Toney Douglas firma con Memphis Grizzlies
Memphis es el octavo destino del base en ocho años
Nueva York, Houston, Sacramento, Oakland, Miami, Nueva Orleans y Memphis. China también figura en su itinerario, pero el lapso fue tan corto que pueden considerarse vacaciones de empresa. Es la experiencia y no la calidad el motivo por el que Toney Douglas, nacido en Georgia, haya desembarcado en Tennessee. Maletas en el puerto y botas preparadas, el base de 30 años espera cumplir las expectativas en el corto plazo de 10 días firmado con la franquicia para reforzar el juego exterior del equipo. Ya pasó en diciembre por los vestuarios, pero solo le dio tiempo a saludar y hacer algún amigo.
Es la defensa, junto a su capacidad desde el triple, una de las señas de identidad de este jugador. El perfil se ajusta a lo que necesita el equipo de David Fizdale, personaje ya conocido en la historia del viajero años atrás. Fue en su etapa con los Heat de Spoelstra. Por aquel entonces, sus números mostraron una actividad muy baja, reflejo de las pocas oportunidades que le brindó el técnico de Miami. 4,2 puntos y 1,8 asistencias en 15 minutos y 27 partidos al equipaje.
Para algunos, es el jugador errante que no ha podido triunfar en ocho años de carrera; para otros es el jugador infravalorado que no ha logrado encajar en ningún vestuario sus singulares habilidades. En cualquier caso, Douglas escapa a cualquier definición precipitada. Memphis Grizzlies cuenta con un nuevo entrenador en el cuadro técnico.
Fizdale es el tercero de todos los que han pasado por el banquillo de Memphis en preferir un suplente veterano para cubrir a Mike Conley. El único, en un primer vistazo, que tuvo opciones viables fue Dave Joerger, quien dispuso de Beno Udrih y Mario Chalmers, dos jugadores con grandes capacidades. Pero el base titular sufre actualmente dolores en la espalda y la rodilla y Douglas parece la mejor opción posible aunque, hasta que no pasen los 10 días de prueba, el jugador no cancelará el billete de vuelta a la bolsa de agentes libres.
Su compleja travesía puede contarse en minutos. 24,3 en 2010 y 20,7 en 2015, en New York Knicks y New Orleans Pelicans respectivamente, para ser exactos, campañas en las que logró sus mejores porcentajes de anotación. En el resto de temporadas la media no superó la veintena. Si algo puede añadirse a este currículum es valor y perseverancia. El turismo y el chino aún no cuentan como intangibles en la liga más exigente del mundo. Con una estatura de 1,85 y sin capacidades destacables como atleta, el camino solo puede considerar los baches.
Lo sabe Toney Douglas, que es quien llega; y lo sabe Troy Williams, que es quien se marcha. El fichaje del jugador se produce tras el despido del alero procedente de Virginia. La espectacular pretemporada le permitió acabar completando la plantilla de 15 jugadores de los Grizzlies, pero la recuperación de Chandler Parsons obligó al roster a prescindir de él. En sus 24 partidos en Memphis (13 como titular), Williams promedió 5,3 puntos y 1,6 rebotes, pero desde el 21 de diciembre no disputó ningún encuentro con sus compañeros.
El contrato de otro hombre con experiencia en el plantel de Memphis permite añadir visión y profundidad a la unidad de suplentes de los Grizzlies. Los novatos Andrew Harrison y Wade Baldwin son los principales reservas de Mike Conley, pero aún no han demostrado poder encargarse de ese cometido. Baldwin ha vuelto a las filas de los Iowa Energy tras promediar en 13 minutos por partido 3,5 puntos y 2,1 asistencias; mientras que Harrison, que aún dispone de minutos, tendrá que mejorar sus porcentajes de tiro si quiere disfrutar de la confianza de Fizdale.
En los seis partidos que Toney Douglas jugó esta temporada promedió 5,8 puntos y 2,7 asistencias por encuentro. Ahora buscará asentarse en el que es ya su octavo equipo NBA de su convulsa carrera como jugador, suplente, experto en viajes e idiomas, entre ellos el chino y, ahora, veterano.