ANÁLISIS | Chris Paul recupera, inesperadamente, su valor en Oklahoma

Con el traspaso de Westbrook a Houston este verano, los Thunders daban por acabado una etapa. Ya no quedaba ninguno de los titulares que jugó las finales de la NBA frente los Heat. Los de Oklahoma recibían a varias rondas del draft junto a Chris Paul. Empezaba una reconstrucción. Muchas voces decían que Paul acabaría traspasado en busca de jugadores jóvenes pero, con la gran temporada del base de North Carolina, los planes han sido otros.

Vuelve a brillar una estrella

Paul se ha convertido en el timón del equipo. Tras su paso por Houston y varias especulaciones sobre problemas en el vestuario, en los Thunder ha encontrado un lugar donde esta a gusto. Tiene una gran relación dentro del vestuario con varios jugadores, sobre todo con Shai Gilgeous-Alexander. Su relación es excelente. Le enseña, le aconseja y le guía. Ha ayudado, sin duda, en la explosión del joven jugador de los Thunder en esta temporada. Paul está contento en su nuevo equipo, vuelve a sonreír en la pista y eso se nota. Después de cuatro temporadas, ha vuelto a jugar el partido de las estrellas.

No era All-Star desde el 2016 con los Clippers, en la que promedió 18.1 puntos, 5 rebotes y 9.2 asistencias. Este año, una gran campaña individual, junto a buenos resultados para los suyos, le han llevado a serlo de nuevo. Ha firmado 17.7 puntos, 4.9 rebotes y 6.8 asistencias. Quizá ha habido jugadores con mejores guarismos que se han quedado fuera, pero el impacto de CP3 en el juego va más allá de la estadística.

El hombre de hielo

Esta temporada, los Thunder poseen un récord de 40-24. De los 64 partidos que han jugado, 40 se han decidido en los cinco últimos minutos. Son el equipo que más partidos han disputado en el “clutch time”. Han sabido adaptarse estupendamente a ello, o por lo menos, con 27 victorias, han sido el equipo con más triunfos. Gran culpa de estos buenos resultados es de Chris Paul.

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El base se ha convertido en el mejor jugador en el ‘Clutch Time’ de toda la NBA. Cuando la presión se hace palpable en el ambiente, él maneja el compás. Sus estadísticas en los minutos finales es excelsa. Máximo anotador de la liga con 146 puntos, mejora su 48.9% en los tiros de campo por encima del 50% (53.5%) y no le tiembla el pulso des del tiro libre (93,4%). Por si fuera poco, es uno de los mejores en el apartado defensivo. Con 10 recuperaciones es, junto a su compañero Shai, el mejor ladrón de la NBA.

Menos tiros, mejores prestaciones

Paul ha cambiado su manera de ser protagonista. Lanza menos a canasta pero es más inteligente en sus decisiones. Cuida mejor el balón, reparte 3.1 asistencias por cada balón que pierde, el mejor de su carrera y sus porcentajes en el tiro han aumentado.

Cuando el balón quema, la manera más fácil de sumar es desde la línea de tiros libres. Él lo sabe bien, muy bien. Es el jugador que más faltas recibe en toda la NBA. Esta temporada, ha provocado 94. Ha forzado más faltas de campo que de tiro, una dato extraordinario entre los jugadores que más faltas reciben.

Sabe leer perfectamente el juego y cuando debe dar protagonismo a sus compañeros. Este año ha formado un gran trío con Shai Gilgeous-Alexander y Dennis Schroder. El liderazgo de Chris Paul se ha prolongado sobre ellos. Ambos jugadores han jugado a un nivel superior respecto a la última temporada. En su primera temporada con los Thunder, Shai casi ha doblado sus números en anotación y se ha convertido en el máximo anotador del equipo (19.3 ppp). En el caso del alemán, ha firmado una de sus mejores temporadas en la liga. Con 19 puntos, 4,1 asistencias y 3,7 rebotesde promedio ha presentado su candidatura al premio del 6MOTY.

Estos tres jugadores se complementan a la perfección. Donovan lo sabe. La versatilidad de Shai, el talante ofensivo de Schroder y la batuta de Paul han compartido muchos minutos en pista. Este trío tiene uno de los mejores ratings ofensivos (127.1) además del mejor Net rating de toda la liga (28.6).Donovan tiene plena confianza en ellos. Los hace coincidir en pista cuando el ataque está espeso y hace falta anotación.

Este ha sido uno de los motivos por los que los Thunder están instalados en las plazas de playoffs esta temporada. Se le suma la gran temporada de Gallinari en su faceta ofensiva y el trabajo sucio de Steven Adams, promediando prácticamente un doble-doble por partido. La amenaza de estos cuatro jugadores que rodean a Chris Paul en el quinteto de los de Oklahoma ha liberado al base del peso de anotación y se ha podido dedicar a controlar mejor el tempo del partido. Este es uno de los motivos por los que Paul se juega menos tiros que en otras temporadas pero es más eficaz en su toma de decisiones.

¿Cuál será su siguiente paso?

A sus 35 años, Chris Paul ha disipado cualquier tipo de duda que había respecto a su rendimiento. Se ha vuelto a convertir en uno de los mejores jugadores de la liga. Varios equipos de la liga han mostrado interés en él. Pero hay un hándicap, su gran contrato. El base de los Thunder ya ha confirmado que aceptará su ‘player option’.  Con 36 años cobrará 44.2 millones de dólares. A pesar de estas declaraciones se le ha relacionado con varios equipos.

El que más ha dado que hablar han sido los Lakers. Los de California verían factible su traspaso, solo, si su núcleo principal de jugadores no vistieran la camiseta oro y púrpura en la siguiente temporada. Un hecho hipotético.

Otro equipo que ha mostrado interés han sido los Knicks. Los de la gran manzana han expresado su deseo de fichar una estrella a través de un traspaso y Chris Paul podría ser el elegido. Su futuro, a día de hoy, es incierto. Un tema importante serán las lesiones. Ha sufrido varias en los últimos años que le han llevado a perderse un gran número partidos en Houston. Todo parece indicar que se ha recuperado perfectamente. Este año ha jugado 63/64. A pesar de su recuperación, es un factor a tener en cuenta.