Cómo entender los nuevos contratos NBA
con la subida de 24 millones llegan contratos inéditos
El nuevo margen salarial de 94 millones de dólares que la NBA declaró oficialmente, como directa consecuencia del nuevo contrato televisivo, ya nos ha costado más de un ataque al corazón. El más reciente probablemente sea el de la supuesta oferta que los New York Knicks ofrecerían a Joakim Noah, de alrededor de 18 millones de dólares. Una barbaridad… ¿Seguro?
Bobby Marks ha dado una nueva perspectiva sobre cómo deberíamos entender los límites salariales, y los contratos de los jugadores, de ahora en adelante:
Can't stress enough that contracts under the new TV $ should be viewed as a % against the cap compared to actual $ figure.
— Bobby Marks (@BobbyMarks42) June 30, 2016
A todos nos va a costar adaptarnos a ver contratos de 20 millones de dólares, y a que los sueldos medios de la liga vayan a rondar los 14 millones de dólares aproximadamente, pero si queremos suavizar esta transición, lo mejor que podamos hacer es aplicar el punto de vista que Marks comenta.
La NBA entra en una nueva era, y por lo tanto, no podemos intentar comprenderla con las ideas del pasado. 18 millones de dólares son una completa barbaridad para cualquier persona del mundo, pero lo son más todavía si son una cantidad que habríamos acostumbrado a ver únicamente en aquellos jugadores que fueran la referencia en su equipo. Sigue siendo impactante si tenemos en cuenta que, por ejemplo Jimmy Butler, únicamente superará ligeramente dicha suma a partir de la temporada que viene, y en ningún caso llegando a los 20 millones de dólares a pesar de poder extenderse su contrato hasta la temporada 2019-20.
Pero, volviendo a la solución de los porcentajes, Bobby Marks no va nada desencaminado. En la pasada temporada, Kevin Durant cobró 20 millones de dólares sobre un límite salarial de 70 millones, lo que ocupaba un total del 28% del espacio salarial de la franquicia de Oklahoma. Ahora bien, si echamos un vistazo al contrato actual de Kevin Love, de 21 millones de dólares, podemos observar que sobre el nuevo límite salarial de 94 millones de dólares, ocupa un 22% del espacio salarial del equipo. Por lo que los 18 locos millones de Noah, estarían sobre el 20% del espacio salarial total de los Knicks, o en términos antiguos, como Marks apunta de nuevo:
For example an $18m contract signed this July = a $13m contract based on a $70m cap from 2015-16.
— Bobby Marks (@BobbyMarks42) June 30, 2016
Si tuviéramos que poner a escala los 18 millones sobre el valor del antiguo contrato televisivo, vemos que eso 13 millones son mucho más reales para Noah (aunque sigue estando por encima de lo que debería cobrar, seamos honestos). De esta forma podemos comprender un poco más los nuevos contratos, y preparanos mentalmente para las grandes cifras que van a sobrevolar el mercado en los días venideros.
Si del anterior ejemplo de Kevin Durant, sacamos la idea de que el jugador franquicia de un equipo cobra alrededor de la tercera parte total del espacio salarial, debemos asumir que con el nuevo límite en 94 millones, veremos máximos de entre 28 y 30 millones de dólares anuales, por lo que los contratos de 14 y 15 millones de dólares serán bastante recurrentes este verano. Pero no debemos de alarmarnos por ello.
En Tristan Thompson encontramos el mejor ejemplo sobre cómo afrontar los sueldos de los jugadores que, a priori, van a tener un claro y único rol en el equipo. Esta pasada temporada Thompson cobró 14 millones de dólares sobre el límite de 70 millones, lo que supuso un 20% del espacio salarial total. Este año sin embargo, y a pesar que su sueldo incrementará ligeramente en 1 millón de dólares, su peso económico disminuirá hasta un 16% del espacio salarial total, haciendo de su contrato uno mucho más llevadero.
El caso de Thompson se puede llevar al de otros jugadores como por ejemplo Enes Kanter, dejando de nuevo la puerta abierta a posibles traspasos a jugadores que en un principio, y dada su situación contractual, habría sido imposible pensar antes. El mayor ejemplo de esto ha sido recientemente Derrick Rose y su pesado contrato de 21 millones, el cual habría sido imposible de mover para los Chicago Bulls de no ser por el increíble aumento de 24 millones de dólares en el límite salarial de las franquicias NBA.