Antes, durante y después de Bledsoe

¿Cómo les ha ido a los Suns sin Bledsoe?
  • Analizamos la temporada de Phoenix Suns 
  • Análisis desde la perspectiva de Bledose
  • El base se ha perdido gran parte de la temporada

La temporada de Phoenix Suns parecía terminada antes de comenzarla. Los rumores de tanking abordaban a un equipo inmerso en una reconstrucción total: sin Nash, sin Gortat, sin Lindsey Hunter… Todo era nuevo para los de Arizona.

Un nuevo proyecto implica muchas cosas, y todas ellas ocurrieron en Phoenix. Llegaba Jeff Hornacek como entrenador, brillante jugador en su época, pero levantaba dudas sobre si sería capaz de llevar un equipo joven y sin experiencia. El roster sufrió muchísimos cambios, quedándose solo 5 jugadores de la pasada campaña (Dragic, Markieff y Marcus Morris, P.J. Tucker y Frye) y con nuevos jugadores como Gerald Green, Miles Plumlee o Eric Bledsoe, del que no se esperaba una explosión tan pletórica.

El término tanking rodeaba el US Airway Center, algo que a los aficionados de los Suns no les hizo mucha gracia, pero ni de lejos Hornacek iba a empezar su carrera como entrenador con la mancha de dejarse perder para reconstruir. Sus sistemas están demostrando ser muy eficaces y están dado un tremendo rendimiento, colocando al equipo en puesto de Playoffs y superando a rivales claramente superiores. Pero si había algo que no se esperaba esta temporada en Phoenix era la explosión de Eric Bledsoe, que ha sido tan buena e inesperada que Ryan McDonough, GM de Phoenix, le quiere como estrella en el nuevo proyecto de Arizona.

Los Suns desplegaron un buen juego, derrotando a bastantes equipos muy duros y estando siempre por encima del 50% de victorias. Todo era muy bonito hasta la lesión de menisco de Eric Bledsoe, el mejor de lo que llevaban de temporada, que devolvió a los Suns a la realidad. Pero, ¿han notado tanto en Phoenix la baja de dos meses de Bledsoe? ¿o han mejorado como equipo? Esto es lo que me dispongo a analizar.

Phoenix antes de la lesión de Eric Bledsoe:

La temporada de los Suns no pudo empezar de mejor manera, ganaron a Utah Jazz con un buzzer-beater de Bledsoe, y durante los siguientes partidos la batuta de Hornacek desplegó un gran juego con el ex-Clipper demostrando su potencial. Phoenix siguió jugando a un gran nivel y venciendo a rivales con mejor roster, situándose en puestos de Playoffs en la durísima Conferencia Oeste. Las cosas empezaron a torcerse cuando el base no jugó ante los Grizzlies el 2 de enero por culpa de un esguince en su rodilla derecha, y a partir de ahí, lo que parecía un simple esguince de rodilla sumado a una temprana vuelta a las canchas, terminó con su menisco lesionado y un paso por el quirófano para extraer la parte dañada. Esta lesión dejaba a los Suns sin su mejor jugador y sin el favorito para el MIP (Most Improved Player), reduciéndose las posibilidades de estar en la postemporada. Hasta que Bledsoe cayó lesionado, Phoenix logró un balance de 19 victorias y 11 derrotas, con el base promediando 18 puntos y 5´8 asistencias.

Phoenix durante la lesión de Eric Bledsoe:

Hornacek no ha podido contar con su pupilo durante 31 partidos, pero esto no ha impedido que siguieran haciendo un buen baloncesto y que otros jugadores tomaran más importancia. La baja de Bledsoe ha propiciado mejoras en ciertos jugadores y peores rendimientos en otros, viéndose especialmente afectados los rendimientos de Goran Dragic, Gerald Green, Miles Plumlee e Ish Smith.

Durante la lesión de Bledsoe, Goran Dragic ha asumido el papel de estrella a la perfección. El esloveno ha desarrollado su mejor baloncesto ofensivo, realizando partidos que nunca olvidará y siendo clave en varias victorias de los Suns. El base elevó tanto su juego que se le esperaba en el All-Star Game, pero de manera sorprendente le dejaron fuera en favor de Anthony Davis. El hecho de que Dragic se exprimiera en ataque bajó su rendimiento defensivo, una faceta en la que destaca, pero con la vuelta de Bledsoe debería jugar mejor que nunca. Otro jugador que se ha beneficiado de la lesión de Bledsoe ha sido Gerald  Green, que ha demostrado que calidad no le falta, llegando a batir su récord de anotación con 41 puntos ante OKC. Green ha realizado otras grandes actuaciones anotadoras, enseñando que sabe hacer otras cosas aparte de mates. Ish Smith, jugador con muy pocos minutos hasta la lesión de Bledsoe, también ha contado con más importancia dentro de la rotación y ha demostrado potencial con buenas actuaciones, apuntando ser un jugador con talento. Quizás el único jugador que bajó su rendimiento fue Miles Plumlee, que tras un gratificante inicio de campaña ha notado demasiado la baja de un experto en el pick&roll como Bledsoe, bajando sus prestaciones ofensivas. En el aspecto defensivo y reboteador sigue siendo el ancla de los Suns en la pintura, pero debe desarrollar su juego ofensivo más allá de hundirla debajo del aro. La llegada de Leandro Barbosa, muy conocido en Arizona por disfrutar allí de su etapa dorada, trajo minutos de calidad al banquillo hasta que se fracturó la mano y entró en la lista de lesionados como baja indefinida.

Sin Bledsoe los Suns han sabido defenderse durante 31 partidos, consiguiendo 17 victorias y 14 derrotas, lo que les dejaba en una dura batalla con los Warriors, Mavericks y Grizzlies por los tres últimos puesto de Playoffs.

Phoenix tras la lesión de Eric Bledsoe:

Por fin volvía, por fin regresaba el estandarte de los Suns de esta campaña. Era el retorno de su baluarte tanto defensivo como ofensivo, era la vuelta a las canchas de Eric Bledsoe tras más de 2 meses sin jugar, pero su regreso no iba a ser muy dulce. Phoenix llevaba 3 derrotas consecutivas, estas más la derrota ante Cleveland en su vuelta hacían un total de 4 derrotas consecutivas, algo que los Suns no se podían permitir en la Conferencia Oeste si querían llegar a los Playoffs. Pero fue volver Bledsoe y volvieron las buenas noticias. Los Suns estaban necesitados de victorias, y los chicos de Hornacek se pusieron el traje de faena para vencer a Boston y Toronto, y de esta manera seguir peleando por uno de los 8 primeros puestos del Oeste.

La temporada de los Suns está teniendo mucho mérito, independientemente de si consiguen entrar o no en Playoffs, aunque con Bledsoe de vuelta, y secundado por Dragic, pueden conseguirlo perfectamente. Ahora Hornacek tendrá que repartir más que nunca las tareas de Dragic y Bledsoe en ambos lados de la cancha, además de las continuas aportaciones de Green y la dureza interior de Plumlee.

Eric Bledsoe ya lleva disputados 4 encuentros desde su vuelta a las canchas, promediando 9´7 puntos, 5´2 asistencias y 5´4 rebotes en en 26´5 minutos por partido y los Suns llevan 2 derrotas (Cavaliers y Nets) y 2 victorias (Celtics y Raptors).

Los Suns han sido más débiles sin Bledsoe, pero su baja ha servido para que ciertos jugadores tomasen confianza o vieran sus limitaciones. Es por esto que Hornacek debe trabajar en repartir el trabajo entre Goran Dragic y Eric Bledsoe para tener una de las mejores parejas exteriores de la NBA tanto en ataque como en defensa. Gerald Green y sus grandes aportaciones anotadoras son muy necesarias para un roster que no va muy sobrado en cuanto a resultados. La aportación de jugadores como Plumlee o Len debe ser más dura en lo que queda de mes para que Phoenix logre el objetivo de los Playoffs.

Con la gran temporada de Bledsoe, demostrando mucha calidad y potencial en todos los aspectos del juego con solo 24 años, muchos equipos intentarán «robárselo» a los Suns en verano, pero el GM ya dejó muy claro que igualarían cualquier puja. Cabe recordar que Eric Bledsoe es agente libre restringido este verano, lo que implica que puede recibir ofertas, pero que si Phoenix las iguala seguirá jugando en Arizona. Es conocido el interés de Los Angeles Lakers en intentar contratar a Bledsoe, pero McDonough fue muy claro respecto al tema y no piensa en otra cosa que no sea ver a Bledsoe vistiendo la elástica de los Suns por muchos años más.

Como conclusión no solo debemos analizar el rendimiento de Bledose y su posible (yo creo que segura) continuidad en Phoenix, si no el futuro de esta franquicia que cuenta con uno de los mejores backcourt de la liga, con un entrenador de muchísima calidad (uno de los favoritos al COY), un buen grupo de role-players y jugadores de talento, además de rondas de Draft  y de mucho espacio salarial. El futuro pinta soleado en Phoenix, y mucho más si van con Eric Bledsoe de la mano.

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