Después de un verano más o menos movido, con idas y venidas, con retornos y con despedidas, con líderes que se quedan y otros que se van, con unos que abandonan la NBA en busca de minutos, con una ornada de rookies que dominará la liga, con jugadores que prometen el oro y el moro…tras todo eso, algo sigue destacando por encima de todo.
Tenemos a un jugador, al mejor tirador de la historia de la NBA, sin equipo, por increíble que parezca después de la cantidad de rumores sobre su persona. Ray Allen se encuentra, a 22 de Septiembre y algo más de un mes para que empiece la NBA, sin contrato. Y no será por falta de ofertas, pues muchos equipos se han interesado en Ray: Chicago Bulls, San Antonio Spurs, Cleveland Cavaliers y Washington Wizards.
Hay que decir que el propio jugador comentó entre sus más cercanos que solo firmaría por un equipo: por el que en su vestuario contara con LeBron James, el único hombre que le puede asegurar pelear por el anillo, y con el que fraguó una excepcional amistad en sus dos año en Miami, con el que disputó dos finales de la NBA, logrando un anillo, el segundo para su colección después del de 2008 en Boston.
En Boston coincidió con Paul Pierce, y son los Wizards, equipo actual de The Truth, el que más insistencia parece estar mostrando en hacerse con los servicios de Sugar Ray. En Boston formaron una pareja letal, llevando al equipo a varias finales, logrando un anillo, y podrían reencontrarse en la capital, eso sí, con un proyecto mucho menos competitivo y que difícilmente podrá pelear por estar arriba en el Este, una conferencia venida a más este último verano.
Sinceramente yo pienso que Ray Allen tomará la decisión de pelear por otro anillo de la mano de su amigo LeBron. Un jugador como Ray Allen, con su carácter, su metodología de entrenamiento, su ambición y su importancia en la liga no puede despedirse sin decir adiós y de la forma que lo hizo. Y es que 39 años puede que pesen mucho, y que el hecho de haberlo ganado reste ambición, pero en el caso de Allen dudo que sea así.
Si nos paramos a ver sus números de la última temporada en Miami, promedió 9.6 puntos, 2.8 rebotes y 2 asistencias, dejando claro que no es para nada un jugador retirado, sino todo lo contrario, y que sigue estando capacitado para dar minutos de calidad desde el banquillo.