio y me paso la noche tirando tiros libres, pero ellos solo ven el resultado, y como ahora no estoy tirando bien se creen que no le estoy dedicando tiempo» decía un frustrado Drummond.

Estas declaraciones son fácilmente contrastables, si se pone el punto de mira en las estadísticas; a inicios del año, los parámetros de Drummond quedaban en un desastroso 29%. Sin embargo, en lo que llevamos de febrero, el pívot está promediando un excelente porcentaje del 43%.

Andre Drummond TL % Partidos
Mes
Octubre .581 3
Noviembre .315 15
Diciembre .368 15
Enero .292 15
Febrero .431 9

Esta evolución ha tenido mucho que ver con la mecánica de tiro. Drummond, desde enero, ha ido dando un progresivo proceso de evolución en el aspecto de colocación de los tiros libres; colocar los pies a la misma distancia, mirando hacia la canasta, y con el codo recto y posición de 90 grados. Es decir, Andre ha ido a entrenar con un grupo de alevines, y algo se le ha quedado.

Con esta mejora, atrás deberán quedar partidos como el de los Rockets, donde la marioneta de K.J. McDaniels le hizo un favor a su entrenador y no se despegó de Drummond para hacerle falta lo más rápido posible. Si este entrenamiento se aloja en la mente de Drummond a estilo de mantra, puede que las opciones de playoff crezcan considerablemente.