Nick Young y un triple de infarto se cargan a los Thunder de Westbrook

Oklahoma City Thunder 109 – 111 Los Angeles Lakers

Nick Young
Un nuevo Nick Young se ha instalado en LA/Keith Allison (CC)

Llegaban los Lakers al Staples Center con la imperiosa necesidad de ganar, tras dos derrotas consecutivas en casa debía ser su momento. Mientras tanto, los Thunder de Westbrook no parecían el mejor rival para conseguirlo, 9 derrotas consecutivas de Lakers ante Thunder, no les ganaban desde 2014, lo que en baloncesto es casi como un siglo entero de sufrimiento púrpura y oro.

El encuentro empezaba con malas noticias para los locales, por el anuncio por la baja por molestias en su rodilla de D’Angelo Russell, segundo partido fuera por descanso, y al menos estará fuera el próximo encuentro también. Mala cosa tener a tu mejor base fuera cuando te enfrentas a Russell Westbrook, quizás, solo quizás, el mejor base de la competición, con permiso de Stephen Curry.

Pero los de LA se encontraron en uno de sus buenos días, de esos donde sorprenden a propios y extraños, y donde la pizarra del novato, en los banquillos, Luke Walton encuentra magia entre los suyos. Así fue como Lakers dominaron el partido en su extensión, pese a que la juventud e inmadurez de su plantel se cargase las diferencias al final del encuentro.

Walton y los suyos supieron frenar por momentos al indomable, Russell Westbrook, que por momentos no estuvo productivo en esta noche angelina, lo que hizo que Lakers lo tuviesen más fácil por momentos en su Staples. Las claves, las encontraríamos en los no habituales, y es que para colmo, Julius Randle, que jugó, también llegó tocado al partido, y eso se noto en su rendimiento en la pista.

Así pues, Walton dio el balón a un especialmente inspirado José Calderón que produciría 12 puntos, 6 rebotes y 4 asistencias, muy acertado desde la línea de tres, y que supo ver focos ofensivos en otro de sus compañeros, Timofey Mozgov que dominaría la zona con 16 puntos y 3 rebotes vitales para su equipo.

Pero la cosa no terminó ahí para Lakers, y encontraríamos los hombres del partido en la aportación de Nick Young y Jordan Clarkson. El segundo volvería hacerlo, aparecer desde la segunda unidad y ser un golpetazo al estómago para la segunda unidad rival, con 18 puntos, 3 rebotes, 4 asistencias y 4 robos, sin duda, fue uno de los hombres del partido.

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Y, por supuesto, Nick Young, el hombre del encuentro, pararía por momentos en lo defensivo a Westbrook, algo que pudiese parecer de locos antes del partido, y sobretodo con sus 17 puntos, 3 de ellos vitales en los últimos instantes para dar la victoria, in extremis, a Los Angeles Lakers. Hoy, sin duda, fue la noche de Nick Young.

En el lado de la derrota, el de Oklahoma City Thunder, todo se resume en lo que sale de las manos de Russell Westbrook. Pese a que esta noche Lakers consiguiesen la machada de frenarle por momentos, Russ se iría a los 34 puntos, 8 rebotes y 13 asistencias, eso si, 8 pérdidas que fueron el principio del fin para los suyos. A su lado, Steve Adams, fue su mejor compañero, con 20 puntos, demostrando ser el hombre de confianza de Westbrook, demostrando entender a lo que juega toda una estrella de la NBA.

Pese a las intentonas de Westbrook, este no fue su día, el destino se lo tenía guardado para Nick Young, posiblemente una de las noticias más felices de esta temporada en la NBA. Young parecía muerto como jugador, Luke Walton le dio su última oportunidad, y vaya si la cogió. Swaggy P está de vuelta.