Mike Conley, la bisagra perfecta en Tennessee

Como ya  habréis podido conocer, durante las últimas horas la agencia libre 2016 comenzó y los medios de comunicación no han parado de echar humo ante tal aluvión de rumores y noticias sobre contrataciones que, por el momento, se caracterizan por parecerse más a una escena de la famosa película de El Lobo de Wall Street que a un mercado en el que la guerra por contratar a unos y a otros fuera mucho más feroz entre ofertas tanto salariales como deportivas de unas y otras franquicias. En el caso de los Memphis Grizzlies, el alero hasta ahora de los Mavericks, Chandler Parsons, saltó a la palestra hace ya varios días como una más que posible opción para dar a los de Tennessee un tremendo salto de calidad, al igual que lo han hecho otros como el también alero de Atlanta Hawks, Kent Bazemore.

Pero por ahora, si un nombre resalta entre todos los demás dentro de las oficinas de Chris Wallace es el de su base estrella, Mike Conley. La importancia del base en toda la estructura grizzlie es de sobra más que conocida, algo que sin duda le convierte en la bisagra del proyecto que se traen entre manos el general manager y su equipo de trabajo este mismo verano.

Ya hemos hablado suficiente sobre la enorme presión que este estará, a buen seguro, ejerciendo sobre su franquicia para que esta desarrolle un proyecto deportivo contundente y aspirante de verdad a hacer algo grande el próximo año junto a un Marc Gasol recuperado. En estos momentos toca hablar de eso sobre lo que está debatiendo constantemente en estas primeras horas de mercado: dinero.

GRANDES POSIBILIDADES CON MIKE CONLEY

Desde que llegó a la NBA en el año 2007, Mike Conley nunca ha pisado un pabellón que no sea el FedEx Forum de Memphis. A lo largo de sus nueve años de carrera, su historial contractual ha sido el siguiente:

• 29 julio 2007: 7 millones de dólares por dos años. Su contrato rookie. El equipo ejerció las dos opciones que tenía sobre él para los dos siguientes años, hasta 2009.
• 2 noviembre 2010: tras finalizar su primer contrato, renueva a mitad de temporada por media década y un total de 40 millones de dólares. Es aquí donde se encuentra el meollo del asunto, que puede ser de notable importancia en este momento.

Como muchos conoceréis, las excepciones en los contratos NBA se utilizan para poder sobrepasar el límite salarial impuesto por la liga sin tener que pagar a mayores. De entre todas ellas, destaca una conocida como la Larry Bird Exception.

Dicha excepción versa sobre un caso que se dio con el mítico jugador que da nombre a este tipo de contrato. Según esta, un equipo podrá firmar a sus propios agentes libres hasta el máximo salarial aún sobre pasando el límite salarial solo cuando el jugador en cuestión haya jugador bajo el mismo contrato y equipo durante tres años. De ser traspasado el jugador, dichos derechos, denominados Bird Rights, se traspasarían también.

Leyendo el anterior párrafo, por tanto, habréis podido llegar a la conclusión de la importancia de ese segundo contrato que en su día firmó Mike Conley. Más de tres años jugando bajo el mismo contrato y el mismo equipo, lo que significa que ahora los Memphis Grizzlies podrán firmarle por un jugoso contrato aún sobrepasando el límite salarial, que en estos momentos se encuentra en 94 millones. Por otro lado, el tope salarial de impuesto de lujo es de 113 millones, una diferencia que puede dar a los Grizzlies un margen de maniobra muy alto, con la esperanza de poder firmar a uno, o varios agentes libres que junto a Mike Conley y Marc Gasol den ese salto cualitativo que tanto tiempo se viene deseando en las gradas y oficinas del FedEx Forum.