Draymond Green: «No nos importa ser los villanos»
el jugador de los warriors habla sin tapujos

Muy lejos han quedado esos días del año 2013 en los que Golden State era aplaudido por su garra y esfuerzo tras eliminar en los playoffs a toda una entidad como Denver Nuggets, siendo los sextos clasificados con un tal Stephen Curry que empezaba a florecer y con Jarrett Jack como escudero. Muy atrás han quedado esos días en los que los Warriors eran uno de los equipos ‘más majos’ de la NBA, ya que cuando empiezas a ganar y te manifiestas en contra del régimen real, todos los ciudadanos de a pie se ponen en tu contra. Esto ha ido pasando a lo largo de los años, o estás de un lado o de otro; aunque aplaudimos a aquellos que se mantienen leales a sus respectivos feudos. Estás a favor o estás en contra de la corona.
Golden State se convirtió en un equipo muy odiado por el mero hecho de derrotar a LeBron James, pero ahora, tras el movimiento impopular de Kevin Durant, esa rabia irá en aumento y es algo que todo el mundo sabe. Draymond Green compareció ante la prensa durante el segundo día de training camp y fue preguntado sobre esta circunstancia, que los coloca como nuevos villanos de la NBA.
«Creo que a nadie le importa en qué nos quieran convertir, vamos a tratar de ganar partidos. No me importa que quieran que hagamos el papel de villanos, nos van a abuchear de todos modos en cualquier ciudad a la que vayamos. Lo más divertido que me ha pasado es ser abucheado en una pista rival y poder callar a todos los aficionados; así que no me importa, que sigan abucheando porque no tardaremos en cerrarles la boca y me reiré mucho cuando suceda, todos nos reiremos y seguiremos jugando».
Draymond Green manifestó un gran malestar tras ser abucheado junto a sus compañeros Kevin Durant y Klay Thompson durante uno de los partidos amistosos de preparación de los Juegos Olímpicos del Team USA en el Staples Center de Los Ángeles.
«Es como Jesucristo, simplemente, no entiendo a algunas personas. Incluso si te odio en cualquier equipo en el que juegues, si sales ahí fuera con la camiseta de Estados Unidos y estás representando a mi país me aguantaría y diría ‘bueno, al menos por esta vez no voy a odiarle.’ y aún así no seguían abucheando. No sé qué le pasa a la gente, se ve que no están contentos con su vida».