El Movistar Estudiantes acogía en el WiZink Center al Morabanc Andorra en la decimosexta jornada de la Liga Endesa y, concretamente, a Jaime Fernández, hijo pródigo del equipo, como líder del conjunto rival. En un partido donde la defensa de los madrileños fue muy buena, Alec Brown se impuso en los dos lados de la pista.
- Quinteto titular del Movistar Estudiantes: Omar Cook, Aleksandar Cvetkovic, Sylven Landsberg, Savané Sitapha y Alec Brown.
- Quinteto titular del Morabanc Andorra: Jaime Fernández, David Jelínek. Vladimir Jankovic, Oliver Stevic y John Shurna.
Empezaba muy bien el Estudiantes, comandado en la organización de juego por Omar Cook al son de los pitos a Jaime Fernández por parte de algún que otro sector de la grada. Alec Brown, además, comandaba desde la anotación. Además, la buena defensa del conjunto de casa, ahogaba al principio a un Morabanc sin ideas. Los madrileños supieron mantener la ventaja y el parcial fue de 22-16.
El Movistar Estudiantes seguía acertado al comienzo del cuarto, tanto en ataque liderados por Edgar Vicedo como en defensa. Muy sólido el conjunto de Maldonado, al igual que en el primer cuarto del partido. Por momentos, el Morabanc se recuperaba y jugaba más suelto, pero aún así seguía errático en sus lanzamientos de larga distancia. Con una buena defensa de los andorranos nos íbamos al descanso, 43-34 en el marcador.
El tercer cuarto comenzó como un intercambio de canastas entre los dos equipos, bastante igualado. El objetivo de los de casa era mantener la ventaja, algo que se les suele atragantar en terceros cuartos. Y así fue. La igualdad fue la tónica de este periodo, con cierta recuperación de los visitantes, sobre todo en defensa. El marcador era de 59-55, tras una falta de triple cometida sobre Albicy.
En el último cuarto, el que comenzó a errar fue el equipo local, que se dejó empatar por primera vez en todo el partido, lo que auguraba un final frenético. Alec Brown tomó las riendas del equipo, con varias acciones en defensa y un triple que resonó en todo el estadio. Acompañado de Hakanson y Brizuela, ponían el +9 en el marcador a mitad del cuarto. La defensa estudiantil se volvió rocosa y lograron mantener la ventaja para acabar ganando el partido por 81-72.
