La cultura del esfuerzo, el mejor aprendizaje para Avery Bradley
Dos emblemas marcaron el camino del escolta
En vísperas del anunciado retiro del gran Kevin Garnett , sumado al anuncio de Paul Pierce (esta será su última temporada en la NBA) el hoy capitán de los Boston Celtcis, Avery Bradley, no ha sido tímido a la hora de repartir elogios y recordar los aprendizajes impartidos por el numero 5 y 34 respectivamente.
Pareciera ayer cuando Avery Bradley era considerado el perro de presa de ese súper equipo en el cual Garnett era el líder espiritual y Pierce el arma letal. De ese tiempo a esta parte, mucha agua ha pasado bajo el puente. Y quien hasta ese momento era el joven que aportaba energía, hoy es el capitán y quien marca (a ritmo de asfixiante defensa) el rumbo de los Celtics.
El numero 0 escribió unas líneas para agradecer y marcar quien era Garnett como compañero.
«Kevin es una maravillosa persona. Es un ser humano espectacular, a pesar de que no muchos pueden dar nota de ello. Me siento afortunado de haber sido su compañero, y aprender de él tanto dentro como fuera de la cancha«.
Nadie discute a The Big Ticket como jugador ni líder. Es, en buena parte, que Boston recuperó esa cultura que tan impregnada está en cada rincón de la ciudad. El liderazgo a base de esfuerzo, era uno de esos intangibles fundamentales que todo equipo contendiente al título debe tener. Y si uno se pone como observador puntilloso, notará que buena parte de ese liderazgo y corazón, hoy afloran en el día a día del escolta.
Cuando el lunes 26 de Septiembre, Paul Pierce anunciaba que esta campaña sería la última, muchos medios se hicieron eco de la noticia. Y el propio escolta de Tacoma, ahondó profundo en el asunto.
«Aprecio todo lo que dio. Yo como joven compartiendo cancha con él, fui capaz de profundizar en cómo ser un profesional» y continuó diciendo «Entender cuán importante es apreciar cada momento en el rectángulo de juego».
Quien también se desenvolvió en elogios para The Truth fue Danny Ainge. El GM declaró:
«A pesar de los tiros milagrosos, y de todas las grandes jugadas, lo que más destaca de Paul es simplemente verlo. Estar en tu despacho y observar que es media noche, y que él se encuentra solo ahí, trabajando en su juego, intentando mejorar día a día»
Otro gran ejemplo de qué tipo de competidor es quien fuera MVP de las finales del 2008. Con talento no alcanza, y es el esfuerzo y sacrificio los que te hacen destacar y pasar de ser un gran jugador, a toda una leyenda.
Todos estos recuerdos, se suman a una máxima que Avery Bradley aprendió el primer día que tuvo contacto con Garnett y Pierce. Para ser el mejor, debes ser el primero en llegar al gimnasio, y el último en irte. Como joven novato lo asimiló, y como experimentado capitán, lo aplica día a día.