Mark Cuban no se corta un pelo de nuevo
Habló sin tapujos de sus Mavs, del All-Star y mucho más

Con el ya finalizado trade deadline aún a la vuelta de la esquina, el carismático propietario de los Mavericks aprovechó las horas previas al cierre del mercado de traspasos para pasarse por un par de radios de Dallas y hablar de su equipo. Cuban no solo habló de la posibilidad de que los Dallas Mavericks hicieran algún traspaso, también aprovechó para hablar sobre los temas de actualidad que rodean a los Mavs y, como es habitual en él, no se mordió la lengua cuando fue preguntado sobre el All-Star Game.
Cierto es que no pintaba a que hubiera un traspaso importante con los Mavs como una de las partes implicadas, —menos aún con lo sucedido el año pasado con Rondo—, pero por siempre hay que estar alerta en esta liga, sobre todo después de los tímidos rumores que situaban a Carmelo en Dallas y a Parsons en la gran manzana. Cuban se encargó de disipar dicha posiblidad y dejar claro que Parsons no iba a ser traspasado, aunque sí que dejó la puerta abierta a un posible trade para mejorar el banquillo:
«No, eso no va a pasar. No nos veo traspasando a ninguno de nuestros titulares, pero estamos mirando si podemos conseguir algo de ayuda para el final del banquillo. Creemos que nuestro banquillo puede mejorar».
Finalmente los Mavs no hicieron ningún movimiento de úlima hora y esperaron a los cortes de jugadores para hacerse con David Lee y reforzar el banquillo.
Sobre el rendimiento del equipo hasta el momento y sobre si había sido mejor de lo esperado, Cuban dejó claro que no habían superado sus expectativas y que necesitaban ser más constantes; sobretodo en su pista. Además, siguió en la línea de que «la segunda unidad debe mejorar«. También fue preguntado por Pachulia y, esta vez, a diferencia de otras ocasiones, sí que admitió que, en parte, les había sorprendido. También añadió que hacía tiempo que le seguían y que no era la primera vez que intentaban ficharlo. Y no, a lo largo de la entrevista no apareció el nombre de cierto pívot de Los Ángeles Clippers.
El otro tema de conversación en torno al cual giró la entrevista también tuvo nombre y apellido: Chandler Parsons. Desde el principio Cuban dejó claro que Parsons no iba a formar parte de ningún traspaso, pero tiró balones fuera cuando se le preguntó sobre si el alero iba a ejercer su opción de jugador o se iba a salir del contrato:
«No hemos hablado de ello aún. Chandler (Parsons) y yo hablamos continuamente, sobre muchas cosas, pero aún no hemos hablado sobre esto».
Tampoco se mostró muy convencido —cosa obvia por otra parte— de que los Mavs opten a ganar el anillo con Parsons como referencia. Almenos este año:
«No lo sé. Es obvio que Chandler (Parsons) está mejorando. Creo que es uno de nuestros objetivos. Si miras nuestro quinteto titular, no está nada mal. El problema es que no hemos sido capaces de jugar juntos lo suficiente porque nuestra segunda unidad no es como queremos que sea«.
Durante la entrevista también hubo tiempo para que Cuban dijera, por enésima vez, que por poco que pudieran evitarían el tanking y que la estrategia de Dallas era añadir jugadores mediante la agencia libre, el mercado de trapasos y el draft, pero que este último, por más que tuvieras un buen pick, no te garantizaba hacerte con un futuro All-Star. Y añadió, ya que parece ser que hay seguidores de los Mavs que no creen que esté haciendo lo suficiente para convertir a los Mavericks en un equipo campeón, lo siguiente:
«Evidentemente quiero ganar de igual forma que quiere ganar cualquiera, pero nadie es más competitivo que yo. Ni Dirk, ni Michael Jordan, ni Kobe Bryant«.
Pero por si una cosa se ha caracterizado el dueño de los Mavericks es por no morderse la lengua, así que cuando fue preguntado sobre el All-Star Game del pasado 14 de febrero donde el Oeste venció al Este, con récord de anotación incluido, por 196 a 173, respondió:
«Fue de locos. Mirarlo no fue divertido, en absoluto. La peor parte fue que no hubo defensa alguna y aún así los dos equipos tiraron en un 55%. No sé como podemos cambiar esto, pero creo que los jugadores estarán avergonzados y reconocerán que lo que pasó este año no es bueno para el juego«.
Y por el bien del baloncesto y de la NBA, esperemos que así sea.