Especial Navideño: Lo esperado Conferencia Este
Muchas franquicias cumplen con sus propósitos hasta la fecha
En la Conferencia Este no ha habido mucha sorpresa ni mucho susto, la gran mayoría de las franquicias cumplen con lo que se esperaba de ellas; ya sea para bien o para mal. Así pues, encontramos a los Cavaliers, Raptors y Celtics que copan las primera posiciones de la Conferencia, siguiendo con los pronósticos de principio de campaña. Luego están los Heat, Nets y Sixers que cierran la clasificación de la Conferencia; mientras que un poco en tierra de nadie y luchando por la postemporada encontramos a Bulls y Hawks.
Cleveland Cavaliers
Los actuales campeones están sufriendo un poco más de lo esperado este año, pero siguen en la cabeza del Este. Sin un base suplente sólido y con varias bajas en lo que hemos visto esta temporada, han tenido que usar una rotación mucho más corta. Tras un verano en el que perdieron a dos jugadores como Mo Williams y Matthew Dellavedova, sólo consiguieron traer a Kay Felder vía Draft y no se le ha dado la confianza que necesita. Estamos viendo minutos de Shumpert incluso de base, pero la lesión de J.R. Smith puede hundir aún más la rotación. Llegó Mike Dunleavy, pero está pasando bastante desapercibido. Al final, los Cavs prácticamente tienen que darse con un canto en los dientes por la no retirada de Richard Jefferson. El alero podría haber dilapidado totalmente la rotación del equipo; por no hablar del culebrón de J.R. Smith y su renovación, que pudo haber dejado un poco huérfano a este equipo.
Una de las cosas que está condenando al equipo son los puntos tras pérdida. Están en la cola de la liga en ambos casos. En los del rival, son el segundo equipo que más concede, mientras que ofensivamente son el 24º de la liga. Aún así, siguen dominando desde el triple, siendo el segundo equipo que tiene más porcentaje de tiros lanzados, así como el segundo equipo con mejor porcentaje de tiros anotados desde el triple.
Sin embargo, tienen a LeBron James. Está firmando una enésima temporada a medio gas (pese a jugar más minutos que nunca). El mejor jugador del mundo está firmando el mejor promedio asistente de su carrera. Además, se le está sumando el enorme nivel de Kevin Love, el mejor desde que llegó a la ciudad de Cleveland. El Big Three al completo está, en general, llevando el motor del equipo. Realmente, se esperaba que los Cavs estuvieran ahí arriba del todo, por supuesto. Con «peros» pero están cumpliendo sus expectativas. Sacando los partidos con categoría, con la autoridad del que quiere y puede ganar. Aún así, hemos visto alguna cara algo mala de estos Cleveland Cavaliers que, como decíamos, están sufriendo en algunos partidos. También condicionado, por supuesto, por el crecimiento del Este con muy buenos equipos. El tema está en que este equipo nos lo conocemos y hay que ver qué equipo serán realmente cuando llegue la hora de la verdad.
Mientras, el equipo busca algunas soluciones. Sabemos de sobra que buscan algún traspaso por un base suplente, pero es cierto que no tienen demasiado que ofrecer. ¿Agencia libre? Mario Chalmers y Norris Cole (dos ex conocidos de LeBron) están libres, pero con comillas. Chalmers a la espera de recuperarse de la lesión y Cole en China (acaba la liga en febrero). Veremos si los campeones consiguen reajustar la rotación para competir especialmente en los Playoffs, pues ya sabemos que en la temporada regular van sobrados. Seguramente, los tres componentes del «Big Three» formen parte del All-Star este año, aunque hay más dudas de cara al «All-NBA» con Kyrie Irving y Kevin Love.
Toronto Raptors
Los Toronto Raptors tuvieron un verano muy importante y lo solventaron bien. Tenían que renovar a DeMar DeRozan y, pese a todos los rumores que lo apuntaban fuera de Toronto, se consiguió hacerlo. Es cierto que no pudieron renovar a Bismack Biyombo, pieza fundamental en los últimos Raptors, especialmente en los Playoffs. Sin embargo, Ujiri sacó el conejo de la chistera para sacar a dos interiores en el Draft que no han desentonado nada: Jakob Poeltl y Paskal Siakam. Especialmente este último está jugando realmente bien. Además, consiguieron una firma importante: Jared Sullinger. Pero este último trajo una lesión consigo y no ha podido siquiera debutar, algo que el equipo ha notado.
Sin embargo, este equipo sí que está cumpliendo como siempre las expectativas. Llevan años ya cumpliendo con creces durante la temporada regular. Este año están siendo el mejor ataque de la liga… y casi de la historia. Y eso, sin dos armas importantes como DeMarre Carroll y el ya mencionado Jared Sullinger. Con un DeMar DeRozan estelar, un Kyle Lowry muy regular, la anotación del lituano Valanciunas y el crecimiento de varias piezas del banco… Este equipo de cada año parece más preparado para competir realmente la conferencia contra los Cleveland Cavaliers. Además, el año pasado ya consiguieron ganarles dos partidos sin Jonas Valanciunas y DeMarre Carroll. ¿Qué pasaría si estos canadienses consiguen engrasar todas sus piezas? Poco a poco, Cory Joseph empieza a subir su nivel, Norman Powell sigue rompiéndola desde el banco… Son uno de los equipos más profundos de la liga y ya no estamos viendo al backcourt titular yéndose a tropecientos minutos por partido.
Están siendo de nuevo el primero de los mortales este año, siendo un equipo bastante efectivo también lejos de su feudo. Tienen un rating ofensivo superlativo, el mejor de toda la liga. Sin embargo, es cierto que la defensa ha bajado un poquito respecto a otros años. Ahí es donde sobre todo podría aportar mucho DeMarre Carroll si consigue volver a su mejor nivel. Una de las bazas del equipo es también el cuidado del balón, pues están siendo muy asiduos a estar arriba en la clasificación en cuanto a asistencias y en balones perdidos. Además, lideran la liga en puntos tras pérdida (19.5) Uno de los problemas del equipo está siendo el rebote defensivo, algo en lo que también podría aportar mucho el lesionado Jared Sullinger. De hecho, parece que si los canadienses consiguen recuperar a esos dos jugadores al 100%, pueden ser un equipo muy a tener en cuenta.
Quizá los Toronto Raptors puedan buscar algún trade que les dé un plus de cara a los Playoffs. Tienen muchas piezas interesantes que pueden ser fáciles de mover, tienen picks, y quieren intentar competir. Incluso Terrence Ross está rindiendo muy bien y su contrato, con lo que estamos viendo ahora, no queda nada desorbitado. Un pack con él y Patrick Patterson o similar podría ser jugoso para conseguir alguna pieza fuerte que apuntale este equipo y le dé el salto definitivo. Individualmente parece que tan solo DeMar DeRozan aspira a ser nombrado en cualquier tipo de distinción.
Boston Celtics
Los Boston Celtics han sido uno de los focos más importantes en cuanto a movimientos durante el verano. Partiendo desde la noche del Draft y días previos, el pick 3 parecía encima de la mesa para negociar, así como varios jugadores. Sin embargo, acabaron la noche sin traspaso alguno y llevándose a Jaylen Brown para Boston. En la Agencia Libre, estuvieron a punto de dar el pelotazo con Kevin Durant, pero al final tan solo llegó Al Horford. El resto, una apuesta muy continuista. Los C’s mantienen el bloque y siguen teniendo montón de picks para negociar. El equipo sigue en una línea ascendente y, de hecho, es muy difícil su catalogación.
Los Boston Celtics, aspiraban a militar entre el tercer y cuarto puesto de la conferencia y están más o menos en ello. Sin embargo… ¿Qué habría pasado con ellos de no haber tenido tantas lesiones? Seguramente, los Boston Celtics estarían algún puesto más arriba y poder estar hablando de ellos como una sorpresa en lugar de algo esperado. De hecho, de haber seguido con las lesiones un poco más, podríamos hablar de ellos como una decepción. Al son de Marcus Smart e Isaiah Thomas, hay que disfrutar de unos Celtics que van a más.
Una vez con (casi) todos al 100%, los Boston Celtics han empezado a carburar. Desde la vuelta de Al Horford, el equipo ha ido mejorando en el rebote. Sin él (ni Olynyk) los de New England estuvieron en la cola de la liga y poco a poco están subiendo escalafones. Siguen liderando la liga en una de las estadísticas que indican cuando un equipo es intenso, que son las recuperaciones de balones sueltos. Los Celtics se han caracterizado por ser un equipo de mucho hustle y eso es lo que enamora de este equipo. Además, siguen con un envidiable sistema ofensivo que permite un movimiento de balón muy fluido, con muchas asistencias. Mejores o peores, con muchas o menos bajas, estos salen a morder. Han tenido incluso mala suerte con la vuelta de Olynyk, que se le ve muy fuera de ritmo. Por no hablar de un Amir Johnson que está siendo una lacra total para el equipo.
Cuesta encontrar un equipo que se vea sus problemas tan obviamente, y con capacidad relativamente fácil para solucionarlo con traspasos. ¿Es lo que quiere Danny Ainge? Ahí es donde entra el problema. Los Boston Celtics pueden estar mirando más allá y estén dispuestos a no traspasar según qué y seguir mirando hacia el futuro. Posiblemente, veamos a Isaiah Thomas en el All-Star este año, e incluso podría llegar a ir Al Horford. Boston necesita aclarar lo que quiere (si Ainge no lo sabe ya), e ir a muerte con ello. Con Crowder, Thomas, Smart, Horford, etc sanos todos juntos, podríamos verles dar mucha guerra en los Playoffs.
Miami Heat
Los Miami Heat han tenido uno de los veranos más difíciles de la liga. La firma de Hassan Whiteside muy pronto en la Agencia Libre acabó dejando fuera del equipo a un Dwyane Wade que esperaba conseguir el dinero que ha estado perdonando hasta ahora. Después, la espera sobre Chris Bosh. Se encaraba la offseason con esta duda y, al final, CB1 no vuelve de momento a las canchas. Es desolador lo que afecta eso a una plantilla que tiene muchos millones en un jugador que no puede jugar por problemas de salud. A partir de ahí, encima se le complican más las cosas. Tyler Johnson firmó un contratazo con los Brooklyn Nets, y tuvieron que igualarlo para que no se marchara. Con eso, los Heat jugaban sus bazas con muy poco espacio salarial. Se firmaron a varios jugadores como Derrick Williams, James Johnson o Dion Waiters. Las esperanzas eran mínimas, sabiendo ya acerca de la lesión de Chris Bosh.
Sin embargo, esas pocas esperanzas se van al garete cuando, durante este inicio de temporada, se han perdido varios partidos muchos jugadores importantes. Winslow, Richardson, Dragic, Ellington, Waiters, Whiteside… Muchas lesiones devastadoras les han dejado ahí donde están.
El único faro de esperanza que les queda es un Eric Spoelstra que sigue sacando petróleo con lo que tiene. El bueno de Spoelstra ha transformado al equipo en una de las mejores defensas de la liga, especialmente cerca del aro. Además, siguen siendo un buen equipo reboteador pese a tener que jugar muchas veces con small ball. Ha conseguido sacar un gran rendimiento de jugadores como Willie Reed o Rodney McGruder, y les están salvando los muebles. Parece que todo lo sacan de la pintura, siendo -cómo no- uno de los equipos que más lanza y que más puntos anota desde la zona. También hay que destacar el excelente inicio de Goran Dragic al mando del equipo, pues hay que saber dirigir muy bien el ataque para sacar puntos como los sacan estos Heat.
Lo que va contra ellos es la gran evolución de los equipos en el Este, que está siendo mucho más competitivo y les está hundiendo poco a poco hacia abajo; solo por encima de Brooklyn y Philadelphia. Individualmente, tan solo podemos esperar algo muy bueno de Hassan Whiteside, que está teniendo muy buenos números en un equipo muy falto de ellos. Es una lástima pero parece que el equipo está abocado a ir para abajo y mirando hacia una nueva temporada en la que puedan sacar algo más y, quizá, hayan podido resolver el problema de Chris Bosh. No tiene pinta de que puedan competir por los Playoffs, y menos aún con medio equipo en la enfermería.
Brooklyn Nets
Los Brooklyn Nets confirman la posición esperada… Pero realmente, es uno de los equipos que más están sorprendiendo en la NBA por su juego. Su verano ha tenido sus cosas. Hicieron un traspaso llevando a Thad Young a Indiana, en el que quizá pudieron sacar algo más. Firmaron a Jeremy Lin, que fue una de las sorpresas este verano. Un jugador que mostró su mejor versión en Nueva York y que el año pasado volvió a acercarse a su nivel volvía a la ciudad. También acertaron de pleno con el fichaje de Trevor Booker desde Utah. A Kenny Atkinson hay que darle tiempo, pero con lo que tiene ha diseñado una de las ofensivas más divertidas de ver en la liga.
También se firmó a veteranos como Luis Scola o Greivis Vásquez (este último jugó muy poco y fue cortado por recaer en su lesión y tener que operarse). Sin embargo, sí hicieron otros pelotazos en la Agencia Libre en lo que les salió el tiro por la culata. Consiguieron firmar a dos agentes restringidos sendos contratazos pero sus equipos de origen les igualaron y les dejaron sin ambos ya muy entrados en la Agencia Libre. Hablamos de Tyler Johnson y Allen Crabbe. A ellos hay que sumarles a Donatas Motiejunas en este último mes. Entonces del posible Tyler Johnson-Allen Crabbe se pasó a Randy Foye y un Greivis que ha acabado transformándose en Spencer Dinwiddie. Vaya movida.
Como decíamos, el récord está siendo algo acorde a lo esperado. Empezaron muy fuerte, sin embargo. Estaban jugando realmente bien y ganando partidos, dominando desde el triple. Poco a poco el acierto se ha diluido y con ese acierto han perdido también ese ritmo ganador. Estaban cerca del 50% tras los primeros diez partidos y, a partir de ahí, para abajo. También les han afectado algunas lesiones, como la de Jeremy Lin, Isaiah Whitehead, etc.
Es el 5º equipo de la liga en rebote defensivo (35.0), que lo necesitan para correr en las transiciones. De ahí están sacando muchos triples en transición, y son ya el tercer equipo que más triples lanza en la NBA. Aún así, su rating ofensivo indica lo pobre que está siendo y es ahí donde se nota que compensan con muchos triples su poco nivel ofensivo. Su estilo recuerda a veces al de San Antonio, yendo dentro-fuera. Es el equipo con más posesiones por partido de la liga debido a su rápido ataque y eso desgasta mucho a las defensas. Hay que decir que Sean Kilpatrick es un poco la antítesis del sistema pero está jugando a un nivel muy alto.
Sin embargo, como decíamos, siguen en la cola de la liga en cuanto a victorias y seguirán sin obtener beneficio con ello. Ya se está hablando de que Brook Lopez podría estar en el trade block y seguramente, los Nets buscarían rondas interesantes de cara al futuro que es lo que más deben apuntalar, pues el presente es casi imposible mejorarlo. Individualmente es un equipo que no tiene pinta a tener ningún destacado ni en el All-Star ni a final de temporada.
Philadelphia 76ers
Los Philadelphia 76ers encaraban un verano ilusionante. Por primera vez iban a poder contar con Joel Embiid, el prospect que tanto llevábamos esperando tras la fractura de pie hace ya más de dos años. Además, tenían el pick 1 (Ben Simmons) y llamaban a Dario Saric a la ciudad. Se empezaba a cocer algo. Pese a todo, está claro que los Sixers no podían ponerse a competir así como así. Los seguíamos esperando justo donde están: el peor equipo de la liga. Este verano además de lo ya mencionado, firmaron básicamente a Jerryd Bayless, Sergio Rodríguez y Gerald Henderson. Pese a tener importantes intentos en otros Agentes Libres (como Manu Ginóbili), se quedaron así hasta el traspaso que dejaba a Jerami Grant en OKC a cambio de Ersan Ilyasova. En fin, seguimos esperando la misma clasificación pero con una mejoría evidente y esto es lo que poco a poco están consiguiendo.
La lesión de Ben Simmons nos ha privado de poder ver qué mejoría real pueden alcanzar estos Philadelphia 76ers. Aún así, está siendo muy evidente. Hemos visto cómo el equipo está compitiendo mucho los partidos, Brett Brown hace un gran trabajo con estos jóvenes. Joel Embiid lidera sobradamente la carrera por el Rookie del año junto a un Dario Saric, que está siendo capaz de abrir espacios con su tiro exterior. En el mismo papel, Ersan Ilyasova está rindiendo más que decentemente y esto no hace más que confirmar que este equipo puede jugar mejor de lo que hacían con Noel y Okafor. Está claro que tampoco hay que tirar cohetes. El puesto de escolta y el de alero siguen siendo una lacra y el equipo marcha como el peor rating ofensivo de la liga. Es la defensa lo que les está permitiendo ser competitivos. Especialmente la defensa en la zona, pues es el peor equipo de la liga permitiendo puntos en contraataques y son el cuarto equipo con más tapones (5,7).
Para su evolución, hay que tener en cuenta dos factores. ¿Volverá Ben Simmons esta temporada? ¿Harán algún traspaso? Nerlens Noel parece estar en el trade block pero los Sixers no acaban de darle una salida, y dejarle sin jugar está haciendo bajar su trade value. ¿Será Jahlil Okafor el traspasado? No apunta a eso, pero nunca se puede descartar en esta liga. Parece que pueden incluso adelantar a los Nets (y a alguno del Oeste) para no ser el peor equipo de la liga. Todo eso sin poder contar con el número uno del Draft, con posibilidades de tener dos rondas TOP10 el año que viene y espacio salarial para mejorar desde la Agencia Libre. Ya sabéis, Trust The Process. Están llegando, silenciosamente. Les quedan un par de pasos y evolución de sus jóvenes para dar el pelotazo y estar codeándose con la mayoría de equipos de la liga.
Chicago Bulls
Los Chicago Bulls han sido uno de los equipos con más movimiento en el último año. Si bien es cierto que a Gar Forman se le ha tachado (merecidamente) de inmovilista, este año se ha quitado este cartel. Antes del Draft, traspasaron a Derrick Rose y Justin Holiday a cambio de Jerian Grant y Robin Lopez (y José Calderón, traspasado in situ por segundas rondas). Seleccionaron a Denzel Valentine, que parece que puede ser un jugador listo para aportar. Luego, llegó una Agencia Libre muy importante en la que se hicieron con piezas de la talla de Dwyane Wade o Rajon Rondo. Remataron el banquillo firmando a Isaiah Canaan y traspasando a Tony Snell a cambio de Michael Carter-Williams.
Realmente, uno no sabía qué esperar de estos Chicago Bulls. Había tantas incógnitas que no había por donde cogerlo. Sin embargo, sí que podíamos esperar que compitan por los Playoffs y en eso están. Además, han tenido lesiones que han perjudicado mucho al banquillo y aún así se la han arreglado para ganar. Tienen una increíble capacidad de ganar a cualquiera… Y perder contra cualquiera. Además, están sufriendo mucho en los back-to-back, que no han ganado ni uno en lo que va de temporada. Como era de esperar, los Bulls son el equipo con peor tiro exterior de la liga. En todos los aspectos, además: en intentos, en anotados, en porcentaje… Sin embargo, su pintura, especialmente en la primera unidad, está dominando. Taj Gibson y Robin Lopez están limpiando los tableros y protegiendo la zona a la perfección. El caso es que con Nikola Mirotic y Cristiano Felicio no están encontrando ese equilibrio entre unidades, y el equipo podría estar buscando un traspaso. Tanto por el problema en el rebote y defensa interior como el problema en el tiro exterior.
Doug McDermott también ha tenido muchas lesiones que han privado de tener un banquillo eficiente. Michael Carter-Williams tampoco ha podido entrar en el equipo, y puede que ambos sean el subidón que necesitan estos Chicago Bulls. También están presentando números muy pobres en todas las estadísticas avanzadas en asistencias; y es que están sobreviviendo gracias a los tiros libres. Están en la parte alta de la liga en los apartados en tiros libres. Algo que no acaba de compensarles pues son el segundo equipo con más faltas por partido de la liga.
Los Chicago Bulls necesitan seguir mejorando y recuperando jugadores. Si consiguen mantener una regularidad que no están consiguiendo, puede que a final de temporada estemos hablando de ellos como un equipo revelación. Parece claro que Jimmy Butler y Dwyane Wade pueden estar más que de sobra en el All-Star e incluso en los mejores quintetos de la temporada. El primero especialmente, está jugando a un nivel desorbitado, tirando del carro en los momentos más difíciles. Lo mejor es que el equipo ha formado un buen grupo con mucha química. El nivel mostrado puede ser un punto de partida en el que Fred Hoiberg tiene que acabar de perfeccionar las piezas. Unas piezas que, de nuevo, vuelven a parecer una antítesis al juego que él quiere practicar.
Atlanta Hawks
Los Atlanta Hawks han sido un equipo de muchos ups and downs esta temporada. Si bien empezaron de una manera espectacular la temporada, han tenido después rachas malísimas. Tras un verano en el que se tuvieron que enfrentar a varias decisiones difíciles, consiguieron mantener un equipo competente para esta Conferencia Este. El problema es, que quizá no todos estén rindiendo como se esperaba. En verano perdieron a Al Horford pero firmaron a Dwight Howard, que volvía a Atlanta, su casa. Con Jarrett Jack se dieron un tiro en el pie, pero consiguieron renovar a Kent Bazemore y Kris Humphires. El traspaso de Jeff Teague les dejó con Taurean Prince en el Draft.
Dennis Schröder funcionó a la perfección de base suplente pero no está acabando de rendir desde su salto a la titularidad. Si bien es cierto que el banquillo está rindiendo bastante bien, no encuentran la regularidad hombres como Kent Bazemore, que el año pasado se consagró de una manera tremenda tras la marcha de DeMarre Carroll. Además, pese a tener una de las mejores pinturas de la liga, el equipo no destaca en protección de la misma, en intimidación o en rebote. Siguen destacando, eso sí, en las asistencias. ¿El problema? También están muy arriba en pérdidas de balón. Es el tercer equipo con más pérdidas, solo por detrás de Philadelphia y Brooklyn. El movimiento de balón es la clave en el sistema de Budenholzer y el no hacerlo les ha perjudicado mucho en sus derrotas. Quizá Dwight Howard, aún jugando bien, rompe con lo que los Hawks tenían «montado» con un Al Horford que es de los mejores pasadores interiores de la liga, además de tener un enorme tiro exterior. El spacing se está rompiendo. De ahí a que estén prácticamente en la cola de la liga en el rating ofensivo. Además, el rendimiento que está ofreciendo Kyle Korver está siendo muy malo. Ha sido muy duro para los Atlanta Hawks esta caída en picado.
Budenholzer es un entrenador genial, pero tiene que solucionar el sistema para adaptarlo a la llegada de nuevos jugadores. Además, pese a ciertas deficiencias, el tiro exterior que tenía Jeff Teague y no Dennis Schröder cierra espacios. Una de las claves de la mejoría total del equipo es lo que comentábamos de las pérdidas. Están encajando muchos puntos tras ellas y aún así están sobre la media en cuanto al rating defensivo. Su objetivo deben ser los Playoffs, pero ya no se parecen a aquellos Hawks de 60 victorias que puedan hacer cosas importantes en el Este. Hay que darles tiempo para ver si acaban de cumplir con sus expectativas. Individualmente, tampoco hay tantas opciones de tener presencia en el All-Star con las competencias que hay en el Este; si uno se mete será Paul Millsap.