¿En qué se inspira la nueva camiseta «Run TMC» de los Warriors?
Los Warriors estrenaron ayer su camiseta "Run TMC"
Ayer jugamos con la camiseta en honor al RUN TMC hoy os traeremos un artículo explicando la historia de ese equipo y esa camiseta! pic.twitter.com/TwoWNXTvcm
— RUN&DUB (@SomosRunandDub) October 31, 2016
En la noche de ayer, los Golden State Warriors estrenaron su nueva camiseta con victoria ante los Suns. Esta camiseta alternativa está inspirada en los ‘Run TMC’, pero ¿quiénes son los «Run TMC»?
Los ‘Run TMC’ fueron un equipo del 1989 al 1991, que tenía como principal estandarte a sus tres jugadores exteriores. Tim Hardaway desde el puesto de base, Mitch Richmond como escolta y Chris Mullin de alero. Una vez que conocemos esto, ya sabemos de dónde viene una parte del nombre, y es que ‘TMC’ hace referencia a la primera letra del nombre de cada componente de este mítico trío. Para descifrar el sentido de la primera parte, no hace falta ser demasiado avispado. El juego de estos Warriors era muy alegre, basado en las transiciones rápidas y lo que conocemos como ‘Run and Gun‘. Un estilo de juego por y para el disfrute del aficionado, muy semejante al que desarrollan los Warriors de ahora. Este trío fue el más anotador de la temporada 1990/91, promediando 72.5 puntos por noche (25.8 de Mullin, 23.9 de Richmond y 22.9 de Hardaway).
Pese al caché de estos tres nombres, los ‘Run TMC’ no consiguieron grandes cosas. Los tres jugadores se encontraban en el comienzo de sus carreras, ya que habían llegado a la bahía mediante elección del draft, y tras dos años de rodaje, el trío fue disuelto. En 1992, Richmond fue traspasado a los Kings junto a Les Jepsen a cambio del escolta Billy Owens. Richmond años más tarde sería una leyenda en la franquicia de la capital de California.
Tras la marcha del escolta; Hardaway y Mullin coincidieron con otros grandes jugadores como Sprewell o el ‘Rookie del Año’ Webber, con quienes lograron entrar en Playoffs, aunque sin grandes éxitos.
En el recuerdo siempre tendremos a este equipo, pero siempre nos quedará una duda, ¿qué habría pasado si Don Nelson no hubiera traspasado a Richmond?
