Hace 30 años Spud Webb se impuso a los gigantes

Inspira, espira. Los aficionados que inundan las gradas jalean su nombre, pero él tan solo oye su propia respiración. Inspira, espira. Da un paso, la respiración tranquila y acompasada, el corazón a mil por hora, da el siguiente. Ha fallado el primer intento de su último mate, si comete otro error las posibilidades de obtener el título se le escaparían entre los dedos. La canasta parece más grande que nunca. Ya no hay marcha atrás. Lanza el balón contra el suelo y se eleva por los aires para dejar a todos con la boca abierta y realizar el mate que le arrebataría el título a Dominique Wilkins.

Así es como terminaba el concurso de mates de la NBA de 1986 en el que se enfrentaban dos gigantes de este deporte como lo fueron Michael Jordan y Dominique Wilkins, los cuales protagonizaron un año antes un duelo que pasaría a la historia como uno de los mejores concursos de mates. Lo que nadie se esperaba aquel día era que un jugador de 168 centímetros de los Atlanta Hawks pudiera volar más y mejor que todos los presentes aquella noche entre tantas estrellas. De esta forma, Anthony Jerome «Spud» Webb, le arrebató por solo 2 puntos el título de campeón del concurso de mates a su compañero de equipo en los Hawks, Dominque Wilkins. Con su victoria se convirtió en el jugador más bajito en ganar un concurso de mates en la NBA. Sin embargo, nunca tuvo fácil cumplir su sueño.

Este jugador de 60 kilos de peso estuvo condicionado por su altura durante toda su carrera y ya en el instituto no le permitieron jugar por ello. Cuando, finalmente, tuvo la oportunidad de jugar guió a su equipo hasta los PlayOffs en varias ocasiones, promediando 26 puntos por partido en esta etapa. En su último año fue seleccionado como uno de los 10 jugadores entre 5000 para formar parte del All-State. A pesar de todos sus logros, su altura volvió a ser un impedimento, y no fue reclutado por ninguna universidad de la división I-A. Spud no se dio por vencido y decidió jugar para  Midland Junior College, con los que ganó un título nacional en 1982. Un año más tarde el asistente de North Carolina State, Tom Abatemarco, propuso a Spud al entrenador jefe, Jim Valvano. Al ver la altura del jugador, el entrenador le dijo a su asistente:

«Si ese es Spud Webb estás despedido».

Tras la visita, Valvano quedó tan sorprendido con su juego que le ofreció una beca para jugar en la NCAA. Una vez más su altura se interpuso y no fue drafteado para la NBA. No obstante, ni por esas se dio por vencido y continuó jugando para la United States Basketball League, hasta que en 1985 fue seleccionado en la cuarta ronda del draft por los Detroit Pistons. Nada más ser elegido fue cortado por la franquicia, pero la suerte le sonrió esta vez y le dieron la oportunidad de probar con los Atlanta Hawks. A partir de aquí, como se dice, el resto es historia.

Hace pocos días se cumplían 30 años de aquel día, en el que levantó a todos los espectadores de sus asientos, demostrando que no importa ser bajito para practicar este deporte. Spud Webb, que es una abreviatura de «Sputnik» fue apodado de esta forma por su abuela, y sigue muy relacionado con el deporte y el concurso de mates. En el año 2006 ayudó a Nate Robinson, de 175 cm, a ganar este concurso, poniéndose entre el aro y el jugador para que le saltase por encima.