Denzel Valentine realiza un workout con los Bucks

Se une a Ellenson y Poeltl

Denzel Valentine subiendo el balón. Foto: Robin Alam/Icon Sportswire
Denzel Valentine subiendo el balón. Foto: Robin Alam/Icon Sportswire

Viendo los últimos workouts individuales, de Henry Ellenson y Jakob Poeltl, y los colectivos, con la asistencia de hombres altos destacados como Thon Maker o Joel Bolomboy, todo hace pensar que los de Milwaukee necesitan un interior para el próximo draft. Pero parece que las tornas han cambiado, o es simplemente una excepción, ya que Denzel Valentine ha realizado un workout con los Bucks y es uno de los favoritos para acabar como elegido. Por si no sabéis de quien estoy hablando, es un playmaker de Michigan State, mide casi 2 metros, y es senior (22 años), considerado el mejor jugador de la temporada, National Player of the Year.

Es uno de los más destacados en el draft y a quien no le gustaría tenerlo en su equipo promediado 19’2 puntos, 7’5 rebotes, 7’8 asistencias y 1 robo en 33 minutos por partido, con una efectividad del 46’2% en tiros de campo, 44,4% en triples y un 85’3% en la línea de libres. En sus puntos fuertes debemos hacer énfasis en su físico, su altura y su envergadura en la posición de base destacan sobre el resto, lo que le ayuda a capturar un número encumbrado de rebotes, contrastado con sus defensores. Tiene una buena lista de recursos ofensivos, sin embargo no hay que engañarse, abusa mucho de su tiro exterior el cual ha dado muy buenos frutos, también es capaz de asistir y mover el balón, dando vida al equipo. Y para acabar los pros de este jugador me quedo con que tiene de los mejores PER y el mejor CI de esta generación.

Por otra parte no debemos de olvidar sus carencias, las cuales nos recuerdan a alguien en especial (si, correcto, estamos hablando de MCW), las principales en recalcar en mi opinión son, la defensa tan pésima del espartano, y la toma de decisiones, ya que se precipita y pierde muchas veces el esférico. También se le considera un jugador «lento», sin chispa, sin verticalidad, y en ocasiones sin creatividad, algo muy dañino al juego.