El Herbalife Gran Canaria y el Barça Lassa llegaban a la final de la supercopa ACB con un mismo objetivo: alzarse victoriosos. Los números hablaban en favor del conjunto catalán, ya que durante los últimos 6 años, o bien Barça, o bien Madrid, habían terminado alzándose con cualquiera de los títulos ACB que tocaban disputarse. Sin embargo, la determinación del Gran Canaria, que acabaría brindándoles la victoria, se haría palpable desde el primer minuto de partido.
El Gran Canaria se presentaba a la final con un quinteto compuesto por McCalebb, Salin, O’Neale, Báez y Hendrix. Mientras que el Barça Lassa lo haría con Rice, Oleson, Perperoglou, Claver y Tomic.
Iniciaría el partido y los primeros minutos del Herbalife no serían otra cosa que una clara declaración de intenciones con un McCalebb espectacular, haciéndolo todo y de todas las formas posibles para su equipo, tomando así el liderazgo del partido desde el primer momento, un liderazgo que el Gran Canaria se negaría a abandonar a lo largo del encuentro. Se esperaba que tras su increíble actuación el día anterior ante el Real Madrid, Tyrese Rice se encargara de nuevo de liderar al conjunto blaugrana. Sin embargo, se vio rápidamente inhabilitado por el gran trabajo defensivo del Herbalife Gran Canaria, que le haría vivir una auténtica pesadilla. Llegábamos al final del primer cuarto con un resultado de 23-17 en favor del Gran Canaria.
Comenzaría el segundo cuarto con el Herbalife sin dejar un solo metro para respirar al Barça Lassa. Reflejo de este asfixiante encuentro sería el propio Dorsey, incapaz de entrar eficazmente en el juego y llegando a recibir una técnica a causa de no saber soportar la presión que le obligaría a marcharse al banquillo. Entraría Tomic en su lugar, algo que el Herbalife, y en especial Planinic, se encargarían de aprovechar a las mil maravillas. Bloque y continuación, uno tras otro sobre la figura de un descolocado Tomic defensivamente que resultaba totalmente incapaz tanto de ayudar a sus compañeros como de mantenerse firme bajo el aro. El Gran Canaria seguiría con un harmonioso y generoso juego basado en el extra pass que incapacitaría a la defensa del conjunto de Bartzokas una y otra vez. Al llegar al descanso el marcador electrónico reflejaba un claro +11 a favor del equipo de Luis Casimiro.
Con el inicio del tercer cuarto, el Barça Lassa sufriría los peores momentos de la noche. Siguiendo la dinámica de cuartos anteriores, se verían incapaces de quebrar la ofensiva del Gran Canaria, tan atractiva como eficaz. Sin embargo, el gran problema del conjunto de Barzokas no residiría en la anotación de su rival, sino en la suya propia. La férrea defensa del Herbalife forzaría pérdida tras pérdida y mal tiro tras mal tiro del conjunto blaugrana, lo que les llevaría a estarse hasta más de 3 minutos sin sumar un solo punto, y hasta más de 5 sin hacerlo mediante una canasta en juego. El reflejo del conjunto de Bartzokas en este caso no sería Dorsey, sino un Tyrese Rice totalmente cabizbajo y derrotado ante una muy oscura noche tanto para él como para su equipo. Llegaríamos al final del tercer cuarto con un 62-48 a favor del Herbalife, que dejaba la final prácticamente sentenciada.
Al comienzo del último cuarto, el Barça Lassa no estaba dispuesto a tirar la toalla todavía, y lograron reducir la desventaja hasta menos de 10 puntos, aunque ello no duraría demasiado. Una nueva sequía anotadora acabaría sentenciado al conjunto blaugrana, una sombra del equipo que el día anterior había logrado batir al Real madrid. 20 puntos entre los dos últimos cuartos para los de Bartzokas y el electrónico reflejando un tremendo 79-59 en favor del conjunto de Luis Casimiro que les confirmaba como vencedores de la supercopa ACB.
El Herbalife Gran Canaria lograba así hacerse con el primer título de la historia de la entidad a la par que rompía una racha de más de 6 años en la que tanto Barça Lassa como Real Madrid Baloncesto ganaban título tras título ACB.
El mejor del Barça Lassa sería Víctor Claver, con 12 puntos y 7 rebotes, y una valoración total de 18. Por parte del Herbalife, Bo McCalebb (15 puntos, 5 rebotes y 5 asistencias), y Eulis Báez (11 puntos, 6 rebotes y 3 asistencias) serían ambos los mejores jugadores de su equipo con una valoración total de 18.
