Phil Jackson pide paciencia con los nuevos Knicks
El presidente de los neoyorquinos está tranquilo
Una nueva temporada NBA ha dado comienzo, y con ella llegó la primera derrota de los New York Knicks en Ohio, suelo de los actuales campeones, los Cleveland Cavaliers. Sin duda fue un duro partido para la «opening night», pero los Knicks aspiran esta temporada a plantar cara en casi cualquier cancha de la NBA. Con los refuerzos que firmaron el pasado verano, los aficionados esperan mejoras inmediatas en el equipo, algo que no acaba de producirse. Ante estas dudas, Phil Jackson quiso tranquilizar a la parroquia de Nueva York.
Para el «Maestro Zen», el equipo debe tener paciencia y practicar más las jugadas del triángulo. Si por algo se caracteriza la Gran Manzana, la prensa de allí, sus aficionados y dirigentes, es por la escasa paciencia en los proyectos de los Knicks, algo en lo que Jackson no quiere caer. El equipo tiene mucho margen de mejora, y es algo que quiso destacar la estrella del equipo, un Carmelo Anthony que avisó que piezas como Derrick Rose o Joakim Noah aún deben encontrar su sitio en el entramado de los de NY. Jeff Hornacek debe seguir sacándole cosas al equipo y a los jugadores nuevos, y otros como Courtney Lee deben aportar más en facetas algo olvidadas en los Knicks: la defensa y el triple.
Los Knicks llevan desde la llegada de Phil Jackson predicando con el sistema del triángulo como método para alcanzar el éxito. El equipo, sin embargo, sigue sin asimilar muchos conceptos del sistema, algo que para Phil Jackson es mejorable «con más trabajo». Como dato, decir que en el primer partido ante los Cavs, el equipo finalizó con 18 pérdidas de balón y 17 asistencias, unos datos que deben mejorar sí o sí. El entrenador también quiso destacar que el rival que tenían enfrente quizás no era el mejor para medir la capacidad de un conjunto en formación y crecimiento. De todos modos, lo que desde el Madison se destaca es que el equipo debe reaccionar a la derrota y comenzar a sumar desde ya para no comenzar a sembrar la duda una temporada más.