Se paraliza el traspaso de Carmelo Anthony

Knicks y Rockets no logran llegar a un acuerdo

Carmelo Anthony
El futuro de Carmelo Anthony sigue en el aire. Nil Alemany (SB)

Si hace unos días el acuerdo parecía inminente, ahora está más lejos que nunca. Houston Rockets y New York Knicks no se ponen de acuerdo. El problema parece estar en Rayan Anderson, que es el jugador que los Rockets ofrecen en el intercambio. A los Knicks no les interesan y ambos equipos quieren una tercera o incluso cuarta franquicia para encajar todas las piezas.

Los de la gran manzana quieren obtener a cambio de Melo, una ronda de draft, un jugador joven y liberar espacio para acabar de cerrar la plantilla con algún jugador veterano de nivel. Todo esto parece muy complicado, o casi imposible en un acuerdo directo entre Cleveland Cavaliers o Houston Rockets. Es por eso que los Knicks quieren sentarse a hablar con Carmelo Anthony y que este pueda abrir sus opciones de destino, ya que su cláusula de veto no da total libertad a los Knicks.

Una nueva pieza del puzzle ha aparecido en Nueva York, y es la llegada como general manager de Scott Perry, que también tendrá su voz en todo este embrollo. De no lograr algo beneficioso en el intercambio, los Knicks no cierran la puerta a que Melo se pueda quedar una temporada más. De este manera el verano siguiente los 4 amigos (Carmelo Anthony, LeBron James, Dwyane Wade y Chris Paul) serían agentes libres y podrían jugar juntos como muchas veces se ha rumoreado.

Aún así la prioridad es llegar a un acuerdo y encontrar un destino para el mencionado Anderson. Varios equipos se quieren aprovechar de la situación y han sonado nombres como New Orleans Pelicans, Denver Nuggets, Portland Trail Blazers o Phoenix Suns. Estos últimos habrían ofrecido a Brandon Knight a los Knicks, pero el hasta ahora, presidente en funciones Steve Mills habrían pedido a Eric Bledsoe, que tuvo sus mejores temporadas a las ordenes del entrenador knickerbocker Jeff Hornacek.

Veremos si este culebrón tiene fin y los Knicks retoman las negociaciones con los Rockets. Lo que parece totalmente necesario es la ayuda de un tercer equipo para contentar a todas las partes.