El futuro de J.J. Redick, ¿en entredicho?

J.J. Redick es uno de esos jugadores alejado de los flashes y que no suele destacar, pero que desde que llegó a Los Ángeles promedia al menos 15 puntos sin ser ni la primera, ni la segunda ni incluso la tercera referencia ofensiva. Uno de esos retoques que hacen que una plantilla estándar NBA, con uno o dos jugadores franquicia, dé un salto de calidad. Un especialista que no pide mucho a cambio; ni a nivel deportivo (28,2 minutos) ni a nivel económico (7,3 millones ha costado su último y más caro año de contrato).

La temporada pasada fue el triplista más eficiente de toda la liga con un 47,5% de lanzamientos convertidos y ésta lo ha seguido siendo en su equipo (42,9%). Su inteligencia en la pista le hace ser un sólido defensor, cumpliendo con creces el rol de 3+D, el cual todo equipo de baloncesto moderno necesita y que tan bien complementa a los bases que amasan mucho el balón como James Harden o Russell Westbrook. Con la eficiencia como bandera, tirando de 2 se acerca al 48% y en la línea de tiros libres promedia un 88%, habiendo superado 6 temporadas el 90%.

Junto a Jamal Crawford forma desde 2013 una de las parejas de escoltas más completas y compensadas de la liga. Todo el carisma y vistosidad que le falta a J.J. lo tiene JCrossover y entre ambos promedian más de 30 puntos por partido, siendo uno el titular y el otro su suplente. Pocos equipos pueden disfrutar de dos jugadores para una misma posición que podrían ser perfectamente titulares en otros conjuntos, y menos tanto tiempo.

Todo indicaba que el verano de 2016 el idilio terminaría con la finalización del contrato de Crawford, que ya había cumplido 36 años, pero entonces los Clippers realizaron un movimiento sorprendente. El genio de Seattle pero al fin y al cabo suplente fue renovado a razón de 42 millones por los próximos 3 años. No se puede obviar la inflación salarial de aquél momento, pero el contrato que se ofreció a Crawford hipotecó parte del futuro de los angelinos. En lo que muchos sospechan que fue un movimiento principalmente motivado por la prevención de que Jamal no volviera a la Bahía o se subiera al carro de Cleveland para conseguir un anillo, Clippers se complicó y mucho su verano de 2017. No solo por el enésimo fracaso en Playoffs: además de J.J., Chris Paul y Blake Griffin, sus dos grandes estrellas, pueden salirse de sus contratos. Además Pierce se retira, Mbah a Moute también tiene una player option y Bass, Felton y Alan Anderson terminan contrato. Se pueden encontrar con 6 jugadores en el roster y sin las caras del proyecto de los últimos años que han servido para atraer a tantos veteranos, pues recordemos que el cartel de la marca Clippers en sí es bastante bajo.

A priori el ex de Duke no renovará por menos de 11 millones al año, que es lo que está cobrando el hijísimo y también suplente Austin Rivers, y no sería raro que pidiera un salario superior al de su compañero de posición dada su diferencia de edad (32) y, por ende, expectativa de rendimiento. No tanto porque J.J. prometa subir sus prestaciones sino porque lo normal y que viene sucediendo es que Jamal las baje. En los últimos 4 años en los que han compartido equipo el dorsal 11 ha pasado de promediar 18,6 puntos a 12,3, el cual es su peor registro en los últimos 15 años. La carrera del rey del 3+1 (lleva 50 en su carrera en regular season, tope histórico de la liga y que dobla al segundo, quién curiosamente es Redick) está en clara decadencia y el contrato que firmó es algo así como que te toque la lotería.

Pero Redick no necesita suerte. Aspira a un buen último contrato por unos cuantos años que al menos estos otros 10 equipos le pueden dar:

• Grizzlies: Tony Allen termina contrato y Vince Carter también. Llevan mucho tiempo sin un escolta anotador de garantías.
• Hawks: mucho dinero por gastar una vez pierdan a Millsap aunque el apostar por Tim Hardaway Jr podría cerrar la puerta a Redick.
• Heat: con Riley puede pasar de todo. Si renovara/n Waiters y/o James Johnson las opciones serían menores.
• Knicks: si Carmelo se mueve de la Gran Manzana también puede pasar de todo.
• Magic: vuelta a su primera casa, donde estuvo 7 años. Públicamente no ha rechazado esa posibilidad. Aunque la llegada de Ross complica un poco las finanzas, los expiring de Jeff Green (15) y Jodie Meeks (6,5) podrían ser suficientes.
• Nets: la próxima temporada lo endeudado por el magnate ruso Mijaíl Prójorov ya no es ninguna barbaridad y tienen que conseguir buenos jugadores para crecer, pero creemos que solo una oferta máxima podría atraer a JJ.
• Pelicans: necesitan exteriores y tiradores como el comer teniendo asegurada ya la pintura con sus dos torres. Su GM ya ha dejado caer el nombre de Redick en una rueda de prensa de objetivos.
• Pistons: es probable que KCP reciba una gran oferta este verano por parte de algún otro equipo y Detroit decida no igualarla si consiguen otro jugador de un perfil similar. JJ sería además una gran opción porque aportaría experiencia a una plantilla repleta de jóvenes.
• Spurs: hay match en cuanto a filosofías y se quedarían solo con Danny Green si se retira Manudona. Opción menos descabellada de lo que parece.
• 76ers: otra decisión arriesgada como la de Brooklyn y que solo justificaría mucho dinero de por medio pero, si Simmons es tan bueno como dicen, Embiid está sano y consiguen un buen base en el Draft, se podría formar una plantilla muy interesante.

En definitiva, Redick es, para Doc Rivers, su Ray Allen en Los Ángeles, y tal comparación le dota de una prioridad deportiva respecto a otros que el GM Dave Wohl deberá trasladar a la oferta económica que le realicen si quieren conservarle. Su prioridad no hace mucho era seguir y, en cualquier caso, seguro que J.J., que es un tío aseado y de principios, escuchará a todos los interesados.