OPINIÓN | Las 3 mejores promociones del Hall of Fame

Ser seleccionado para el Hall of Fame es uno de los mayores logros que se pueden conseguir en la carrera de cualquier persona relacionada con el mundo del baloncesto. Recientemente se anunció la promoción de 2020 para el Salón de la Fama, donde aparecen tres nombres predominantes que cambiaron la historia del baloncesto moderno como Kobe Bryant, Tim Duncan y Kevin Garnett.

En los Estados Unidos, puesto que la actualidad en estos momentos no está en otro sitio que no sea en la emergencia sanitaria mundial del COVID-19, han querido poner sobre la mesa un debate más que interesante al respecto. ¿Es la mejor clase de la historia?

En SomosBasket.com, queremos aportar nuestro TOP-3 al respecto, donde tendremos en cuenta los tres principales nombres de cada clase para hacer este ranking tan particular. Puedes aportar en la sección de comentarios tu opinión al respecto, así como aportar más opciones para la lista.

1. Promoción de 2020 (Kobe, Duncan, Garnett)

De la misma manera que la gran mayoría de los participantes en esta discusión, nuestro número 1 no podría ser para otra. La clase de 2020 cuenta con tres nombres de gran calado en la historia del deporte, así como tres jugadores que entran perfectamente en el TOP-5 histórico de su posición. Kobe Bryant lidera la lista, en el primer año de elegibilidad para entrar en los libros de historia del baloncesto. Su repentina muerte ha dejado huérfanos a millones de aficionados alrededor del mundo, pero siempre tendrá su lugar en este Salón de la Fama. Tim Duncan, uno de los mejores ‘4’ de la historia le acompaña, mientras que Kevin Garnett pone la guinda a un pastel muy vistoso.

Kobe Bryant

Probablemente el segundo mejor escolta de la historia por detrás del mito por excelencia de este deporte, Michael Jordan. A Kobe nunca le pesó el balón y siempre estaba dispuesto a tomar los tiros más importantes de su equipo, incluso mucho antes de ganarse la titularidad en los Lakers. Un ganador nato, con una ética de trabajo sin precedentes que se marcha justo un peldaño por detrás de MJ, con 5 anillos y con la sensación de haber hecho todo lo posible día tras día para ser el mejor jugador de baloncesto posible.

Logros: 5 veces campeón de la NBA, MVP de la temporada (2008), 2 MVP de las Finales, 18 veces All-Star, 4 veces MVP del All-Star, 11 veces en el mejor quinteto, 9 veces en el mejor quinteto defensivo, 4º máximo anotador de la historia (33.643).

Tim Duncan

Llegó a la liga siendo el pick número 1 de su Draft, aterrizando en unos Spurs que han sido sinónimo de regularidad desde entonces. Tim Duncan nunca se ha perdido unos Playoffs y se convirtió sin hacer mucho ruido en uno de los mejores ala-pívots de la historia, si no en el mejor. Una superestrella humilde que supo repartir su porción con Tony Parker y Manu Ginóbili para formar uno de los mejores tríos de siempre. Cinco campeonatos de la NBA y dos MVPs que redondean una carrera ejemplar y sinónimo de profesionalidad.

Logros: 5 veces campeón de la NBA, 3 MVPs de las Finales, 2 MVPs de la temporada, 15 veces All-Star, 10 veces en el mejor quinteto, 8 veces en el mejor quinteto defensivo, Rookie del año (1998).

Kevin Garnett

Uno de los primeros jugadores en demostrar que se podía dar el salto desde el instituto a la NBA sin sufrir consecuencias negativas. Kevin Garnett fue uno de los primeros ‘point-forwards’ de la competición así como un defensor feroz que siempre supo como sacar de quicio a su rival.

Hizo todo lo que pudo en Minnesota, ganando el premio a MVP pero siempre quedándose corto en postemporada. Tuvo que poner rumbo a Boston, donde se reencontró con un viejo compañero de AAU, Paul Pierce, que sería el complemento perfecto para conseguir su mayor logro, aquel título de 2008 frente al eterno rival, los Lakers de Kobe y Pau.

Logros: Campeón de la NBA (2008), MVP de la NBA (2004), 14 veces All-Star, 4 veces en el mejor quinteto, 9 veces en el mejor quinteto defensivo, Máximo anotador de la historia de los Minnesota Timberwolves.

2. Promoción de 2009 (Jordan, David Robinson, Stockton)

En la segunda posición colocamos a la promoción de 2009, donde se encuentra una figura que resuena por encima de los demás, Michael Jordan. El mejor jugador en jamás poner un pie en una cancha de baloncesto compartió clase con dos leyendas de la competición que le permiten estar en una de las mejores posiciones de la historia del Salón de la Fama. David Robinson, uno de los mejores pívots de la historia al cual le costó liderar a los Spurs a dos anillos, y tuvo que hacerlo con la ayuda del ya mencionado Tim Duncan. John Stockton se encontró en su carrera un gran muro rojo custodiado por Jordan y Pippen, aunque tuvieron sus oportunidades de llegar a lo más alto y conquistar el campeonato. Eso no le quita ser uno de los mejores bases que se han visto y el máximo asistente de la historia de la competición.

Michael Jordan

The GOAT hizo lo que quiso en las 15 temporadas que disputó en la NBA. Fue simplemente imparable, ganando en 10 ocasiones el premio a mejor anotador de la temporada, superando a Wilt Chamberlain y conquistando seis anillos en seis finales. Jordan es considerado como el mejor two-way de la historia, habiendo ganado en 1988 el premio a mejor defensor de la temporada. Uno de los mejores atletas de todos los tiempos que hace que su clase del Hall of Fame sea de las mejores de siempre.

Logros: 6 veces campeón de la NBA, 6 veces MVP de las Finales, 5 MVPs de la temporada, 10 veces en el mejor quinteto, 9 veces en el mejor quinteto defensivo, Mejor defensor de la NBA (1988),14 veces All-Star, ESPY atleta del siglo (2000)

David Robinson

El almirante es considerado como uno de los mejores pívots de todos los tiempos. Ganó dos títulos y un MVP de la temporada en 1994-95, aunque sus campeonatos llegaron de la mano de un Tim Duncan que permitió a los Spurs dar el siguiente paso y convertirse en el mejor equipo de la liga a finales del siglo XX. Al igual que su compañero Duncan, pasó sus 14 temporadas vistiendo la camiseta de San Antonio Spurs.

Logros: 2 veces campeón de la NBA, MVP de la NBA (1995), Rookie del año (1990), Mejor defensor de la NBA (1992).

John Stockton

El líder asistente de todos los tiempos en la NBA es el nombre perfecto para cerrar este trío del Salón de la Fama que siempre será recordado como uno de los mejores. John Stockton estuvo al pie del cañón durante toda su temporada y pudo jugar al máximo nivel hasta bien entrado en sus 30. Stockton se convirtió en uno de los bases más prolíficos de todos los tiempos y junto con Karl Malone formó un dúo de ensueño en Utah Jazz, aunque sus intentos de ganar un anillo siempre se vieron frustrados por parte de los Chicago Bulls de Jordan.

Logros: 2 veces en el mejor quinteto, 5 veces en el mejor quinteto defensivo, 10 veces All-Star, 9 veces líder en asistencias de la temporada, máximo asistente de la historia de la NBA.

3. Promoción de 1980 (Jerry West, Roberston, Jerry Lucas)

Una clase de auténticas leyendas de la competición que desarrollaron sus carreras en las décadas de los 60 y 70, esa gran olvidada por gran parte del público pero que será recordada como una de las primeras en convertir el baloncesto en interés de muchos otros países, dando lugar a la formación de generaciones nacionales de jugadores de gran talento que compitieron a gran nivel.

Jerry West

“El logo” fue uno de los pioneros en su tiempo, modernizando el puesto de base gracias a su gran control del balón y un tiro en suspensión que pronto se convirtió en la norma en toda la liga. A pesar de contar con unos registros asombrosos, solamente pudo ganar un campeonato con los Lakers y un MVP de las Finales, pero precisamente fue en unas que terminó perdiendo, la única vez en toda la historia que ha sucedido algo así.

Logros: Campeón de la NBA (1972), MVP de las Finales (1969), 14 veces All-Star, 10 veces en el mejor quinteto, 4 veces en el mejor quinteto defensivo.

Oscar Robertson

Oscar Robertson fue uno de los primeros jugadores en demostrar que podía hacer de todo sobre la pista. Se convirtió en el primer y único jugador en toda la historia en promediar un triple-doble durante una temporada, entera, algo que terminaría siendo batido por Russell Westbrook, quien consiguió hacerlo en dos cursos consecutivos. Solamente ganó un campeonato, pero su impacto en el juego siempre será recordado.

Logros: Campeón de la NBA (1971), MVP de la NBA (1964), Rookie del Año (1961), 9 veces en el mejor quinteto.

Jerry Lucas

Para finalizar con esta clase, tenemos a Jerry Lucas. Fue un ganador nato en todos los niveles, y se convirtió en 1973 cuando ganó la NBA con los New York Knicks en el primer jugador en la historia en ganar el título en el Instituto, la Universidad y la NBA. Lucas tuvo que esperar hasta bien entrada su carrera para ganar ese título, pero siempre será recordado por su habilidad anotadora, finalizando con más de 20 puntos por partido durante gran parte de su trayectoria.

Logros: Campeón de la NBA (1973), Rookie del Año (1965), Campeón de la NCAA (1960).