Stephen Curry, dispuesto a bajarse el sueldo

Stephen Curry ha pasado de ser uno de los jugadores peor pagados de su equipo a uno de los que más cobrará en toda la historia. Su salto de calidad ha sido abismal en las tres últimas temporadas y se ha ganado por mérito propio un nuevo contrato con unas cifras extraordinarias. Sin embargo, el jugador sabe que hubiera sido muy difícil retener a otros jugadores si se completaba este nuevo contrato, pero los Warriors decidieron recompensarle ante el aviso de que Durant iba a hacer esta estrategia y poder retener a sus estrellas.

Ante el desconocimiento de la situación, fue el base el que le propuso esta idea a Bob Myers, GM del equipo que no le dejó terminar la frase para recompensarle con 201 millones de dólares.

“Se lo propuse a Bob Myers, no me importaba reducir mi contrato para poder retener a Andre y Shaun. Lo que hizo Kevin Durant habla mucho de su personalidad, no le importa el dinero, solo quiere ganar y ha demostrado un gran compromiso con la entidad. Somos como hermanos y estábamos preparados para llevar esto acabo. Podría haber sido yo, o Klay en un par de años, Draymond… Pero él quiso adelantarse para hacerle el trabajo más fácil a Bob”.

Los «derechos Bird», clave para la continuidad del proyecto

Contaban con la ventaja de los “derechos Bird”, mediante los cuales podían superar el límite salarial con la renovación de Stephen Curry sin que esto tuviera ningún tipo de repercusión en el resto de sus compañeros. El gran beneficio fue para los propietarios, que se ahorraron muchos millones en impuesto de lujo.

Esto es un privilegio que no tenía Kevin Durant que podría haber reclamado 36 millones de dólares anuales y dejar a los Warriors sin Andre Iguodala. El próximo verano, los de la Bahía recibirán los “derechos Bird” de Kevin Durant y podrán ofrecerle el máximo.

Los directivos de la franquicia de San Francisco tienen un rompecabezas con los contratos de sus jugadores y lo que esto puede suponer para ellos. Retener a tantas estrellas puede ser perjudicial para ellos, sobre todo para sus carteras debido a la gran cantidad de millones que tendrán que gastarse en impuesto de lujo. Este problema solo se podría solucionar con la generosidad de un grupo de jugadores que está dispuesto a rebajarse el sueldo para mantenerse unidos.